La otra quedada de los 'royals' en Japón
Después del fastuoso 'Sokuirei Seiden no Gi' en el Palacio Imperial, muchos miembros de la realeza participaron de un banquete estatal
La entronización del emperador Naruhito de Japón ha supuesto una cumbre de miembros de la realeza, entre los que se encontraban los Reyes Felipe y Letizia, sin precedentes y ha sumido al país asiático en dos días de históricas celebraciones, Aunque el Sokuirei Seiden no Gi, la ceremonia de entronización propiamente dicha, tuvo lugar este martes y fue el acto central, los nuevos emperadores han querido seguir agasajando a sus ilustres invitados. Al día siguiente, Su Majestad Imperial y su esposa, Masako, prepararon un banquete que fue ofrecido por el primer ministro japonés, Shinzo Abe, y su esposa, Akie Abe, en el que han estado Máxima y Guillermo de Holanda, El gran duque de Luxemburgo, el príncipe Alberto de Mónaco, Carlos Gustavo y Sofía de Suecia, Federico y Mary de Dinamarca y los reyes de Bután, entre otros miembros de la realeza.
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Ante un salón abarrotado y dispuesto con mesas redondas, los invitados han podido disfrutar de una actuación teatral típica japonesa, el kabuki, que se caracteriza por el uso de maquillajes y máscaras por parte de los actores y de vistosos trajes tradicionales. El primer ministro Abe también dirigió unas palabras a los asistentes para cerrar dos días históricos.
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Los reyes de Holanda llegaron a la cita juntos y del brazo. La reina Máxima se decantó por un jumpsuit en color burdeos que acompañó de una mini capa de pedrería, que estrenó el pasado 17 de septiembre con motivo del Día del Rey firmada por Jan Taminiau, uno de sus diseñadores favoritos para las grandes ocasiones. Carlos Gustavo de Suecia acudió con su hija, la princesa heredera Victoria, que eligió para la ocasión un vestido floral con transparencias. Una de las parejas reales que causó sensación a su llegada fue el matrimonio formado por Federico y Mary de Dinamarca. La nuera de la reina Margarita se decantó por un vestido recto blanco, con transparencias con lunares plateados.
Este banquete ha cerrado dos días de ceremonias milenarias que dan comienzo a la nueva era Reiwa, que significa hermosa armonía, y que sucede a la era Heisei. Fue el pasado 1 de mayo cuando Naruhito de Japón recibió las insignias del poder imperial ante los miembros del Gobierno tras la abdicación de su padre, el emperador Akihito, que tuvo lugar el 30 de abril de 2019, la primera renuncia al Trono del Crisantemo que se producía en 200 años.
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