Están siendo unas Navidades extrañas pero muy especiales para los reyes Constantino y Ana María de Grecia. Si hace unos días disfrutaban en familia de la boda de su hijo pequeño, el príncipe Phillippos, que se celebró por sorpresa en la estación suiza de Saint Moritz, con temperaturas bajo cero, ahora disfrutan del sol de un paradisiaco lugar en compañía de su hija, la princesa Theodora, afincada en Los Ángeles desde hace años, está exprimiendo al máximo su viaje a Europa.
Como tantas y tantas bodas, la de la princesa Theodora con el abogado estadounidense Matthew Kumar, prevista para la pasada primavera en Grecia, tuvo que ser aplazada por la pandemia, sin embargo, la princesa convertida en actriz, no quiso perderse la reunión familiar con motivo de la boda de su hermano Phillipos. Una vez cruzado el Atlántico, la Princesa ha podido disfrutar de una Navidad que ha calificado de íntima y acogedora en compañía de los Reyes de Grecia.
Theodora de Grecia se compromete con un abogado americano
Aunque sus publicaciones en redes sociales son muy puntuales, la princesa Theodora no se ha resistido a compartir una imagen en la que disfruta con sus padres de una comida familiar al aire libre y con el mar al fondo. Una estampa paradisiaca de la que no da más pistas, pero que todo apunta a que puede ser la residencia familiar en la que viven Constantino y Ana María de Grecia en Porto Jeli, una propiedad en la que recibieron recientemente a ¡HOLA!, que mostró en sus páginas cómo es el apacible retiro de los Reyes griegos en el Peloponeso. La publicación ha sido muy celebrada por sus seguidores y sus cuñadas, las princesas Tatiana y Marie Chantal, comentan con alegría la imagen, igual que lo hace su sobrina, la princesa Olympia, mientras que el príncipe heredero, Pablo de Grecia, afirma: "Adoro esto".
De momento, con humor y optimismo, la princesa y su prometido se conformaron con una comida de "no boda" para señalar la fecha en la que hubieran contraído matrimonio, el pasado 23 de mayo. Para hacer un guiño a los orígenes de ella y al lugar en el que se hubiera llevado a cabo la celebración, la pareja optó por un menú a base de productos y recetas griegos y recordaron que cuando todos estén a salvo sus planes seguirán en marcha.
Todavía no ha trascendido si la princesa y su prometido han puesto nueva fecha para una celebración que prometía reunir de nuevo a parte de la Familia Real española con la Familia Real griega en una gran boda real. Los que no han querido esperar para darse el “sí, quiero” han sido el príncipe Phillipos y Nina Flohr, que han optado por una boda más íntima y reducida en un enclave muy especial, la exclusiva estación de Saint Moritz. A pesar de que por motivos sanitarios los invitados han sido los mínimos y que solo los padres ejercieron de testigos del enlace, entre los que sí asistieron a la celebración posterior estuvieron la infanta Cristina y su hija Irene.