Neuropsicólogos, profesores, pediatras, psiquiatras… cada vez son más los expertos de diferentes áreas que alertan de los efectos del abuso de las pantallas en niños y adolescentes. Desde menor capacidad de concentración e hiperactividad a problemas de salud mental y también de visión, pasando, incluso, por adicción. Son también cada vez más las familias que optan por retrasar el momento de dar un móvil propio a sus hijos y ahora, con el proyecto de la nueva ley de menor, en España la edad legal para acceder a redes sociales pasará de los 14 a los 16 años. Sobre ello hemos hablado con la Dra. Jones Bell, psicóloga clínica y directora del Centro de Excelencia en Salud Mental de Google. ¿Cuál es su opinión sobre estos planteamientos?
Estereotipos irreales de belleza, conexión permanente a una pantalla, comentarios negativos sobre su persona... Las redes sociales pueden llegar a ser muy nocivas. ¿Tienen los adolescentes de hoy en día desafíos adicionales a los que se han tenido en la adolescencia en generaciones anteriores?
Al igual que los padres de todo el mundo, también trato de enseñar a mis hijos a tener una relación sana con la tecnología y, aunque tiene muchos beneficios, como ayudar a los adolescentes a aprender, conectar, encontrar una comunidad o prepararse para el futuro, también tiene sus inconvenientes. Por eso es importante crear rutinas saludables y practicar habilidades que mitiguen el estrés o la negatividad que a veces causan las redes sociales. Mucha parte de esto son cosas bastante sencillas: conectar con la familia a la hora de comer, dar un paseo por la naturaleza, practicar un deporte de equipo, participar en una actividad de voluntariado local y muchas otras opciones.
Como psicóloga, sé que es importante comprobar cómo te sientes cuando utilizas la tecnología, ya sea jugando a un videojuego, navegando por Internet o mirando las fotografías del perfil de un amigo. Si algo que ves en Internet te hace sentir mal o triste, no pasa nada por cerrar el navegador o alejarte del ordenador o del teléfono. Tú tienes el control. También recordar que tampoco estás solo, siempre puedes hablar de tus sentimientos con uno de tus padres, un profesor u otro adulto de confianza.
La tecnología es solo una herramienta que se suma a otras prácticas importantes en nuestras vidas, y podemos aprender a practicar límites digitales saludables como tomar un descanso de las pantallas una hora antes de acostarnos o utilizar algunas de las herramientas disponibles de bienestar digital de Google, como el tiempo de inactividad en configurando temporizadores de aplicaciones en Android o los recordatorios de “tomar un descanso” en YouTube para ayudarnos a equilibrar el papel de la tecnología en nuestras vidas. Cuando la usamos intencionadamente, la tecnología puede proporcionarnos información, enseñarnos nuevas habilidades y conectarnos con los demás.
¿Qué repercusiones puede tener eso en la imagen que tienen de sí mismos, en su autoestima y en su salud mental en general?
En Google estamos observando un aumento de las consultas sobre el tiempo frente a la pantalla y la salud mental, por ejemplo, en preguntas como “¿cuánto tiempo frente a la pantalla es demasiado?” o “¿cómo puedo mantener a mis hijos/as seguros en Internet?”. Sabemos que los adolescentes se sienten estresados en la sociedad actual y reconocemos que Google puede desempeñar un papel en este sentido asegurándose de que nuestros productos tengan en cuenta la salud mental y creando las herramientas que los padres y madres necesitan para mantener a sus hijos/as seguros en Internet. Contamos con un equipo especializado de médicos y expertos en desarrollo infantil que se plantean estas mismas preguntas, así como con un comité asesor de expertos externos con los que se trabaja para orientar nuestro trabajo. Creemos que los niños deben poder experimentar lo mejor de la tecnología mientras sus padres se sienten seguros dejándoles explorar en Internet, hemos dedicado los últimos años a diseñar experiencias seguras y adecuadas a cada edad para niños y familias en todos nuestros productos y servicios. No se trata de un modelo único y la relación de cada familia con la tecnología es diferente, por eso queremos dar a los padres y madres las herramientas que necesitan para encontrar el equilibrio adecuado y ayudarles a controlar los contenidos que ven sus hijos e hijas adolescentes y el tiempo que pasan en Internet.
