El tamaño y la forma de las orejas pueden llamar la atención cuando se recibe al recién nacido. Estas pueden ser muy prominentes (lo que popularmente se denomina ‘de soplillo’), o tener otras deformidades como estar en copa (cuando se ha formado con arrugas, pliegues o de manera plana), la conocida como oreja de Stahl (presenta una forma puntiaguda) o la ausencia de hélix (cartílago superior externo).
La Dra. Conchi Lorca García es especialista en Cirugía Plástica, Reparadora y Estética y tiene mucha experiencia en cirugía plástica infantil. Desarrolla su trabajo en la sección de cirugía plástica infantil del Hospital General Universitario Gregorio Marañón de Madrid, en Sensabell y en Centro Creciendo Madrid. A ella le hemos preguntado sobre la técnica del moldeado auricular para estos casos.
¿Qué es el moldeado auricular?
El moldeado auricular es una técnica indicada cuando hay alguna malformación o deformidad “que altera la forma o la posición del pabellón auricular”, tal como cuenta la experta, que divulga en Instagram en la cuenta @dra.lorca.
Se realiza en consulta “y no precisa de ningún tipo de anestesia, pues no es dolorosa ni molesta”, aclara. El procedimiento es así: se moldea una sonda (u otro tipo de material, pues puede hacerse de diferentes maneras) que se colocará en el pabellón auricular deformado “para darle una forma más anatómica e incluso acercarlo a la cabeza si se encuentra muy separado”, explica.
La sonda se fija con unas tiras de papel o con esparadrapo. Los padres también juegan un papel clave, pues se les enseña a colocarla, ya que “cada 48 horas se recomienda retirar, comprobar que no hay ninguna zona de roce o herida y volver a colocar”.
El moldeado auricular se realiza tanto en la sanidad pública como en la sanidad privada, pero es importante “encontrar a un profesional con experiencia y que sepa hacerlo”, recomienda la Dra. Lorca.
¿Desde qué momento se lleva a cabo el moldeado auricular?
El moldeado auricular solo funciona en los tres primeros meses de vida del bebé. Se puede empezar desde la primera o segunda semana de vida. “Cuanto antes se coloque, mayor es la efectividad y menor es la duración del tratamiento”, aclara la cirujana plástica.
La razón es que, especialmente en esas primeras semanas de vida, aún hay estrógenos de la madre circulando por la sangre del bebé. “Estos estrógenos hacen que el cartílago sea mucho más moldeable y que se adapte fácilmente a la nueva forma o posición que nosotros le queremos dar”, apunta.
Así, pues, es importante realizar la técnica antes de los tres meses, pues luego no tiene efecto.
¿Favorece la salud del recién nacido o es solo un asunto estético?
En general, el beneficio del moldeado auricular es solamente estético, sin desdeñar este aspecto, que puede hacer sentir mal a muchos niños según van creciendo. No obstante, “aunque sea estético, el moldeado auricular puede solucionar alteraciones que después serían muy difíciles (e incluso imposibles) de corregir quirúrgicamente, con la ventaja obvia de evitar una cirugía y una anestesia general en un niño”, subraya.
Además, hay que tener en cuenta que, ante problemas estéticos infantiles, el consejo profesional es actuar siempre antes de que conlleve un problema emocional o de relación. Así, la intervención no debería ser para reparar un daño psicológico, sino adelantándose a la posibilidad de que este aparezca.
En todo caso, sí que puede haber beneficios para la salud del pequeño, pues hay que tener en cuenta que, “en algunos casos, donde la concha está mal rotada o posicionada puede taponar la entrada al conducto auditivo”, por lo que el moldeado auricular ayudaría también a mejorar la audición.
¿Qué sucede con la oreja moldeada cuando va creciendo?
Algunas alteraciones de la oreja responden mejor que otras al moldeado auricular. Así, por ejemplo, las orejas prominentes (o de ‘soplillo’) pueden volver a aparecer con el crecimiento, pues esta técnica no es tan efectiva con este problema.
En el resto de casos, “la oreja crece de manera normal, habitualmente con la forma que se le ha conseguido dar tras el tratamiento”, insiste la Dra. Conchi Lorca.
Excepto la edad (el niño ha de ser menor de tres meses para que haya éxito), no hay más contraindicaciones a la hora de aplicar el moldeado auricular, ya que se puede hacer en todos los bebés.