Felipe y Matilde de Bélgica han visitado varios hospitales para preocuparse por el estado de salud de los heridos en los atentados ocurridos en el aeropuerto de Zaventem y en la estación de metro de Malbeek. En compañía de primer ministro de Francia, Manuel Valls, acudieron al hospital militar Reina Astrid donde pudieron hablar con los médicos que están tratando a los heridos.
Los soberanos recordaron también a las víctimas durante un minuto de silencio y posteriormente visitaron diferentes escenarios de los atentados. Se trasladaron al aeropuerto de Zaventemm, que permanece cerrado jueves y viernes, en compañía del primer ministro de Bélgica, Charles Michel. Un lugar en el que realizaron una ofrenda floral en las inmediaciones donde detonaron los explosivos.
Alrededor de 270 personas -según apunta la Fiscalía Federal- se encuentran heridas tras el doble atentado del pasado martes en Bruselas. Entre ellas, cuatro españoles que siguen hospitalizados con pronóstico favorable, según han comunicado a Efe fuentes diplomáticas. De los nueve españoles heridos, tres fueron dados de alta durante las primeras horas, mientras que los otros dos han recibido el alta entre ayer y hoy. Al menos 31 personas han muerto en los atentados ocurridos en el aeropuerto de Zaventem y la estación de metro de Maalbeek.
- Felipe de los belgas: 'Matilde y yo compartimos vuestro sufrimiento'
- Los reyes Felipe y Letizia: 'El dolor de Bélgica es también el dolor de España'
Poco después de que ocurrieran los atentados, Felipe de Bélgica mostraba sus condolencias a los familiares y amigos de las víctimas en un discurso televisado. “Hoy nuestro país está en duelo. Para cada uno de nosotros, el 22 de marzo no será jamás un día cualquiera. Todos padecemos el dolor de las vidas que se han roto, de las profundas heridas que se han infringido. Matilde y yo compartimos el sufrimiento de todos los que han perdido a seres queridos en estos cobardes y repugnantes atentados. Expresamos todo nuestro apoyo a los miembros de los servicios de emergencias y de seguridad y nuestro reconocimiento a todo aquel que espontáneamente ha ofrecido su ayuda. De cara a la amenaza, continuaremos respondiendo juntos con firmeza, con calma y con dignidad. Tenemos confianza en nosotros mismos. Esta confianza es nuestra fuerza”, aseguró Felipe de Bélgica.