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juegos de mesa para reforzar las matem ticas© AdobeStock

APRENDIZAJE

Juegos para repasar ‘Mates’ en verano (sin tener que estudiar)

Desde sumas y restas simples hasta fracciones; son varias las opciones con las que reforzar conocimientos mientras se divierten


1 de agosto de 2023 - 20:00 CEST

El verano es para disfrutar y desconectar, para divertirse en familia y con amigos, para vivir nuevas experiencias, aunque… ¿y si nuestros hijos van ‘flojos’ en matemáticas o incluso han suspendido? En caso de haber suspendido, será inevitable que tengan que sentarse a estudiar, pero si únicamente necesitan repasar (o quieres que refuercen lo aprendido), lo mejor es  aprender jugando . Y las opciones son muchísimas y para casi todas las edades: sumas y restas simples, multiplicación, división, fracciones… Te damos ideas de juegos de mesa para reforzar lo aprendido sin necesidad de ‘hincar codos’ y disfrutando al mismo tiempo:

eduludo sumas© Djeco

Eduludo sumas (Djeco)

Un juego perfecto para niños que están aprendiendo a sumar. El tablero es un charco de agua en el que deberá colocar las figuritas de los animales que le indique la carta que le toque. Lo hace sacando una de esas cartas (cartas de la suma), en la que se le dice que debe colocar en el charco, por ejemplo, tres patos y dos peces; el niño los pone y a continuación coge otra carta diferente (del montón de cartas de resultados) en la que se indica el número total de animales que hay en la charca. El mismo niño podrá comprobar si ha dado la respuesta adecuada al girar la carta de la suma, pues en el reverso viene la respuesta correcta.

Edad recomendada: a partir de 5 años

domin © GettyImages

Dominó

Y si lo que queremos es que los niños ‘se manejen’ con los números, que aprendan a reconocerlos y a asociarlos, ¿qué mejor que un dominó? Es un juego clásico donde los haya en el que también podrán practicar la suma de números mayores al contabilizar sus puntos y los de su adversario cuando gane una partida. El entretenimiento (que es de lo que se trata) está asegurado.

Edad recomendada: a partir de 3 años

pach s© GettyImages

Parchís

Y hablando de clásicos, si hay un juego clásico por excelencia ese es el parchís, que puede convertirse en nuestro gran aliado para reforzar el conteo hasta 20. Ofrece todos los beneficios de un buen juego de mesa (seguimiento de reglas, aprender a esperar turnos e incluso algo de estrategia). Es ideal para jugar juntos en familia con niños de todas las edades y hasta con los abuelos.

Edad recomendada: a partir de 5 años

plumilla postal© HABA

Plumilla postal (HABA)

Siguiendo con las sumas, ‘Plumilla postal’ va un paso más allá, pues presenta diferentes grados de dificultad en el que se deben realizar sumas por valores hasta el 20. Es un juego muy entretenido que permite a los niños iniciarse en el cálculo mental y que incluye representaciones de los números con objetos para facilitar los primeros ejercicios de cálculo. Ofrece la posibilidad de juego libre con las cartas, los sellos y el matasellos.

Edad recomendada: a partir de 5 años

piko piko el gusanito© Zoch

Piko Piko el Gusanito (Zoch)

Es un divertido juego que también ayuda a reforzar el cálculo mental, pero que está orientado a niños más mayores (a partir de 8 años). Los jugadores representan a las gallinas, que van a comer al mejor asador de gusanos, el Don Pepe Pollo. Para ganar, habrá que haber conseguido el mayor número de gusanos (fichas) al final de la partida. Cada jugador deberá lanzar ocho dados y, después, apartar todos los que hayan dado el mismo valor (por ejemplo, todos en los que haya salido un 4 o un dibujo de un gusano); a continuación, podrá seguir tirando el resto de dados hasta que se plante. Cuando lo haga, deberá sumar el resultado de los valores que han salido en todos los dados apartados y coger la ficha de gusano con el mismo número.

Edad recomendada: a partir de 8 años

multibloom© Falomir juegos

Multibloom (Falomir juegos)

Es un juego de cartas en el que los niños directamente tendrán que memorizar y reproducir las tablas de multiplicar para ganar. Los jugadores están en una floristería y tendrán dos mazos de cartas: uno de flores y otro de clientes. Habrá que colocar en la mesa, boca arriba, tres cartas de cliente, y cada uno de los jugadores dispondrá de cinco cartas de flores. Cada carta de cliente viene con el número de flores que quiere comprar y con las monedas que va a pagar con ellas; el objetivo es que cada jugador multiplique el número que aparece en diferentes cartas de flores que le han correspondido para llegar al número exacto que aparece en una de las cartas de clientes. Gana el jugador que más cartas de cliente haya obtenido.

Edad recomendada: a partir de 9 años

dani el panadero© Átomo Games

Dani, el panadero. Club A (Atomo games)

Dani, el panadero necesita que sus ayudantes (los jugadores) llenen con él los hornos para hacer todo tipo de pan y pasteles. Para ello, deberán ir resolviendo los problemas que van apareciendo en las cartas. Elaborado por María Couso (PlayFunLearning) y perteneciente a la colección Club A (fantástica para trabajar diferentes materias), ayudará a los peques a identificar las unidades, decenas, centenas… Una opción perfecta si lo que tu hijo necesita repasar es el sistema decimal.

Edad recomendada: a partir de 8 años

c digo secreto© HABA

Código secreto 13 + 4 (HABA)

Un juego que suele ‘enganchar’ a quien juega con él y que permite, además, trabajar cualquier tipo de operación (sumar, restar, multiplicar o dividir). Permite muchas variantes de juego porque se puede adaptar a diferentes niveles. El objetivo en todo caso es avanzar en el tablero haciendo combinaciones con los números que salen en los dados (y que se supone que es un código secreto que va desactivando láseres que impiden avanzar).

Edad recomendada: a partir de 8 años

splitissimo© Custom

Splitissimo (Falomir juegos)

¿Qué puede haber más representativo para aprender las fracciones que una pizza? Pues es en eso precisamente en lo que se basa Splitissimo y lo mejor es que ofrece dos versiones de juego: una más sencilla (para niños a partir de 6 años), en la que de lo que se trata es de que entiendan qué son las fracciones, y otra más complicada (a partir de 10 años), que ya requiere hacer operaciones con fracciones. Los niños disfrutan jugando y, al mismo tiempo, asimilan las propiedades y las equivalencias de las fracciones, aprendizaje que después trasladan a la asignatura fácilmente.

Edad recomendada: a partir de 6 años