North West, la hija mayor de Kim Kardashian y Kane West, tiene dislexia. Ella misma, con tan solo 10 años, lo ha revelado con total naturalidad durante un directo de TikTok en compañía de su madre, justo tras pedirle a ella que le ayudara a escribir una palabra, que es la manera en la que se manifiesta este trastorno: “la dislexia es una dificultad específica para desarrollar la habilidad que nos permite leer y escribir de manera precisa, fluida y automatizada”, nos explica Carmen Silva, experta en detección e intervención de la dislexia y creadora del método Diverlexia para enseñar a leer y a escribir. “Puede evidenciarse desde el comienzo del aprendizaje lector, niños a los que les cuesta mucho aprender a leer, o cuando la habilidad lectora se automatiza, escolares que siguen leyendo muy lento, silabeando y con un evidente sobreesfuerzo”.
Este sobreesfuerzo es precisamente lo que mostraba North West en el directo de TikTok, pues intentaba escribir algo en el móvil con dificultad, para lo que le pide ayuda a su madre y le acaba dando el teléfono para que lo escriba ella. Es importante subrayar que este problema con la lectura y la escritura es, como nos indica la experta, “una dificultad específica porque esos niños y niñas no tienen por qué mostrar ningún tipo de problema o limitación en cualquier otra área o habilidad”.
El principal obstáculo con el que se pueden encontrar es que, “dado que la lectura y la escritura son el vehículo del desarrollo académico por excelencia, no contar con una habilidad lectora funcional afecta severamente al desempeño de los estudiantes en el ámbito escolar, algo que acaba repercutiendo en aspectos emocionales como la autoestima, la sensación de autoconfianza o la aversión al estudio”.
Así afecta la dislexia en el proceso de lectoescritura a los niños que la padecen
“Aunque podemos encontrar una amplia variedad de perfiles dentro de la dislexia, dependiendo sobre todo de la capacidad de compensación de cada individuo, de la calidad de su entorno o de sus rasgos de personalidad, los niños con dislexia suelen tardar más en aprender a leer y a escribir, especialmente cuando el grado de dislexia es severo”, detalla la creadora del método Diverlexia.
“Esto va generando un desfase académico que cada vez los aleja más de su grupo de referencia, impidiéndoles seguir el ritmo de la clase. Tienen capacidad para aprender los mismos contenidos, pero no pueden realizar las mismas tareas porque su lectura y escritura no son funcionales, dedican mucho más tiempo a los deberes y al estudio obteniendo resultados más bajos que los de la mayoría de sus compañeros y muchos aprenden la lección, pero no pueden plasmar lo aprendido en el examen. Todo esto va generando una frustración y una falta de seguridad tan elevada que al final se sienten incapaces y muchos abandonan”.
Quizás ese sea el motivo por el que Kim Kardashian le pregunta a su hija si está “segura de revelar esto aquí” y de que parezca no gustarle que la niña haya compartido con sus seguidores algo que ella nunca había contado públicamente. Sin embargo, con el apoyo adecuado, North puede hacer frente a sus dificultades.
Cómo los niños con dislexia pueden mejorar en el aprendizaje de la lectura y la escritura
Al preguntar a Carmen Silva, que es una de las mayores expertas en dislexia de España, si es posible que los niños que la padecen mejoren, responde con un rotundo “por supuesto”. Se puede lograr “con una enseñanza explícita y que respete rigurosamente el incremento de dificultad”. Nos cuenta que “el gran problema de los niños con dislexia, discalculia, disgrafía… o simplemente con peor capacidad para adquirir el aprendizaje académico es que el sistema educativo se salta muchísimos procesos intermedios; es decir, constantemente les pide a los escolares que corran una maratón sin haberlos entrenado para ello previamente. Por esto, cualquier escolar que parte de una situación de desventaja es incapaz de superar las exigencias académicas, ya que estas no son lógicas ni están bien secuenciadas”.
Así, “algunos de los procesos esenciales para un escolar con dislexia serían” los siguientes:
- Pasos en la prelectura y la prescritura (antes de aprender a leer y a escribir): habría que “desarrollar la conciencia fonológica, la discriminación auditiva, el vocabulario, la grafomotricidad, las habilidades viso-perceptivas y otros prerrequisitos”. La clave es “enseñar a leer y a escribir partiendo de lo que dominan en esos momentos, el lenguaje oral. Por tanto, lo primero es discriminar, pronunciar, reconocer y analizar los sonidos del lenguaje para después aprender el código que nos permite representarlos”.
- Afianzar el código alfabético de manera explícita. “Los escolares con dificultades de aprendizaje necesitan una enseñanza mucho más consciente y detallada. Es decir, necesitan comprender qué están haciendo, por qué, para qué y cómo han de hacerlo, no aprenden por mera repetición”.