ho4029boda alemana© ©

El español José Antonio Ruiz-Berdejo presenta a su novia, Alessandra Gorla, ante la realeza europea

Asistieron a la boda real de Alexander de Schaumburg-Lippe y Mahkameh Navabi


14 de octubre de 2021 - 13:04 CEST

La élite europea se dio cita, el pasado sábado nueve de octubre, en la boda del príncipe Alexander de Schaumburg-Lippe y Mahkameh Navabi. Él es el jefe de la Casa de Schaumburg-Lippe, un antiguo principado soberano que se extinguió con la caída del Imperio alemán, en 1918. Ella, una reconocida pianista iraní.

Para ti que te gusta

Lee 8 contenidos al mes solo con registrarte

Navega de forma ilimitada con nuestra oferta 80 aniversario

1 año por 49€ 9,80€

Este contenido es solo para suscriptores.

Celebramos nuestro 80 aniversario con un 80% de descuento.

Suscríbete 1 año por 49€ 9,80€

TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE CADA MES POR ESTAR REGISTRADO.

Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.

© Hola

El enlace reunió a miembros de la realeza como el príncipe Guillermo de Luxemburgo y su esposa, Sibilla, prima segunda del Rey Felipe VI; los príncipes Ernst August y Ekaterina de Hannover, o Carlos de Habsburgo-Lorena y su nueva pareja, la condesa y empresaria Christian Nicolau de Almeida Reid. También asistió Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión de la Unión Europea, así como integrantes del mundo de la aristocracia. Entre ellos, el conde Charles von Faber-Castell y su esposa, Melissa Eliyesil, o el abogado italo-español José Antonio Ruiz-Berdejo. El heredero del conde de Sigurtà acudió junto a su nueva pareja, la italiana Alessandra Gorla, que se convirtió en una de las más elegantes de la boda, al lucir unos vestidos diseñados por ella misma y realizados en el taller de Medina Centellas, que combinó con las creaciones de Alexia Álvarez de Toledo, creadora de sombreros y tocados, en boga entre la jet set.

© CordonPress

Los novios, tras el ‘sí, quiero’.

La ceremonia religiosa tuvo lugar en la iglesia de Bückeburg, una localidad de Baja Sajonia, donde el cónyuge, de sesenta y dos años, posee el impresionante castillo Schloss Bückeburg. Allí, se celebró posteriormente el banquete. Los novios no escatimaron en ningún detalle: hubo un carruaje tirado de caballos, una tarta de seis pisos… 

© CordonPress

José Antonio Ruiz-Berdejo y Alessandra Gorla.

© GettyImages

Charles von Faber-Castell y Melissa Eliyesil.

© CordonPress

Carlos de Habsburgo-Lorena y la condesa Christian Nicolau de Almeida Reid.

© CordonPress

Los príncipes Guillermo y Sibilla de Luxemburgo.

© GTres

Lilly zu Sayn-Wittgenstein, primera esposa del príncipe Alexander, junto a sus hijos, Heinrich Donatus y Lana, fruto de su segundo matrimonio.

© CordonPress

Junto a estas líneas, la princesa Ekaterina de Hanno­ver.

© CordonPress

La princesa Ekaterina de Hanno­ver quien aparece con su marido, el príncipe Ernst August.

© GTres

Lilly zu Sayn-Wittgenstein, primera esposa del príncipe Alexander, con el que posa, bajo estas líneas.

Todo un enlace real donde la novia, de cuarenta años, deslumbró con un impresionante vestido de alta costura de los diseñadores iraníes Azzi & Osta, que combinó con la tiara Schaumburg-Lippe Palmette, de casi dos mil diamantes y propiedad de la familia de su marido. Con esta impresionante joya familiar también se casaron con el príncipe sus dos esposas anteriores: la princesa Lilly Sayn-Wittgenstein-Berleburg, con la que tuvo a su hijo mayor, el príncipe heredero Heinrich Donatus de Schaumburg-Lippe, y Nadja Anna Zsoeks, con quien fue padre de dos hijas, las princesas Friederike y Philomena.

© CordonPress

© ©

Arriba, el príncipe Ernst August de Hannover y su esposa, la princesa Ekaterina, durante la cena de gala previa a la boda. Sobre estas líneas, José Antonio Ruiz-Berdejo, cónsul honorario de Bélgica en Sevilla, junto a su nueva pareja, Alessandra Gorla, doctora en ingeniería informática y especialista en derecho informático.

Curiosamente, Lilly, la primera de sus exmujeres, ejerció de dama de honor en la nueva boda del príncipe. Un enlace único que contó con una fiesta previa y que gran parte del gotha europeo no se quiso perder.

© GTres

Una imagen de los novios.