El incendió que se originó hace tres días en los suburbios al norte de Atenas amenaza el Palacio de Tatoi, el primer hogar de la reina Sofía. Las llamas han devorado parte del frondoso bosque donde se encuentra la finca, pero no han alcanzado por ahora el edificio, una de las contrucciones más bellas del país. Sin embargo, las informaciones sobre el alcance del fuego en el cementerio real son muy confusas. Si bien se decía que las llamas no habían entrado en el camposanto donde están, entre otras, las tumbas del rey Pablo y la reina Federica, padres de la reina Sofía, un periódico ha mostrado imágenes en las que se ven varias lápidas acechadas por el fuego, aunque no serían las que contienen los restos de los abuelos maternos de don Felipe.
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Nicolás de Grecia, hijo del rey Constantino y, por tanto, sobrino de la reina Sofía, está muy pendiente del fuego que rodea el Palacio de Tatoi. Según publica el periódico griego Estía, el príncipe regresaba a Atenas desde Porto Heli cuando notó que el humo provenía de la zona. Inmediatamente, se puso en contacto con su hermano, el príncipe Pablo, y le informó de que iría a Tatoi para comprobar en primera persona hacia dónde se dirigía el catastrófico incendio. Pero cuando la situación comenzó a descontrolarse y las llamas se acercaban cada vez más a la finca, Nicolás se dio cuenta de la gravedad del asunto y de la necesidad de trasladar los objetos allí almacenados.
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El papel del príncipe fue crucial, ya que colaboró con el Ministerio de Cultura para determinar en qué contenedores se encontraban los artículos más relevantes. No fue una operación fácil, pues el tiempo apremiaba y había que seleccionar las piezas de mayor valor histórico para el país, además había que evitar que sufrieran daños durante el transporte. Por razones de seguridad, el Ministerio de Cultura no ha revelado qué artículos se han retirado de Tatoi ni a dónde han ido exactamente. Lo que sí ha comunicado es que "serán devueltos en cuanto las condiciones lo permitan". Sin embargo, el periódico Estía asegura que entre los objetos que se pusieron a salvo se encontraban los uniformes oficiales de los reyes Jorge, Pablo y Constantino.
Pablo de Grecia, por su parte, ha dado las gracias "a los valientes bomberos, al ejército y a los voluntarios por su continuo esfuerzo para ayudar a salvar a Grecia de los horribles incendios". Su mujer, Marie Chantal de Grecia, también ha dado las gracias a todos aquellos que luchan para que las llamas no destruyan uno de los lugares más significativos de la Familia Real griega. "El bosque de Tatoi al norte de Atenas está en llamas. Se dice que ayer se quemó el 10 por ciento del bosque. Allí están las tumbas de la familia de mi marido y también las tumbas de sus abuelos", ha publicado junto a una foto de las lápidas del rey Pablo y la reina Federica.
"Todos estamos terriblemente disgustados y oramos por todos los afectados por estos trágicos incendios. Nuestro más sincero agradecimiento a nuestros increíbles bomberos que luchan incansablemente para salvar lo que pueden. Estos bosques son el oxígeno de nuestra tierra y debemos protegerlos y amarlos. Grecia está en mi corazón siempre", ha añadido.
Historia del palacio de Tatoi
El rey Jorge I comenzó la adquisición del terreno que ocupa el recinto de Tatoi en 1870 y el palacio quedó deshabitado en 1967, cuando el rey Constantino de Grecia –hermano de doña Sofía- fracasó en su intento de derrocar a la junta militar y él y su familia se marcharon al exilio. Tras décadas de abandono, el palacio de Tatoi estaba a punto de renacer antes de que las llamas lo pusieran de nuevo en peligro. Gracias a un proyecto de 130 millones de euros del Gobierno griego, iba a transformarse en un hotel, restaurante y museo con una finca eco-friendy en la que se venderán productos locales. El Ministerio de Cultura se había propuesto tener el primer edificio listo para el año 2023, una fecha que podría verse afectada por el incendio.