Solo con mirar su cara nos damos cuenta de que Ana Iglesias Panichelli , ganadora de MasterChef en 2020, es la viva imagen de la felicidad. Junto a su hija, Carlota, y en la cocina, su medio natural, la diseñadora de joyas nos habla de amor, proyectos y nutrición.
-Hace cuatro años desde que ganaste la octava edición de MasterChef, ¿cómo se vive el paso de ser alguien anónimo a un rostro conocido?
-Aún no me acostumbro, pero es una alegría ver que la gente se acerca a saludarme para decirme lo mucho que les gustó mi paso por el programa, y, desde que soy más activa en RR. SS., lo mucho que les gusto como persona, y esto me hace aún más ilusión.
-¿Qué es lo mejor que te llevas de tu paso por televisión?
-Haber coincidido con perfiles de personas tan diferentes, descubrir cómo funciona el mundo de la televisión y ver todo lo que hay detrás.
-En mayo de 2022 te casaste, y en septiembre de 2023 tuviste a tu hija, ¿se puede procesar tanta felicidad en tan poco tiempo?
-En los últimos cuatro años mi vida ha cambiado por completo. Y no sé cómo he conseguido asimilar tantas cosas nuevas, pero también estoy segura de que el 2024 viene cargado de muchas sorpresas más, que estoy deseando conocer.
“La maternidad Me ha cambiado la vida para bien. duermo poco y estoy cansada, pero puedo decir en voz alta que el nacimiento de mi hija es lo mejor que me ha pasado en la vida”
-¿Qué significó la llegada de Carlota?
-Me ha cambiado la vida, sin duda, para bien. Muchas veces dormimos poquísimo y estamos cansados, pero puedo decir en voz alta que el nacimiento de mi hija es lo mejor que me ha pasado en la vida.
-¿Tenías una idea idealizada de la maternidad o ha sido lo que esperabas?
-Creo que tenía un poco idealizada la maternidad, porque hasta que no tienes tu primer bebé no eres realmente consciente de todo lo que implica ser madre. Un hijo es una alegría inmensa, pero también requiere mucha responsabilidad. Aun así, ¡no lo cambiaría por nada! Mi hija, junto a mi marido, son mi mayor alegría, y creo que la dificultad que implica aprender a hacer ciertas cosas, como padres primerizos, también tiene su lado maravilloso y constructivo como matrimonio y familia.
-¿Qué es lo que más disfrutas de su crianza?
-Verla tan feliz. Cuando suena el despertador, voy a su habi-tación y, en cuanto me mira sonriendo, me siento con el corazón más lleno que nunca.
-¿Qué valores te gustaría inculcarle a Carlota?
-Creo que lo más importante es inculcarle a tu hijo que tiene que ser buena persona y hacer el bien a los demás.
-¿Cómo es tu marido, Rodrigo, como padre?, ¿te ha sorprendido?
-Adora a su hija y la cuida como nadie, está siendo el padre que sabía que sería.
“Creo que la alimentación infantil debe estar basada en una dieta equilibrada y variada, con ingredientes de gran valor nutricional, y evitar los alimentos procesados y ultraprocesados”
-En RR. SS. mostráis un estilo de vida muy activo, con viajes y mucho trabajo, ¿cómo os organizáis para llegar a todo con un bebé tan pequeño?
-Creo que la manera de poder hacer todo es no tener miedo a que las cosas salgan mal, no intentar que todo esté bajo control y dejarse llevar más por la aventura.
-Además de tu faceta como chef, fundaste tu firma de joyas hace más de siete años, ¿por qué desembarcaste en este mundo?
-Fue en mi segundo año de universidad, por mis ganas de emprender y plasmar mi identidad en un proyecto propio.
-Además, ahora estáis dándole a la firma un aire distinto, ¿en qué posición queréis ubicaros en el mercado?
-Estamos en un momento de cambio de imagen, y esto se debe a que la marca va a creciendo y pasando por las diferentes etapas de la vida, a la vez que lo hago yo. Queremos dirigirla a un público más adulto, cuya forma de consumir es más responsable.
-Sabemos que, además del diseño de joyas, la cocina es una de tus grandes pasiones, ¿qué tipo de platos soléis hacer en casa?
