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Niña sentada en su pupitre en clase sonríe muy feliz© Getty Images

Aprendizaje

El método fácil y divertido para aprender las tablas de multiplicar creado por una española

Lo ideó para ayudar a su propio hijo y ya se emplea en algunas escuelas de España e Hispanoamérica. Hemos hablado con ella


9 de agosto de 2024 - 10:24 CEST

Vanesa Díaz Concepción, autora y responsable de Vanídir (vanidir.com), era una madre (como muchas otras) que ayudaba cada día a su hijo Idir, que entonces tenía 8 años, a memorizar las tablas de multiplicar, pero el pequeño no lo conseguía. “Estaba invadida por sentimientos de preocupación, frustración y culpabilidad; le estaba pidiendo a mi 'chiquito' que recordara algo que yo nunca fui capaz de recordar con el sistema que le ofrecía, la repetición”, nos cuenta la propia Vanesa. Hasta que un buen día le llegó, literalmente, la inspiración.

“La idea me vino de golpe una noche en soledad mientras creaba asociaciones inverosímiles para memorizar vocabulario inglés. En esas fechas yo estaba estudiando en la escuela de idiomas. La estrategia de asociar palabras de parecido fonológico a través de historias inverosímiles la descubrí en el libro de Ramón Campayo Desarrolla una mente prodigiosa”, relata. “Al día siguiente le propuse a mi hijo tratar de memorizarlas así, me sugirió algunos cambios en el planteamiento y a partir de ese momento tuve que ingeniar las historias para cada tabla de multiplicar”.

El motivo por el que decidió llamar ‘Vanídir’ al método es porque es la manera en la que los dos figuran en la denominación, pues viene de combinar sus dos nombres: Vanesa e Idir.

Mi hijo  se mostró mucho más seguro en matemáticas y, con el paso de los años, vi que aplicaba las asociación de imágenes para memorizar datos puros 

Vanesa Díaz Concepción

Los resultados en Idir de este nuevo método fueron instantáneos: “desde luego que hubo un cambio, recuerdo con mucha emoción la noche que me dijo que le daba pena que se acabasen las tablas de multiplicar porque significaba que no habría más historias. Eso fue con la tabla del 8. Se mostró mucho más seguro en matemáticas y con el paso de los años vi que aplicaba las asociación de imágenes para memorizar datos puros como las provincias, los nombres de los ríos y su ubicación geográfica”, asegura la orgullosa mamá.

Ver los resultados en su hijo, en cómo por fin lograba aprender de una forma entretenida las tablas de multiplicar, que tanta frustración les generaba a los dos, motivó a Vanesa a compartirlo. “Consulté con amigas pedagogas y me aconsejaron publicarlo porque la dificultad con las tablas de multiplicar es un problema que el alumnado va arrastrando hasta el instituto”. Y así lo ha hecho: ha publicado ya dos libros y ha patentado el método.

A partir de entonces hizo algunas adaptaciones porque a su hijo se las había enseñado con dibujos en un papel y la más elaborada tenía como soporte una presentación PowerPoint. “Para publicarlo tuve que adentrarme en el mundo de la edición y, más adelante, en el de la programación para crear las actividades interactivas y la aplicación Android”, detalla Díaz. “La dificultad de mi hijo me ayudó a descubrir un mundo que me apasiona”.

El método Vanídir se emplea ya en algunas escuelas de España e, incluso, de Hispanoamérica y, según su autora, es también muy eficaz con niños neurodivergentes: “He recibido noticias de casos de éxito en niños y niñas con dificultades de aprendizaje: TDAH, dislexia, TEA y neurodivergentes como mi hijo de altas capacidades”, asegura Vanesa Díaz. “Y, por supuesto, ha tenido éxito con neurotípicos, pero los primeros casos son los que más satisfacción me dan, debido a la suma de dificultades con las que se encuentran a la hora de afrontar el aprendizaje de las tablas de multiplicar”.

