El regreso a las clases es ya inminente. Esta misma semana, niños y adolescentes regresan a su rutina tras más de dos meses de vacaciones, de disfrute sin horarios, sin estudiar, sin exámenes… Por eso la vuelta al cole no siempre es igual de ilusionante para todos ellos. Unos se ponen nerviosos, otros se agobian, los más pequeños pueden llegar a negar la evidencia… Algunos, incluso, tienen síndrome postvacacional. Si bien este síndrome, más asociado a los adultos, solo afecta a entre el 5% y el 8% de los niños, según los datos de la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria compartidos por la escuela de formación CEAC, presentan síntomas como tristeza, irritabilidad, sueño alterado o problemas gastrointestinales. En cualquier caso, con síndrome postvacacional o simplemente con los nervios habituales por el inicio del nuevo curso escolar, se pueden seguir una serie de pautas fáciles de aplicar y muy eficaces para hacer que la vuelta al cole sea más fácil. Son las siguientes:
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1. Prepárale para la vuelta al cole con un calendario y con libros temáticos
Hazles saber que la vuelta al cole se acerca. Los más mayores lo tendrán ya interiorizado y entenderán que la fecha se acerca, pero los más pequeños no comprenden aún la noción del tiempo y puede que ni siquiera sean muy conscientes de que van a tener que volver a clase y a separarse de papá y de mamá. En estos casos, son de gran ayuda los libros y cuentos infantiles enfocados a este tema; les ayuda a visualizar el momento, a irlo asimilando y a sobrellevar mejor los primeros días. También es muy útil recurrir a un calendario con los peques; marcarles el día en el que volverán, mostrarles cuál es el día de hoy y enseñárselo cada día. Les servirá, además, precisamente para ir entendiendo mejor la noción del tiempo. Es especialmente recomendable hacerlo los días previos a la vuelta al cole.
2. Muestra el retorno a las clases como algo positivo
Parece evidente, pero la realidad es que no lo es tanto. Sobre todo, porque a veces no nos damos cuenta y exteriorizamos ante ellos las ‘pocas ganas’ de nuestra propia vuelta al cole. Por bien que esté compartir con nuestros hijos ciertas emociones y sentimientos, hemos de prestar cuidado a estas cuestiones, puesto que nos tomarán como referente y es probable que interioricen nuestra actitud ante el regreso a la rutina. Por eso, lo adecuado es no hablar de la vuelta al trabajo como una carga, puesto que “puede ayudar a los niños a comprender que volver a empezar no tiene por qué ser tan duro”, tal y como señalan desde CEAC.
3. Háblale de las excursiones y de las actividades especiales ya programadas
Bien porque lo hayan anunciado los tutores al finalizar el curso anterior o bien porque lo sepamos por hijos mayores u otros papás, hay ciertas actividades que están programadas con mucha antelación y que suele hacer especial ilusión a los niños, como excursiones o días especiales en el cole en los que se les permite ir disfrazados o realizan actividades diferentes. Hacer hincapié en ello, en las nuevas experiencias que van a disfrutar e próximo curso junto a sus amigos y a sus compañeros, será un gran incentivo para ellos.
4. Explícale lo que va a aprender durante este curso
Por mucho que (especialmente los más mayores) se muestren reacios a tener más deberes y a estudiar más, los niños están, en realidad, ávidos de aprender cosas nuevas. Se sienten mayores y fomenta su autoestima, por lo que indicarles los hitos que van a alcanzar este año en clase les motivará. Por ejemplo: este año vas a aprender a leer, vas a aprender las tablas de multiplicar… Por supuesto, en caso de que para nuestro hijo sea motivo de agobio, mejor descartar esta opción.
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5. Haz a tus hijos partícipes de la preparación del material escolar
Elegir estuches, mochila, lápices de colores, carpetas… Si hay algo que haga ilusión a los niños y a las niñas antes de empezar el colegio es esa. Aunque cada vez es más común que compremos el material escolar por Internet, ¿por qué no ir con nuestros hijos a una papelería o a un centro comercial y permitir que vean y elijan los que más les gustan? En caso de no poder ir, también podemos enseñarles las opciones de compra online y que, en todo caso, elijan y desempaqueten ellos mismos el pedido. Estrenar estos artículos será un gran incentivo para volver a clase.
6. Adelanta rutinas
Adelantar rutinas es una pauta imprescindible que comparten pedagogos, psicólogos y expertos en crianza. Lo ideal es ir adelantando horarios. Muchos comienzan una o dos semanas antes; si no lo has hecho, aún estás a tiempo. Un par de días antes ya les resultará de gran ayuda. Aunque lo hagan a regañadientes, será muy favorable para ellos que la rutina del baño, de la cena, del libro antes de dormir… sea ya la que tendrán durante el curso. No les gustará la idea cuando al día siguiente aún no tienen que madrugar, pero es más que favorable. Se adaptarán mejor y el primer día de cole estarán más descansados, lo que ayudará, al mismo tiempo, a llevar mejor los nervios.
7. Comunícate con ellos
Comunicarse con ellos e intentar comprender cómo se sienten los ayudará a creer que sus sentimientos y esfuerzos por volver a empezar importan. Es necesario escucharlos y hacerles entender que es normal que sientan nervios o incluso, miedo por volver al colegio (o por cambiar de centro, si es el caso). Que sus adultos de referencia les apoyen y acompañen emocionalmente será la mejor ayuda que podamos brindarles
8. Sé paciente
Es posible que ellos no quieran expresar cómo se sienten o, si son aún pequeños, no sepan cómo hacerlo y exterioricen sus sentimientos mostrando una mayor irascibilidad o estando más nerviosos. Si no nos quieren escuchar, debemos, en todo caso, ser pacientes con ellos. Hemos de entender que forma parte del proceso de adaptación y que, poco a poco, irá recuperando la normalidad, al tiempo que va estando a gusto de nuevo con la recuperación de la rutina.
9. Celebra sus logros y haz un refuerzo positivo
Si a nuestros hijos les está costando especialmente hacerse a la idea de que se han acabado las vacaciones de verano, además de escucharlos y de ser paciente con ellos, es fundamental que reconozcamos sus esfuerzos al respecto y sus cambios de hábitos, especialmente con aquellos cuya conducta se está viendo más afectada por la vuelta a la rutina.