-En casa nos gusta comer de manera saludable, es decir, siguiendo una dieta equilibrada, en la que haya mucho aporte de verduras y un equilibrio entre proteínas e hidratos de carbono. Por ello, normalmente nuestras comidas suelen ser en cierta manera parecidas al plato de Harvard (mitad del plato verduras y frutas, un cuarto de hidratos de carbono complejos y otro cuarto para las proteínas).
-¿Qué momento, en torno a la mesa disfrutáis más en familia?
-La cena es el único momento del día en el que estamos juntos entre semana.
El componente visual de los platos es muy importante para los niños. Inspírate en estas deliciosas formas de presentar ingredientes nutritivos y saludables
-¿Cuáles crees que podrían ser los pilares de una alimentación saludable para los niños?
-Creo que esta debe ser parecida a la de los adultos, una dieta, como decía anteriormente, equilibrada y variada, con ingredientes de gran valor nutricional y tratando de evitar los alimentos procesados y ultraprocesados.
-¿Por qué nos has propuesto estas recetas para acompañar tu reportaje?
-Porque se complementan muy bien entre ellas, son recetas atractivas para los niños y constan de verduras, proteínas -de calidad- y fruta.
Brochetas de ‘minipancakes’ con fresas y crema de avellanas
Ingredientes
- 2 huevos
- 30 g de azúcar
- 1 cucharada de miel
- 1 cucharada de esencia de vainilla
- 110 g de harina
- 1 cucharada de polvo para hornear
- 50 ml de leche
- Crema de avellanas
- Fresas
Elaboración
Lava y seca las fresas, y parte en rodajas. Reserva. Bate en un bol los huevos, añade el azúcar, la miel y la esencia de vainilla, para que queden muy bien mezclados. Una vez bien integrados, agrega la harina, previmante tamiza con el polvo para hornear, y vierte la leche. Mezcla de nuevo hasta conseguir una masa homogénea. Una vez lista, reparte en círculos pequeños sobre la sartén caliente, y ligeramente engrasada. Cuando estén las tortitas, altérnalas, en capas, con la crema de avellanas, y las rodajas de fresas. Pincha con las brochetas y ¡listo!
Aprendiendo a comer
Pizzetas de boniato, tomate y albahaca
Ingredientes
- 1 boniato
- Salsa de tomate
- Tomates cherry
- Queso rallado
- Aceitunas negras
- Orégano
- Albahaca
- Aceite de oliva
Elaboración
Asa el boniato. Lamínalo de forma uniforme, ponlo en una fuente y mételo en el horno a 180 °C, 20 minutos, aproximadamente. Una vez tierno, agrega por encima de cada lámina de boniato, o pizzeta, la salsa de tomate, un poco de queso rallado y las aceitunas negras, así como los tomates cherry partidos en rodajas. Espolvorea con el orégano seco, y vuelve a hornear cinco minutos. Cuando estén, sácalas y decóralas con una hoja de albahaca.
Ana propone estas tres recetas porque se complementan entre ellas, son atractivas para los niños y constan de verduras, proteínas -de calidad- y fruta
Huevos de primavera
Ingredientes
- 6 huevos
- 2 cucharadas de queso crema
- 1 aguacate maduro
- 1 lata de atún
- ¼ de pimiento rojo
- Una pizca de sal
Elaboración
Cuece los huevos en agua hirviendo, entre diez y trece minutos, según cómo te guste la textura del huevo cocido. Una vez hervidos, déjalos templar y pélalos. Después, córtalos por la mitad. Con mucho cuidado, para no romperlos, quítales la yema. Pasa estas a un bol y aplástalas con ayuda de un tenedor. A continuación, añade la carne del aguacate y aplasta y remueve de nuevo con el tenedor, para obtener una pasta homogénea. Después, agrega las dos cucharadas de queso crema, para aportar textura al relleno, y una pizca de sal. Mezcla muy bien otra vez. Reserva. Lava y seca el pimiento. Córtalo en pequeños cuadrados, con el fin de aportar no solo un toque de color, sino también un extra de crunchy. Después, rellena las mitades de las claras cocidas con la mezcla elaborada en el bol (yemas, aguacate, queso crema...), emplata, y decora los huevos primavera con el pimiento troceado. Puedes servirlos en el momento o meterlos en la nevera y tomarlos fríos.