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Toda boda que se precie es el broche de oro perfecto a una historia de amor de cuento de hadas, pero cuando ese enlace se enmarca en un palacio o un castillo o tiene como protagonistas a un príncipe y una princesa, con más motivo. A lo largo de estos doce meses, miembros de la realeza europea han protagonizado románticos e inolvidables 'sí, quieros' que nos han hecho soñar y que, en algunos casos, han tenido lugar en varias ceremonias, celebradas en distintos días y diferentes escenarios. Es el caso de Carlota Casiraghi y Dimitri Rassam, Louis Ducruet y Marie Chevallier y Lady Gabriella Windsor y Thomas Kingston.
22 de mayo, Lady Gabriella Windsor, Reino Unido
El pasado 22 de mayo, tres días después de cumplirse el primer aniversario de boda de los duques de Sussex, Reino Unido volvió a vestirse de gala para acoger el gran día de otro miembro de la familia Windsor. Lady Gabriella Windsor, la hija de los príncipes Michael de Kent y sobrina lejana de la reina Isabel II de Inglaterra, contrajo matrimonio con el financiero Thomas Kingston y lo hizo en el mismo escenario que habían elegido el príncipe Harry y Meghan Markle un año antes, la capilla de San Jorge del Castillo de Windsor. También, como ellos, los novios eligieron la casa de campo de Frogmore House para continuar con las celebraciones posteriores a la misa.
1 de junio, Carlota Casiraghi, Mónaco
Apenas diez días después volvíamos a vivir una boda real, en este caso civil y en Mónaco. Carlota Casiraghi daba, por fin, el 'sí, quiero' a Dimitri Rassam después de que el enlace se pospusiera meses antes. La pareja decidió celebrarlo por todo lo alto. Escogieron dos fechas y dos lugares para sellar su amor, primero por lo civil y, posteriormente, por la iglesia. La primera de ellas llegaba el 1 de junio en los salones de Estado del Palacio Grimaldi, el mismo que eligieron también Andrea Casiraghi y Tatiana Santo Domingo; Alberto y Charlene de Mónaco; Pierre Casiraghi y Beatrice Borromeo y Carolina y Stéfano Casiraghi, los padres de la novia. Los festejos siguieron después en los jardines de palacio, donde los invitados disfrutaron de actuaciones musicales en directo.
30 de junio, Carlota Casiraghi, Francia
Antes de que terminara el mes llegaba la esperada ceremonia religiosa, en esta ocasión en la abadía Sainte-Marie de Pierredon, situada en Saint-Rémy-de-Provence, un lugar de gran significado para Carolina de Mónaco y sus hijos. La lavanda y los homenajes a esta última fueron los protagonistas del evento. Primero porque Carlota decidió casarse el mismo día en el que su madre selló su amor con Phillippe Junot. Además, tras la muerte de Stéfano Casiraghi la familia se refugió aquí para comenzar una nueva etapa en sus vidas.
26 de julio, Louis Ducruet, Mónaco
Al igual que había hecho su prima un mes antes, el hijo de Estefanía de Mónaco decidió celebrar una boda civil y otra religiosa. El 26 de julio, después de siete años de relación, Louis Ducruet contrajo matrimonio con Marie Chevallier en una íntima y familiar ceremonia llevada a cabo el Ayuntamiento de Mónaco. La pareja no esperó 30 días como Carlota Casiraghi para continuar con las celebraciones, dado que el escenario que acogería el siguiente evento no se encontraba en otro país, sino a pocos metros. Por ello, la boda religiosa llegó al día siguiente.
27 de julio, Louis Ducruet, Mónaco
La Catedral de Mónaco fue testigo de excepción de esa segunda boda de Louis Ducruet. De nuevo, los familiares y amigos más cercanos acompañaron a los novios en su gran día. Marie Chevallier llegó al lugar a bordo de un impresionante coche clásico. También en esta ocasión los homenajes a la familia Grimaldi estuvieron más presentes que nunca, ya que el templo religioso sirvió también para acoger la boda de Rainiero y Grace Kelly, 63 años atrás.
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