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"Agridulce, pero el cambio siempre es bueno y esperamos con ansias nuestro nuevo capítulo". Estas son las sinceras y emotivas palabras que Marie-Chantal Miller ha pronunciado para definir su estado de ánimo, por la diferente y significativa etapa que ahora comienza junto a su marido. La mujer de Pablo de Grecia abría su corazón después de que su hijo pequeño, Aristides Stavros, haya sido el último de sus vástagos en abandonar la casa familiar.
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Los fuertes vínculos que unen a la Familia Real griega con la monarquía británica
Son muchos recuerdos los que se agolpan en la mente de la nuera de la reina Ana María, como cuando se encargaba de acompañar bien temprano a sus niños al colegio. "No más despertares por la mañana para llevarlos a la escuela a tiempo", ha señalado al respecto con ternura. "Es una locura pensar que hemos hecho 24 años de carreras" para que estos jovencitos entraran en clase a su hora, añadía al echar la vista atrás.
La buena sintonía de la reina Letizia y Marie Chantal, juntas y compartiendo fotos del móvil
"Han sido los mejores años de crianza y ahora es el momento de algo diferente", confiesa Marie-Chantal con el corazón en la mano. "¡No puedo creer que el nido esté vacío!", apostilla después de que el benjamín de la familia ingresara esta semana en un internado para seguir con su formación académica. Tras la marcha de Aristides a sus quince años, se completa la salida del hogar de todos los descendientes de un matrimonio muy feliz y unido.
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Este hecho, como es lógico, ha provocado sentimientos encontrados en la pareja puesto que a la alegría y el orgullo que supone ver cómo medran y crecen los suyos, se une la evidente triste y melancolía que sienten en estos momentos por no tenerlos a su lado en el día a día. Máxime, cuando siempre han sido una piña. Tanto el jefe de la Casa Real helena -primo del rey Felipe- como su esposa saben que es ley de vida y que tarde o temprano ocurriría algo así, viendo cómo su prole se ha hecho mayor y busca su propio camino.
Independiente vive desde hace tiempo Olympia de Grecia (27 años), la primogénita, convertida en toda una 'it girl' que tiene su propia firma de cosméticos y es imagen de marcas de lujo como Louis Vuitton. Por edad le sigue Constantino Alexios (24), el heredero al trono no reinante que reside en la Gran Manzana y mantiene una relación con la modelo y aristócrata británica Poppy Delevigne (37).
Olympia, Constantino y Achileas de Grecia presumen de cuerpazos en aguas del Mediterráneo
Después se encuentra Achileas Andreas (23), el príncipe actor que ya ha comenzado a abrirse camino en la industria hollywoodiense y que destaca por su gran simpatía; mientras que el penúltimo es Odysseas Kimon (tiene 18 pero cumple 19 el próximo domingo), gran apasionado de la moda -como su madre- y que ha lanzado ya su propia marca de ropa deportiva. Ninguno de los citados reside ya en la mansión situada en el Upper East Side de Nueva York de su progenitores, quienes también viajan con frecuencia a Reino Unido donde tienen más propiedades.