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Hacía días que la información circulaba por las redacciones de los medios de comunicación, pero no ha sido hasta ahora cuando la noticia se ha hecho oficial: el rey Abdalá II de Jordania, marido de Rania y monarca desde hace dos décadas, ha nombrado finalmente a su hermana, la princesa Haya bint Al-Hussein, diplomática en la embajada de Jordania en Reino Unido. Desde hace semanas, varios medios de comunicación árabes manejaban esta cuestión y, de hecho, la revista ¡HOLA! también adelantó en su día la decisión del monarca, que ahora se habría hecho efectiva.
Tal y como ha confirmado la agencia Arabian Royal, basándose en Al-Quds Al-Arabi, con este movimiento Abdalá II ha querido proteger a su hermana, que se encuentra inmersa en una disputa con su marido, Mohamed bin Rashid Al-Maktum, emir de Dubái. Todo comenzó el pasado mes de junio, cuando la princesa Haya se marchó con sus dos hijos, Jalila, de 11 años, y Zayed, de 7, a Reino Unido, donde pidió asilo y donde empezó a gestarse una crisis diplomática. Tras la huida, la hija del fallecido Husein de Jordania solicitó el divorcio a través de la justicia británica.
La princesa Haya se enfrenta a su esposo en un tribunal de Londres
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Pese a que en un principio el rey Abdalá se mantuvo al margen del litigio de su hermana para evitar esa crisis, sí movió sus hijos para protegerla y demostrarle su apoyo incondicional. Le proporcionó la seguridad que ella requería -pues Haya llegó a temer por su vida- y le facilitó un nuevo trabajo, el mismo que se ha hecho oficial ahora. Esta decisión tuvo mucho que ver con el hecho de que las autoridades británicas desestimaron la demanda de asilo de la princesa. El movimiento del rey otorgó la inmunidad y la protección para su hermana y sus dos sobrinos.
Alí de jordania, el gran apoyo de su hermana Haya tras su divorcio del emir de Dubái
El último capítulo, dejando a un lado el nuevo cargo de la princesa Haya, tenía lugar este mismo martes, cuando la hermana de Abdalá y su ya exmarido tenían que haberse visto las caras en los tribunales británicos a fin de velar por el futuro de los hijos de ambos. Cabe recordar en este punto que la hija de Husein reclama para sí la custodia de los pequeños y exige además una cláusula para que ninguno de los dos se vea obligado en un futuro a contraer matrimonio de manera forzada. Sin embargo, el emir de Dubái se ausentaba de la vista y en lugar de acudir a los juzgados se dejó ver en una subasta de caballos que tenía lugar en la ciudad de Newmarket, a menos de dos horas en coche de Londres.
Las peticiones de la princesa Haya en el divorcio con el emir de Dubái
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