© Getty Images

En qué consiste el método Vanídir para memorizar las tablas de multiplicar

La base del método Vanídir es que sustituye la repetición tradicional de las tablas de multiplicar por técnicas de visualización y narrativas, así como por mnemotecnia, es decir, por estrategias que facilitan la memorización. En lugar de recurrir a la repetición tradicional, este método transforma cada número en una imagen llamativa y cercana a los niños y las niñas y cada tabla de multiplicar en un escenario. De esta manera, cada operación se convierte en una historia impactante, divertida y memorable. “Para facilitar el recuerdo, las historias son inverosímiles, simples, muy visuales y con implicación emocional”, asegura la creadora de este método.

Partiendo de todo lo anterior, los pasos de Vanídir son, tal y como explica Vanesa Díaz, los siguientes:

1º Reducir la cantidad de operaciones que debemos memorizar

Haciendo uso de la propiedad conmutativa de la multiplicación, eliminamos las operaciones repetidas. Por ejemplo, al memorizar 2x6, ya no necesitamos memorizar 6x2 porque es la misma operación pero con los factores en diferente orden. “La norma que marcamos para poder resolver las operaciones que no memorizamos es que frente a cualquier multiplicación, lo primero que hacemos es localizar el factor más pequeño y ponerlo en primer lugar”.

2º Los personajes

“En este paso hacemos magia y es muy divertido para los niños y niñas”. Cada número se asocia con un personaje, pero no de cualquier manera, sino siguiendo una lógica que permite recordar qué figura sustituye a cada número. “No podemos perder de vista la idea de que la mejor manera de recordar algo es entender el contenido o el por qué de un proceso”.

De este modo, en la mayoría de los casos, Vanesa buscó la similitud con la forma. “Por ejemplo, el 2 es un pato (bastante travieso en las historias), el 8 es un muñeco de nieve (un personaje encantador para los/as más pequeños/as) pero también puede ser unas gafas o unos prismáticos. El 6 lo sustituimos por una bomba o una bola de Navidad, ya que es una bola con un hilo en la parte alta y el 9 es una señora con la cabeza muy grande y la espalda encorvada”.

He recibido noticias de casos de éxito en niños y niñas con dificultades de aprendizaje: TDAH, dislexia, TEA y neurodivergentes

Vanesa Díaz Concepción

3º Los escenarios

“En este paso aprovechamos la asociación que hemos hecho entre número y figura desde el 1 hasta el 9 para convertir cada tabla de multiplicar en un lugar donde estos personajes vivirán las sorprendentes aventuras”. También siguiendo una lógica que permita recordar la asociación.

¿Qué lógica seguimos para saber qué escenario le corresponde a cada tabla? Se lo preguntamos al personaje”, explica Vanesa. “Si el 2 se un pato, debemos pensar en el lugar favorito de los patos. A los patos les encanta el agua; así tenemos que todas las historias de la tabla del 2 suceden en una piscina. Como el 6 se puede convertir en una bola de Navidad, recordaremos fácilmente que todas las historias de la tabla del 6 suceden en un escenario navideño”.

4º Los resultados

Este es el último paso. Con los dos pasos anteriores se ha sustituido cada factor por una imagen. “Como los tenemos ordenados (el factor más pequeño en primer lugar) podemos decir que una multiplicación se convierte en una historia donde el primer factor es el escenario y el segundo factor es el personaje. El desenlace nos permitirá recordar el producto”.

Por ejemplo: 2x6 se visualiza como, ¿qué pasa en la piscina con la bomba?; 2x8 se estudia como ¿qué le pasa al muñeco de nieve en la piscina?; 6x6 es la historia correspondiente a ¿qué pasa en la Navidad con la bomba?; 6x9 es ¿qué le pasa a la jorobada en Navidad?

El recuerdo del resultado se consigue a través de las historias inverosímiles y recurriendo al parecido de la figura o por similitud fonológica. “En el caso de 2x8, tenemos que el muñeco de nieve decide ir a la piscina un día con mucho calor pero estando allí, se da cuenta del peligro que corre con tanto calor, decide irse a toda prisa pero tropieza y termina cayendo a la piscina. Al caer, se deshace por completo. Se convierte en una imagen desoladora en la que los guantes, la bufanda y la zanahoria que tenía por nariz quedan flotando en la piscina. En esta historia, la emoción de tristeza impacta en la memoria y ayuda a los más pequeños a recordar que si el muñeco de nieve va a la piscina se va a deshacer (2x8) y la palabra ‘deshacer’ la asociamos con 16”.