Además de las redes sociales, ¿cómo afectan internet y las nuevas tecnologías a la salud mental de los adolescentes?
Aunque Internet ofrece oportunidades increíbles para que los adolescentes exploren el mundo que les rodea, es importante ser conscientes de los riesgos potenciales para su salud mental. Como padres, podemos ayudarles hablando con ellos sobre lo que ven en Internet y estableciendo límites saludables en el tiempo que pasan frente a la pantalla.
- Ciberacoso y acoso online: aunque no es exclusivo de las redes sociales, el ciberacoso puede darse en varias plataformas online, desde comunidades de juegos a foros anónimos. La naturaleza 24/7 de Internet amplifica el daño, provocando ansiedad, depresión e incluso autolesiones en casos extremos.
- Exposición a contenidos nocivos: Internet puede exponer a los adolescentes a violencia gráfica, incitación al odio y otros contenidos perturbadores, lo que puede provocarles traumas, ansiedad y una percepción sesgada del mundo. En Google, tenemos políticas estrictas contra el contenido dañino en nuestras plataformas, e invertimos mucho en tecnología y revisores para hacer cumplir estas políticas. También estamos trabajando para facilitar a los usuarios la denuncia de contenidos inapropiados y la obtención de ayuda si la necesitan. Además, para proteger a los jóvenes, plataformas como YouTube tienen políticas para eliminar contenidos nocivos o restringir por edad los contenidos no apropiados para niños.
- Alteración del sueño: la luz azul que emiten las pantallas puede interferir en la producción de melatonina, una hormona que regula el sueño. El uso de Internet a altas horas de la noche puede provocar falta de sueño, lo que está relacionado con cambios de humor, irritabilidad y dificultad para concentrarse. En Google, ofrecemos funciones como Luz nocturna y Modo Focus en los dispositivos Android para reducir la exposición a la luz azul y minimizar las distracciones, también proporcionamos recursos sobre hábitos de sueño saludables a través de nuestras iniciativas de Bienestar Digital.
- Sedentarismo y salud física: el uso excesivo de Internet suele ir de la mano de un estilo de vida sedentario, y la falta de actividad física puede afectar negativamente al bienestar mental, contribuyendo a la depresión y la ansiedad.
- Aislamiento social: aunque Internet puede conectar a las personas, también puede desplazar las interacciones en el mundo real. Pasar demasiado tiempo en línea puede llevar al aislamiento social y a la falta de actividades apropiadas para el desarrollo, lo que dificulta el desarrollo de habilidades sociales cruciales.
Los adolescentes que viven “pegados” a una pantalla, ¿tienen menor capacidad de concentración y un menor desarrollo de habilidades sociales?
Cada vez hay más pruebas que sugieren que el exceso de tiempo frente a la pantalla puede afectar tanto a la atención como al desarrollo social de los adolescentes. Por eso es crucial que los padres y madres ayuden a los adolescentes a encontrar el equilibrio adecuado con la tecnología. El exceso de tiempo frente a la pantalla puede obstaculizar el desarrollo de la capacidad de concentración y las habilidades sociales. Sin embargo, con una buena orientación, la tecnología también puede ser una poderosa herramienta de aprendizaje y conexión. En Google creemos que el listón del bienestar digital debe estar aún más alto cuando se trata de niños, y por eso hemos puesto en marcha varios programas de bienestar para niños y niñas en diversas plataformas de Google.
¿Cómo podemos ayudar a nuestros hijos adolescentes a combatir los desafíos que representan las redes sociales?
He aquí algunos consejos clave para padres y madres: fomentar el diálogo abierto, hablando abiertamente con tus hijos e hijas adolescentes sobre sus experiencias en Internet y el impacto potencial del uso excesivo de las pantallas; priorizar el equilibrio, ayudándoles a crear un equilibrio saludable entre las actividades online y fuera de línea, asegurándose de que tengan tiempo para pasatiempos, actividad física e interacciones cara a cara; estableciendo límites, por medio de controles parentales y estableciendo expectativas claras sobre el tiempo frente a la pantalla, ayudándoles a aprender a autorregular su uso. Aquí nuestra función “tiempo de visualización” de YouTube y los controles parentales de Family Link son ejemplos de herramientas para ayudar a gestionar el tiempo frente a la pantalla; promover el uso consciente, enseñándoles a ser conscientes de sus hábitos digitales y a elegir contenidos de alta calidad que se ajusten a sus intereses y valores,porque guiar a los adolescentes hacia contenidos apropiados para su edad y enriquecedores puede fomentar una experiencia digital positiva.
