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Susto por la salud de Farah Diba después de su ingreso en un hospital y posterior alta a causa del covid-19. La emblemática dama iraní de 83 años acudía este viernes a un centro médico tras contagiarse del virus y sufrir los "efectos secundarios de los medicamentos" que había tomado para combatirlo, según informaba su secretaría en un comunicado. En la misma nota, tranquilizaban sobre su estado ya que la emperatriz estaba recibiendo un "tratamiento eficaz" y pronto estaría "recuperada por completo", añadían. Efectivamente, tan solo un día después de lo ocurrido, la mujer del fallecido Mohamed Reza Pahlavi ha podido volver a casa al encontrarse mucho mejor, ampliaba este sábado el portal Voa. Como muchos otros royals del mundo, la última emperatriz de Irán no ha podido escapar a los efectos de la pandemia y, en este caso a pesar de su edad y ser considerada población de riesgo, los ha sobrellevado afortunadamente bien.
La cumbre histórica de Farah Diba, Carolina de Mónaco y Brigitte Macron en París
A mediados del pasado noviembre, Farah Diba y su nieta Noor protagonizaban un emocionante reencuentro tras dos años sin poder verse por culpa de las restricciones. La joven de 29 años, que reside en Nueva York (EE.UU.), es todo un icono de estilo que triunfa como influencer y ha demostrado ser digna heredera del glamour de su abuela. Hija de los príncipes Reza y Yasmine Pahlavi, quien recientemente ha superado un cáncer, Noor se dedica al mundo de la moda y siente gran admiración por la que fue tercera y última esposa del sha de Irán. "Nunca me dejes otra vez", le decía con enorme cariño mientras nos mostraban sus entrañables imágenes juntas, donde primero se abrazaban con gran sentimiento y después disfrutaron de un delicioso almuerzo. Fue sin duda un día inolvidable para Farah, cuyos ojos reflejaban la felicidad del momento.
Las emotivas imágenes del reencuentro de Farah Diva y su nieta Noor
Al cumplirse 40 años de su exilio, Farah Diba recordaba cómo vivió su salida forzosa de un país al que no ha perdido la esperanza de regresar algún día. Desde su lujoso apartamento parisino, también hablaba sobre la relación con sus hijos y de la faceta más desconocida de su difunto marido, al que defendía como todo un caballero y un padre cariñoso. "Lo más importante era mantener cierta dignidad durante unos momentos tan dolorosos”, confesaba sobre la salida forzosa de su tierra en declaraciones a Point de Vue, lamentado cómo después tuvieron que pasar tiempo "vagando de un país a otro", señalaba. En cuanto a Mohamed Reza Pahlavi, su esposa quiso reivindicar la figura de un hombre que, a su juicio, transmitía una imagen más dura y fría de lo que en realidad era. "No os podéis imaginar la manera en la que se comportaba con los niños”, aseveraba al recalcar su lado más paternal.
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