ni a haciendo deberes© GettyImages

Educación

‘A mi hijo le ponen muchos deberes y es muy pequeño’; ¿cómo deben intervenir los padres?

La psicóloga especialista en disciplina positiva Diana C. Jiménez asegura que ‘los deberes interfieren en el tiempo en familia’ y que no se puede exigir a los padres que dediquen a ellos el tiempo con sus hijos fuera del aula


16 de noviembre de 2023 - 18:07 CET

Lejos de entrar en  el eterno debate de deberes sí o deberes no , parece claro que en niños que aún son pequeños (y cursan Infantil o Primaria) los deberes deben ocupar un segundo plano. La prioridad en los primeros años de vida es pasar tiempo de ocio al aire libre: correr, ir al parque, sociabilizar, jugar… Sin embargo, algunos padres consideran que el nivel de tareas escolares que sus hijos de corta edad deben hacer en casa son demasiados. ¿Cuándo podemos considerar que los deberes son una sobrecarga más que un beneficio para los niños?

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“Siempre son una sobrecarga. Es una manera innecesaria de alargar el tiempo escolar. No les beneficia seguir conectados al plan del aula más allá de su jornada escolar. No se ha encontrado beneficios en ellos”, asegura Diana C. Jiménez, psicóloga especialista en disciplina positiva (@dianajimenezpsicologa en Instagram). “Desde mi experiencia y formación, así como apoyándome en estudios de otros profesionales con una larga experiencia e investigación: los deberes tal como los conocemos hoy día no son beneficiosos”.

Otra cuestión bien distinta es si nuestro hijo o nuestra hija nos pide ayuda con alguna materia o tiene interés en trabajarla en casa: “hay niños curiosos, que demandan más profundidad en lo visto en el colegio. Perfecto. Eso se alienta y se motiva. Como un deseo de ampliar lo dado”. La clave es que sea una motivación que nace de ellos, no una imposición externa.

Si de aprendizaje y de crecimiento personal se trata, la experta en disciplina positiva considera mucho más favorable otro tipo de actividades: “hay niños que salir del centro educativo y jugar, correr, saltar, soñar, idear, crear… es de lo mejor que pueden hacer para desarrollarse aún más y afianzar el contenido visto en la escuela”.

‘¿Qué debo hacer si mi hijo, de corta edad, tiene demasiados deberes?’

Lo adecuado es, según recomienda Jiménez, hablar con el tutor o el profesor y exponer a este la situación. “Fuera del horario escolar los niños son competencia de los padres y no se les puede exigir a los padres ese tiempo con sus hijos dedicado a deberes de aula”, recalca la experta. Y el motivo es más que claro: “los deberes interfieren con el tiempo en familia”.

“La jornada escolar debería alcanzar para dar los contenidos, si no es así, la solución no es sobrecargar a los niños, sino revisar qué y cómo se imparten las asignaturas”, añade. “Continuar con lo que se quedó a medias en clase suele ser tedioso para ellos o contraproducente, minando su autoestima y propiciando mayor desmotivación y falta de interés”.

“La organización del tiempo en el aula es cosa de los profesores; la organización del tiempo en casa es tarea de los padres”.

© Diana C. Jiménez (@dianajimenezpsicologa)

‘¿Debo ayudar a mi hijo a hacer los deberes?’

Independientemente de estar a favor o en contra de los deberes a niños pequeños, ¿qué hacer cuando deben enfrentarse a ellos? En ocasiones, los niños se saturan o no saben cómo realizar algunos ejercicios o tareas; ¿debemos los padres, en esos casos, ayudarles a hacer los deberes? “Estoy a favor de quereres en lugar de deberes”, responde la experta. “Investigar un tema, leer, ver documentales, ir a un museo, preparar una receta, hacer la lista de la compra, organizar sus ahorros, practicar deporte… son los verdaderos deberes”.

En todos estos aspectos, tan enriquecedores en el aprendizaje de todo niño (y de todo adulto), “los padres podemos acompañar y compartir siempre”, subraya Diana C. Jiménez. “Es una etapa en la vida de nuestros hijos que, de otra forma, se nos pasará desapercibida”

“Lo ideal es que centro educativo y familia caminen de la mano por el bien común del alumno”. En este sentido, “el debate no sería tanto si deberes si o no, como el entender que el sistema educativo vela por el beneficio del alumnado y las familias depositan su confianza en él”.