Esto incluye recursos educativos, salidas creativas y medios que se alineen con los valores familiares; modelar hábitos tecnológicos responsables, los padres y madres también deben hacer un uso responsable de la tecnología, demostrando hábitos equilibrados pueden dar ejemplos positivos a sus hijos/as adolescentes; y por último, fomentar las actividades sin conexión, descansar regularmente de la tecnología es crucial para la salud física y mental, por lo que los padres y madres deben animar a sus adolescentes a participar en actividades fuera de línea, como deportes, aficiones o interacciones sociales.
¿Sería acertada la medida que se ha movilizado este año acerca de la prohibición del móvil antes de los 16 años?
Se trata de un ámbito complejo que puede tener consecuencias imprevistas. Como psicóloga, creo que debemos respetar la capacidad evolutiva de los adolescentes, lo que significa permitirles gradualmente asumir más responsabilidad sobre sus experiencias digitales, incluido el acceso al teléfono. Los padres, madres y cuidadores pueden fomentar las experiencias digitales de sus hijos aplicándose más, incluso imponiendo más restricciones al uso de la tecnología por parte de los niños cuando son pequeños y relajándolas gradualmente a medida que sus hijos/as maduran y también demuestran comportamientos adecuados para estar seguros en el mundo digital. Por ejemplo, en el caso de los niños, esto podría significar el uso de una herramienta como Family Link de Google para establecer límites de tiempo de pantalla y aprobar o bloquear aplicaciones, así como tener un plan multimedia familiar en el que los dispositivos solo puedan utilizarse en determinados días y horas o en presencia de un adulto de confianza.
En el caso de los adolescentes de más edad, los padres y madres pueden optar por permitir una mayor autonomía y privacidad, pero manteniendo unas expectativas claras sobre el uso de los dispositivos para garantizar la seguridad y ayudar a evitar que se desplacen otros comportamientos saludables y apropiados para el desarrollo, como hacer los deberes, ver a los amigos y dormir lo suficiente. Otro aspecto clave del andamiaje es dar a los niños y adolescentes la oportunidad de aprender y adquirir competencias. En la crianza siempre hay un equilibrio entre la protección y la posibilidad de que los niños crezcan y exploren de forma independiente. La crianza digital no es diferente, por lo que encontrar formas de crear opciones y dar voz a los niños también ayudará a garantizar que los padres garanticen una base adecuada de seguridad y, al mismo tiempo, permitan el desarrollo de sus hijos e hijas.
Muchos de los expertos con los que hablo hacen referencia a que no hay un “paso mágico” en el desarrollo del cerebro que se produzca a los 16 años, por lo que las políticas que tienen un límite de edad estricto pueden ser menos útiles en la práctica de cara a apoyar el bienestar y el desarrollo de los adolescentes. Los matices a la hora de proteger a los adolescentes y potenciar su autonomía son, por supuesto, más complejos, pero debemos investigar, educar y desarrollar cuidadosamente los productos para maximizar los beneficios y reducir los riesgos de la tecnología para los adolescentes.
En general, apoyamos planteamientos reguladores equilibrados que fomenten la seguridad en línea, respeten el derecho a la intimidad de los usuarios y garanticen el acceso a la información. Y en la actualidad nos centramos en proporcionar a los padres y madres herramientas y controles que ofrezcan opciones y flexibilidad para encontrar el equilibrio adecuado para sus familias, ya que reconocemos y respetamos que cada familia tiene su propia relación con la tecnología. Nuestros productos y políticas también están pensados para proteger a los niños, así cuando se trata de proteger a los niños y a las familias en Internet, hemos realizado importantes inversiones, como la creación de configuraciones predeterminadas, restricciones de contenido o limitación del uso de los datos para ofrecer una experiencia más segura y que preserve la privacidad.
