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Madrileña de pura cepa, Ana María Botella Serrano, a quien todos conocemos tan solo como Ana Botella, nació en el seno de una clásica familia numerosa en 1954. Es la mayor de trece hermanos, por lo que siempre se sintió una priviligiada por haber podido estudiar e ir a la Universidad.
¿Qué estudios tiene Ana Botella?
Cursó sus estudios de primaria y secundaria en un colegio religioso de Las Irlandesas y se licenció en Derecho y desde entonces siempre trabajó para la Administración.
¿Quién es la pareja de Ana Botella?
Conoció a su marido, el politico y expresidente del Gobierno José María Aznar en el viaje de fin de carrera por Atenas, Roma y Estambul. A los pocos días del encuentro iniciaron su relación y poco después se unieron en matrimonio. Para entonces ya era una mujer moderna: "A los 23 años me casé y los primeros años de matrimonio era yo quien mantenía a mi familia".
Un largo camino hasta La Moncloa
Ha pasado media vida siguiendo los pasos de su marido. De Logroño a Madrid, después Valladolid hasta volver en 1992 a la capital española, Ana Botella ha vivido entre continuos traslados de domicilio y trabajo. Cuando su marido fue proclamado presidente del Gobierno se trasladó al palacio de La Moncloa, aunque asegura que eso no cambió en exceso su vida, aunque algo sí que lo hizo ya que como esposa del presidente renunció a su trabajo anterior, para realizar otras tareas como acompañar a su marido en los viajes de Estado, organizar y asistir a cenas oficiales y actos públicos, además de colaborar con distintas asociaciones y organizaciones no gubernamentales. "Procuro que todo salga lo mejor posible" decía por aquel entonces Ana.
Primera mujer en la alcaldía de Madrid
Militante del Partido Popular desde 1978 nunca pensó en dedicarse a la política aunque al final aunque al final acabó atrapada en ella. En 2003, fue elegida concejal del Ayuntamiento de Madrid y nombrada segunda teniente de alcalde, ocupándose de la Concejalía de Gobierno de Empleo y Servicios a la Ciudadanía hasta 2007.En las elecciones de 2007 fue la número dos en la lista del Partido Popular nuevamente para el Ayuntamiento de Madrid y ocupó la Concejalía de Medio Ambiente.
En junio de 2011 fue ratificada como segunda teniente de alcalde y en diciembre de ese mismo año tras el abandono de Alberto Ruiz Gallardón como alcalde fue elegida por el pleno del Ayuntamiento como alcaldesa de Madrid, convirtiéndose así en la primera mujer en toda la historia en ocupar este puesto.
Su frase más viral: 'relaxing cup of café con leche'
Fue durante aquellos años, concretamente en 2013, cuando Ana con motivo de la candidatura de Madrid o los Juegos Olímpicos de 2020 pronunció una frase que acabaría siendo viral y que no es otra que su recordado "relaxing cup of café con leche in Plaza Mayor". "Me hace mucha gracia y me lo tomo a broma. No nos dieron los Juegos Olímpicos, pero te aseguro que no fue por culpa del 'relaxing cup'", aseguraba Botella en una entrevista en El Mundo en agosto del 2023.
Tan solo un año después, en 2014, Ana decidió no presentarse a las elecciones municipales de Madrid, poniendo fin a su mandato en 2015 y pasándole el testigo a Manuela Carmena.
Madre de tres hijos y abuela de siete nietos
Madre de tres hijos, José María, Ana y Alonso recuerda el nacimiento de sus retoños como uno de los momentos más felices de su vida. Asegura que sigue muy enamorada de su marido y que si volviera a nacer se casaría de nuevo con él. Además es abuela de siete nietos, un papel con el que, en más de una ocasión ha confesado estar encantada.
¿Dónde vive Ana Botella?
Ana Botella y su marido viven actualmente a caballo entre Madrid y Marbella. En la capital habitan una exclusiva residencia en la urbanización de Monte Alina, en Pozuelo de Alarcón y en la provincia malagueña adquirieron en 2014 un lujoso chalet en la urbanización Guadalmina baja.
¿A qué se dedica ahora Ana Botella?
En la actualidad, Ana Botella preside la Fundación Integra, un proyecto personal creado en 2001 con el objetivo de ayudar a personas que acababan de salir de la cárcel, pero que con los años se ha ido ampliando a otros colectivos como a mujeres que han sufrido violencia de género, exdrogadictos o personas sin hogar.