El 35 % de los mayores de 65 años en nuestro país cuida a sus nietos varios días por semana

“Los abuelos y abuelas aportan múltiples beneficios a sus nietos y nietas. No sólo transmiten sabiduría y experiencia, sino que también aportan estabilidad y tranquilidad. Crear un vínculo con sus abuelos les ayudará a tomar ejemplo y a aprender valores como la tolerancia, la paciencia o el respeto”, nos cuenta la psicóloga.

Y es que nadie mejor que un abuelo para aportarles la experiencia de toda una vida en momentos y situaciones clave del día a día.

Para los abuelos la presencia de los nietos es uno de los mejores ‘chutes de energía’ que se les puede ofrecer, ya que las relaciones sociales permiten a los mayores mantenerse activos así como mantener activas sus funciones cognitivas, alegría, vitalidad… Según David Curto, “la relación entre abuelos y nietos es una de las interacciones más significativas en el desarrollo emocional y social de las personas. El tiempo que comparten puede ayudar a prevenir el deterioro cognitivo, así como enfermedades crónicas como el alzhéimer o la demencia senil; y a mejorar los test de habilidades cognitivas de los mayores, pues el papel que juegan los abuelos a nivel social les genera una sensación de utilidad y de pertenencia. Por lo tanto, esta comunicación desempeña una labor fundamental en el bienestar de ambos, contribuyendo así al desarrollo de una sólida autoestima y confianza en sí mismos”.

“Los beneficios son bidireccionales ya que los abuelos también se enriquecen puesto que se rejuvenecen cuando juegan con ellos, permitiéndoles a estos últimos desconectar de un mundo hiperdigitalizado”, añade la psicóloga.

Aprender de nuestros mayores es algo inherente a ellos y es que la paciencia y la sabiduría que les aporta la experiencia les ubica en una categoría más especial de adultos.

“Los abuelos tienen un papel muy importante en el desarrollo cognitivo de los niños, así como en su comportamiento y en su socialización con el mundo. Son un ejemplo a seguir y aportan a los más pequeños conocimiento y sabiduría sobre muchísimas cosas”.

Seguro que te acuerdas de aquello ratos tan divertidos que pasabas jugando con los abuelos, incluso cuando alguna vez se han convertido en cómplices de alguna travesura, porque eso es una de las mejores cosas que tienen los abuelos, que miman y consienten mucho a sus nietos.

“El amor que los más mayores sienten por sus nietos beneficiará a los niños, ya que se sentirán valorados y queridos y sabrán que cuentan con el apoyo de sus abuelos, convirtiéndose muchas veces en sus confidentes. Este beneficio será mutuo, ya que los abuelos también se enriquecen emocionalmente a través de la relación con sus nietos”, señala la psicóloga.

La experta asegura que “los nietos también aportan muchísimos beneficios a sus mayores, les permite estar conectados en el presente y el futuro, los mantienen jóvenes, les ayuda en su salud mental y aprenden muchísimas cosas nuevas gracias a ellos”.

Y, por supuesto, también les permite mantenerse activos físicamente y es que pasear, jugar, ir detrás del peque corriendo, saltar… les ayudará a mejorar y hacer ejercicio, aunque no quieran.

Al igual que debemos respetar que los abuelos no pueden responsabilizarse de todo lo que haga el niño, sino que también deben darle más libertades que, quizás, puedan hacer los padres, también debemos tener en cuenta que “no todos los abuelos van a poder participar tanto en actividades, ya sea por salud, cansancio o ser muy mayores. Por ello, es importante involucrar a los niños en la vida familiar y hacerles comprender qué les ocurre a sus abuelos y cómo deben acercarse a ellos, ya que no sólo es beneficiosos para su propio desarrollo, sino también para mejorar la calidad de vida de los mayores”, explica la psicóloga.

Como ya hemos comentado, crecer cerca de los abuelos es muy beneficioso para los niños y viceversa, pero tal y como advierte la psicóloga “es necesario aprender qué límites existen en la figura del abuelo y saber cuándo deben estar o no presentes. Y, por otro lado, conocer las necesidades tanto de los niños como de los abuelos, así como de los padres, ayudará a fortalecer el vínculo”.

En algunas ocasiones, los abuelos intervienen de manera muy directa en la educación de los niños y eso puede llegar a molestar a algunos padres, lo que se puede evitar entendiendo que el papel de abuelo no puede sustituir al papel de padre.

“Del mismo modo, los mayores pueden ser un gran apoyo emocional para los niños en los casos en los que los padres no los sean o, por el motivo que sea, estén atravesando momentos difíciles”, por ello, ese apoyo fuera del núcleo familiar es muy positivo para los niños.

Para finalizar, los expertos aseguran que lo mejor de la relación entre abuelos y nietos son los beneficios que se aportan recíprocamente que son:

• Mejora el estado de ánimo de ambos
• Refuerza los vínculos familiares
• Estimulan las capacidades cognitivas
• Aumenta su capacidad de amar