¿Hemos de tener en cuenta ciertos aspectos antes de dar un móvil o una tablet a nuestros hijos?
A la hora de decidir si regalar un móvil o una tableta a tu hijo o hija, es importante tener en cuenta ciertos aspectos como:
- Conocer a tu hijo: hay muchos principios generales que pueden guiarte a la hora de tomar una decisión sobre la exposición de tu hijo o hija a la tecnología, pero siempre es importante empezar por recordar que tú eres quien mejor le conoce y que el plan que elijas tiene que funcionar para tu familia. Es útil dedicar tiempo a preguntar el por qué quiere el dispositivo, para que se sienta escuchado y comprendido. Las conversaciones entre padres y madres e hijos/as sobre tecnología pueden ser delicadas y, aunque a los niños no les gusten los límites impuestos, sentirse escuchados y comprendidos puede contribuir en gran medida a una relación abierta que permita a los niños hablar de las cosas más complicadas y molestas que experimenten más adelante. También es importante saber cómo pueden interactuar con los distintos tipos de medios y tecnologías según su personalidad, sus puntos fuertes y sus dificultades.
- Adecuación a la edad: es importante asegurarse de que los niños utilizan una tecnología adecuada para su edad y etapa de desarrollo. Esto incluye tener en cuenta las capacidades técnicas del dispositivo (por ejemplo, teléfono móvil o teléfono inteligente, tableta con y sin plan de telefonía móvil), las capacidades de supervisión parental del dispositivo y todo el software instalado en el dispositivo (por ejemplo, controles parentales posibles en el dispositivo, pero también controles parentales a nivel de aplicaciones), la adecuación a la edad de las aplicaciones que tienen instaladas, el tipo de contenido que consumen y la cantidad de tiempo que pasan en línea. Informarse sobre lo que tus hijos/as ven y juegan para saber si lo que hacen y ven es apropiado.
- Capacidad de supervisión: los padres también varían en su propia comodidad con la tecnología y el ancho de banda para supervisar a sus hijos/as. Lleva tiempo y esfuerzo configurar el mundo online para tus hijos e hijas con las opciones adecuadas, por lo que es importante invertir tiempo y ser realista sobre la capacidad de supervisión, supervisar la actividad online o incluso establecer controles parentales a la hora de elaborar un plan que sea factible y realista para toda la familia.
- Bienestar digital: los padres deben ayudar a los hijos/as a desarrollar hábitos digitales saludables, como tomarse descansos, establecer límites de tiempo frente a la pantalla y participar en actividades fuera de línea. Los niños y adolescentes también pueden participar directamente en la creación conjunta de un plan familiar de medios de comunicación que ayude a la familia a alinearse con los comportamientos esperados dentro y fuera de la red.
- Bienestar fuera de línea: todos los niños necesitan formas de gestionar sus emociones y su bienestar fuera de Internet. El uso de la tecnología y los medios de comunicación pueden ayudar a conciliar el sueño o a gestionar emociones intensas, pero es importante que no sea la única manera. Los profesores, los pediatras y otras personas pueden aconsejarles sobre cómo ayudar a tu hijo/a a relajarse o a gestionar sentimientos intensos sin depender exclusivamente de los medios de comunicación. Otro aspecto del bienestar offline es que el tiempo frente a la pantalla no reste tiempo importante al desarrollo de las relaciones sociales con la familia y los compañeros, la actividad física, las tareas escolares, las actividades y mucho más.
Google ofrece varias herramientas y recursos que pueden ayudar a los padres y madres a gestionar el uso que hacen sus hijos/as de la tecnología y a fomentar el bienestar digital.
¿Qué pueden hacer grandes compañías de Internet como Google para proteger a los menores de los riesgos que entraña la Red?
Para proteger a los menores en Internet, Google proporciona a las familias herramientas y recursos que ayudan a crear una relación segura, saludable y productiva con la tecnología. He aquí cómo estamos actuando:
- Con un diseño adecuado a la edad: damos prioridad al diseño de productos y experiencias que se adapten a las necesidades cambiantes y a los niveles de madurez de los adolescentes. Esto incluye funciones como YouTube Kids, que ofrece contenidos seleccionados para el público más joven, o Family Link, que permite a los padres y madres gestionar las actividades online de sus hijos/as adolescentes.
