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“Nos vuelve a tocar pelear de más… otro embarazo con incertidumbre, con angustia y con miedo… pero con las mismas ganas y la misma fuerza”. Así daba a conocer Lucía Villalón, embarazada de casi 6 meses, a sus seguidores este miércoles que el bebé que está esperando junto a Gonzalo Melero tiene una rarísima complicación renal. Al primer hijo de la pareja, Diego, también le detectaron, durante la gestación, un grave defecto de nacimiento llamado gastrosquisis, por el que el pequeño se estaba formando con los intestinos fuera de su cuerpecito. Por suerte, fue intervenido nada más nacer con muy buen resultado y hoy es un niño sano y fuerte.
Ahora no tiene nada que ver con eso. La complicación que sufre Lucas (así han anunciado que van a llamar al bebé) es un riñón multiquístico y un ureterocele. Como la propia Lucía ha explicado, se trata de “dos problemas en el sistema renal completamente diferentes y que le han tocado a la vez, es una cosa rarísima”. Por el momento, está todo bajo control, aunque debe ir a revisiones todas las semanas para comprobar que no surge ninguna complicación porque, “si se complica, implicaría una operación por punción con Lucas en mi barriga”.
Qué implica tener un riñón multiquístico
“El riñón multiquístico se trata de una afección en la que uno o ambos riñones no se desarrollan bien, apareciendo múltiples quistes que reemplazan el tejido renal normal e impiden un funcionamiento normal del riñón”, explica el Dr. Fernando Baixauli, pediatra del Hospital Vithas Valencia 9 de Octubre, quien puntualiza que no es lo mismo que el riñón poliquístico, el cual entraña mayor gravedad.
Cuando el riñón multiquístico es bilateral, es decir, que se da en los dos riñones, “es incompatible con la vida”, nos dice el doctor. Afortudamente, no es el caso de Lucas, que únicamente tiene afectado el riñón derecho. Los médicos ya han advertido a Lucía y a Gonzalo que nunca le va a funcionar, pero el riñón izquierdo “parece que funciona fenomemal”, según ella misma ha informado.
© lucia_villalonQué es un ureterocele
Antes de explicar qué es un ureterocele, el Dr. Igor Romaiouk, nefrólogo del Hospital Vithas Valencia 9 de Octubre señala que el uréter es un tubo que conecta el riñón y la vejiga y que hay uno por cada riñón. “Se habla de ureterocele cuando una parte del uréter cercana a la vejiga se inflama y se agranda. Básicamente, esto provoca que la orina regrese al uréter. Entonces el uréter se inflama por la cantidad excesiva de orina”, detalla. “Y si esto no se trata a tiempo, puede conllevar al daño renal”.
De ahí la necesidad de los controles semanales a los que se está sometiendo Lucía Villalón. En caso de que surgiera alguna complicación, es posible “reparar esos o retráctiles durante la gestación”, explica el nefrólogo. Habría que llevar a cabo la cirugía por punción que comentaba la periodista.
El diagnóstico tanto del ureterocele como del riñón multiquístico se realiza por ecografía fetal durante el embarazo, según indica el Dr. Baixauli. Después del parto, “ante la sospecha, el pediatra estará obligado a realizar inicialmente una ecografía renal y de vías urinarias tras el nacimiento”, añade el doctor. “También se pueden utilizar otros medios de diagnóstico por imagen como el TAC o la Resonancia Nuclear Magnética”.
En uno y otro caso, “las complicaciones que pueden presentar son hipertensión arterial, infecciones de orina o pielonefritis de repetición o alteración de la función renal e hodronefrosis”.
¿Son hereditarios el riñón multiquístico y el ureterocele?
Teniendo en cuenta que se trata del segundo embarazo de Lucía Villalón en el que el bebé presenta complicaciones, la primera pregunta que se viene a la cabeza es si se trata de afecciones hereditarias y relacionadas entre sí, pero no, no es el caso. “Lo más frecuente es que no exista componente genético, aunque en ocasiones puede haberlo, y se trate de una malformación en el desarrollo del aparato urinario y que sea de novo”, comenta Baixauli. En cuanto a la gastrosquisis que padeció Diego, “no existe relación” alguna, si bien “sí se asocia con frecuencia el riñón multiquístico con el uterocele”.
