Acudir a una clínica de fertilidad cuando, con 40 años o más, sabes que te encuentras en un momento vital en el que la probabilidad de tener hijos es mucho menor por una cuestión biológica puede generar mucha incertidumbre. Y no es para menos, puesto que a partir de esa edad aumentan los casos de alta complejidad y es más difícil lograr el sueño de ser madre con óvulos propios.
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¿Por qué es más difícil ser madre a partir de los 40 años?
La razón principal por la que a partir de los 40 es mayor la dificultad de convertirse en madre es la disminución de la cantidad y la calidad de los óvulos. "Pero, además, la edad también afecta al resto de órganos reproductivos, como son los ovarios, el útero, las trompas. Si la paciente tiene alguna patología de base, como pueda ser endometriosis, miomas, pólipos, etc., estos con el paso del tiempo también se ven agravados”, indica la Dra. Darya Dudenko, ginecóloga en Equipo Juana Crespo.
¿Qué opciones de tratamientos de fertilidad tienen las mujeres de más de 40 que quieren convertirse en madres?
Si bien es cierto que sigue siendo posible un embarazo natural con 40 años, es mucho menos probable por los motivos explicados anteriormente. De hecho, ni siquiera tienen garantías de éxito al someterse a un tratamiento de reproducción asistida. ¿Qué hacer entonces? ¿Qué opciones tienen?
La ovodonación suele dar buenos resultados, pero suele ser la última opción cuando una mujer acude a una clínica de fertilidad. Antes de recurrir a esta alternativa, en medicina reproductiva existen otras técnicas, como el rejuvenecimiento ovárico o cirugías reparadoras de la fertilidad, que abren la puerta a la gestación de un hijo biológico.
“Todo va a depender del diagnóstico de cada mujer, pero actualmente, las cirugías reproductivas y el tratamiento Revitalize (técnica propia de la Clínica Juana Crespo), basado en la medicina regenerativa con PRGF (Plasma Rico en Factores de Crecimiento) como apoyo en los tratamientos de fecundación in vitro, nos están dando muy buenos resultados y están logrando unas tasas de éxito de embarazo cercanas al 70% por transferencia en mujeres mayores de 40 años. Los avances en estas dos áreas están consiguiendo que en nuestra clínica mujeres de 40-43 años estén logrando el embarazo evolutivo con sus propios óvulos cuando su indicación sería ir a un tratamiento de ovodonación”, asegura la Dra. Dudenko.
Pero ¿en qué consisten estos avances? ¿Qué es exactamente el rejuvenecimiento ovárico y cómo es una cirugía reparadora de la fertilidad?
Qué es el rejuvenecimiento ovárico
El rejuvenecimiento ovárico constituye un conjunto de técnicas basadas en células madre y orientadas a mejorar no solo la cantidad de óvulos en las mujeres, sino también en la cantidad de los mismos. El procedimiento consiste en extraer células madre de la médula ósea de la paciente para inyectarlas posteriormente en la arteria ovárica para así mejorar la funcionalidad del útero y de los ovarios y que estos produzcan más ovarios de mayor calidad.
“Hemos logrado una mejora embrionaria considerable en cualquier edad, pero es realmente significativo en las mujeres de más de 40 años”, señala la Dra. Juana Crespo, directora médica, que afirma que la técnica de rejuvenecimiento ovárico propia de su clínica ha logrado que “el 50% de estas pacientes tengan, al menos, un embrión sano y óptimo para transferir”.
Una vez que se ha logrado formar ovocitos de buena calidad, se extraen para proceder al tratamiento de fecundación in vitro (FIV); es decir, se fecunda el óvulo con el espermatozoide en laboratorio y, una vez obtenido el embrión, este se transfiere al útero de la madre.
En qué consisten las cirugías reparadoras de la fertilidad
Se trata de intervenciones quirúrgicas que buscan acabar con determinados problemas del aparato reproductor que impiden o dificultan la fertilidad. La mayor parte de ellas, como la histeroscopia, están orientadas a extirpar miomas, pólitos y otras lesiones. Otras de las cirugías reparadoras de la fertilidad más habituales es laparoscopia, que se emplea sobre todo para tratar el hidrosalpinx, una alteración de las trompas de Falopio que hace que estas acumulen líquido y, por tanto, se obstruyan, impidiendo de este modo el paso de los espermatozoides.
Para saber si la paciente de más de 40 años necesita una cirugía reparadora de la fertilidad o someterse a un tratamiento de rejuvenecimiento ovárico para tener más garantías de éxito en una FIV, lo primero es obtener un diagnóstico certero. “Si no conoces el problema, no sabrás la solución”, subraya la Dra. Crespo.