- Con protecciones sólidas: aplicamos de forma proactiva medidas de protección, como la configuración predeterminada de SafeSearch y el filtrado de contenidos en YouTube, para proteger a los adolescentes de material dañino o inapropiado. Nuestros algoritmos identifican y eliminan activamente los contenidos que promueven tendencias peligrosas o autolesiones.
- A través de asociaciones educativas: colaboramos con organizaciones de confianza como Common Sense Media y la Fundación Jed para crear recursos y programas que eduquen a los adolescentes sobre ciudadanía digital, seguridad online y salud mental.
- Fomentando el bienestar digital: integramos funciones en nuestros productos que fomentan hábitos tecnológicos saludables. Esto incluye herramientas como los recordatorios “tómate un descanso” en YouTube y las opciones de gestión del tiempo frente a la pantalla en Family Link. También nos esforzamos por minimizar la recomendación de contenidos potencialmente dañinos que puedan afectar negativamente a la autoestima o la imagen corporal de los adolescentes.
Además, desde Google participamos activamente en investigaciones para comprender mejor el impacto de las redes sociales en la salud mental y el bienestar de los adolescentes. Utilizamos estos conocimientos para fundamentar el desarrollo de nuestros productos y nuestras decisiones políticas, esforzándonos continuamente por crear un entorno online más seguro y favorable para los jóvenes. De manera que trabajando juntos, podemos ayudar a los adolescentes a aprovechar los aspectos más positivos de las redes sociales y minimizar los riesgos. Se trata de fomentar una relación sana con la tecnología que contribuya a su bienestar general.
¿Cómo debería ser un ‘uso responsable’ del móvil y otros dispositivos con conexión a Internet por parte de un adolescente?
En Google creemos que la tecnología puede ser una herramienta increíble para aprender, conectar y explorar el mundo. Sin embargo, también reconocemos la importancia de un uso responsable, especialmente en el caso de los adolescentes. Estas son nuestras principales recomendaciones para que los padres y madres las compartan con sus hijos e hijas adolescentes:
- Sé consciente de tu tiempo: es fácil perderse en el mundo digital, así que anímate a poner límites al tiempo frente a la pantalla. Utilizando herramientas como la función “Tiempo de visualización” de YouTube o los ajustes de Bienestar Digital de tu dispositivo Android para hacer un seguimiento de tu uso y establecer recordatorios para los descansos.
- Prioriza el sueño: la luz azul que emiten las pantallas puede alterar los patrones de sueño, por lo que es importante evitar los dispositivos una hora antes de acostarse y considerar la posibilidad de utilizar funciones como “Luz nocturna“ para minimizar la exposición a la luz azul.
- Protege tu intimidad: sé prudente a la hora de compartir información personal en Internet, utiliza contraseñas seguras, activa la autenticación de dos factores y piénsatelo dos veces antes de publicar algo que no te gustaría que el mundo viera. La herramienta de comprobación de seguridad de Google puede ayudarte a evaluar y reforzar tu seguridad en Internet.
- Sé amable en Internet: recuerda que hay una persona real al otro lado de la pantalla y trata a los demás con respeto, aunque no estés de acuerdo con ellos. Evitando el ciberacoso y la difusión de contenidos nocivos.
- Selecciona tu feed: sigue cuentas y canales que te inspiren y te animen, y deja de seguir o silencia los que te hagan sentir mal contigo mismo o fomenten la negatividad. Recuerda que tú controlas lo que ves en Internet.
- Tómate descansos: aléjate de tus dispositivos con regularidad para participar en actividades fuera de línea. Pasa tiempo con amigos y familiares, práctica aficiones, haz ejercicio o simplemente disfruta de la naturaleza. Estas actividades son esenciales para tu bienestar físico y mental.
- Busca ayuda si la necesitas: si tienes problemas de adicción a Internet, ciberacoso u otros problemas online, no dudes en pedir ayuda. Habla con un adulto de confianza, un consejero o utiliza recursos como la Crisis Text Line. Recuerda que no estás solo.
