La monarquía tailandesa vuelve a estar en boca de todos. Tras el polémico confinamiento del rey Vakiralongkom, más conocido como Rama X, que pasó la cuarentena en un exclusivo hotel de Alemania, con una veintena de acompañantes, una nueva decisión ha abierto un nuevo capítulo en la corte asiática. El Rey ha restituido a Sineenat Wongvajirapakdi su condición de consorte real, un año después de que el monarca la despojara de esta condición y de todos sus títulos, por querer equiparse a la Reina.
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Esta sorprendente reconciliación ha sido anunciada esta misma semana por la Gaceta Real del Gobierno y en ella el monarca, de 68 años, asegura que Sineenat, de 35, es inocente de los delitos que se le imputaron “por lo tanto, la retirada de sus títulos reales y su destitución del servicio de la Corona y sus rangos militares nunca ha tenido lugar”, reza el comunicado.
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La dignidad de ‘consorte real’ o nueva acompañante fue dada por el Rey el 28 de julio de 2019, dos meses después de que Vakiralongkorn se casara por sorpresa, a tres dias de su coronación, con la actual reina Suthida, una antigua azafata de vuelo, que había formado parte del cuerpo especial de seguridad real. Era la primera vez en un siglo que un soberano hacía el nombramiento de una consorte, un título que había caído en desuso. Antes de Rama X, la última vez que se usó fue en 1921 durante el reinado de Vakiravudh (Rama VI). Hasta el siglo XX, los reyes tailandeses eran polígamos, práctica que fue abolida en 1935.
En octubre de 2019, Palacio alegó que “el comportamiento de Sinnenat no respetó la monarquía, causó conflictos entre los funcionarios de la Familia Real y creó malentendidos entre el público”. Anteriormente y antes de ser nombrada concubina real, ya se había opuesto a la coronación de la Reina e incluso presionó para que no se llevara a cabo y “violó la autoridad real al emitir órdenes que involucraban las actividades de Sus Majestades”, rezaba el comunicado real. Para intentar apaciguar los ánimos de la consorte real se la dio este título para que no generara más problemas, pero “actuó desafiante hacia Sus Majestades, usó su nueva posición para emitir falsas órdenes reales y ordenó que se cumplieran sus deseos personales sin rendir cuentas, diciendo que actuaba en nombre de Su Majestad”. Con esto pretendía aumentar su popularidad y conseguir su propio beneficio con la esperanza de que el Rey le otorgara una distinción más alta equiparable a la del monarca.
La destitución de la acompañante oficial provocó una oleada de despidos entre los trabajadores de Palacio. En concreto se prescindió de seis altos funcionarios reales por sus “malas acciones”. Se trataban de una enfermera personal del monarca, un alto cargo oficial de Policía -el teniente general Sakolket Chantra que ejercía funciones en la Guarida Real-, guaridas reales y un veterinario.
Esta no es la única controversia que ha tenido Rama X en los últimos tiempos. Su comentado confinamiento en Alemania, la marcha a Tailandia para participar en una acto de su dinastía y su posterior retorno al país germano, con agresión a un fotógrafo de prensa incluido le han hecho estar en el foco mediático durante todo este año.