- Explora lo bueno: Internet está lleno de recursos increíbles para el aprendizaje, la creatividad y la conexión social. utilízalo para explorar tus pasiones, aprender nuevas habilidades y conectar con personas que comparten tus intereses. Google Arts & Culture, por ejemplo, ofrece visitas virtuales a museos y lugares de interés cultural de todo el mundo.
- Sé crítico con la información: no todo lo que ves en Internet es cierto. Desarrolla habilidades de pensamiento crítico para evaluar la información que encuentres. Comprueba las fuentes, busca diferentes perspectivas y desconfía de los titulares sensacionalistas.
- El equilibrio es la clave: recuerda que la tecnología es una herramienta, no un estilo de vida. Utilízala con prudencia y no dejes que se apodere de tu vida. Busca un equilibrio saludable entre las actividades online y offline.
Los adolescentes pueden beneficiarse de una serie de salvaguardas en YouTube, como recordatorios para hacer descansos o irse a la cama y restricciones sobre contenidos inapropiados para los espectadores más jóvenes.
¿Qué podemos padres y educadores hacer para ayudar a fomentar ese uso responsable en los adolescentes?
Definitivamente, los padres, las madres y los educadores desempeñan un papel crucial en la formación de las experiencias de los adolescentes en Internet. He aquí algunas medidas que pueden adoptar:
- Empezar pronto e implicarse: tener conversaciones sobre seguridad online y ciudadanía digital desde el principio, incluso antes de que tu hijo/a tenga su propio dispositivo. A medida que crezcan, mantente involucrado en su vida online, pregúntale por sus aplicaciones y sitios web favoritos o comentad cualquier duda que pueda tener.
- Establecer expectativas y límites claros: establece normas claras sobre el tiempo frente a la pantalla, el uso de aplicaciones y el comportamiento en Internet. Habla de las posibles consecuencias de incumplir estas normas y asegúrate de que las entiende. También utiliza herramientas como Family Link para establecer límites de tiempo y gestionar el acceso a las aplicaciones.
- Enseña alfabetización digital: ayuda a los adolescentes a desarrollar las habilidades necesarias para evaluar de forma crítica la información online, identificar fuentes fiables y proteger su información personal. El programa Sé genial en Internet de Google ofrece recursos y actividades para enseñar a los niños sobre seguridad en Internet y ciudadanía digital.
- Fomentar la comunicación abierta: crea un espacio seguro para que tus hijo/as hablen de sus experiencias en Internet, tanto positivas como negativas. Hazles saber que estás ahí para escucharles y ofrecerles apoyo si tienen algún problema.
- Modela un comportamiento responsable: ten consciencia de tus propios hábitos tecnológicos y demuestra un uso responsable, es más probable que los adolescentes sigan las pautas si ven que los adultos dan buen ejemplo.
- Utiliza controles parentales: aprovecha las aplicaciones y funciones de control parental para supervisar la actividad de tus hijos/as, bloquear contenidos inapropiados y establecer límites de tiempo. Estas herramientas pueden ser muy útiles para crear un entorno online más seguro.
- Mantente informado: mantente al día sobre las últimas aplicaciones, tendencias y retos online a los que se enfrentan los adolescentes. Esto te ayudará a mantener conversaciones más relevantes y a proporcionar la orientación adecuada.
- Fomenta el pensamiento crítico: anima a tus hijos/as a cuestionar la información que ven en Internet, y ayúdale a desarrollar las habilidades necesarias para identificar noticias falsas, reconocer estafas en línea y evitar hacer clic en enlaces sospechosos.
- Fomenta las actividades fuera de línea: anima a tu hijo/a adolescente a participar en actividades que no impliquen el uso de pantallas. Esto podría incluir deportes, aficiones, voluntariado o pasar tiempo con amigos y familiares.
De esta manera, trabajando juntos, padres y madres, educadores y empresas tecnológicas como Google podemos crear un entorno online más seguro y saludable para los adolescentes. Creemos que con las herramientas, la educación y el apoyo adecuados, los jóvenes pueden prosperar en la era digital.