A menudo pensamos que entreteniendo a los peques con dibujos animados o juegos en la tablet no estamos interfiriendo en su aprendizaje o desarrollo, pero lo cierto es que el uso excesivo de pantallas es peligroso a largo plazo para ellos. “Las pantallas y dispositivos inteligentes se han convertido en el día a día de los niños de hoy y, ahora mucho más que en años anteriores, nosotros, los padres, debemos estar atentos y preocuparnos por el efecto negativo que su uso desmedido trae”.
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Si tu peque hace uso de pantallas, debe hacerlo bajo una serie de restricciones y recomendaciones en cuanto a límite de tiempo, acompañamiento en todo momento por parte de los padres para poder controlar qué es lo que el niño ve y, sobre todo, elegir los contenidos más adecuados para ellos según su edad.
Aunque vivimos en un mundo digitalizado y los niños pueden obtener muchos beneficios y aprendizajes de las pantallas, de los ordenadores y del uso de la tecnología, cuanto más retrasemos exponerles a dispositivos electrónicos, mejor. ¿Por qué? “Para obtener beneficios de las pantallas es necesario ser cautelosos y, sobre todo, brindar acompañamiento permanente. Son muchísimos los niños que no saben divertirse sin un dispositivo electrónico, dejan de jugar al aire libre o dejan de usar sus juguetes porque no los encuentran interesantes y es que muchos padres no se percatan de las consecuencias futuras del uso descontrolado de estos dispositivos”, asegura Christy Gois, mamá, TEDx speaker, educadora parental y experta en crianza consciente (@criarparacambiarelmundo).
Abusar de las pantallas trae consecuencias negativas, según la OMS
De hecho, según nos cuenta la experta, la propia OMS es la que alerta sobre “las consecuencias directas en la salud en el desarrollo de los niños”. Algunas de estas son:
Conductas adictivas: los móviles son una de las plataformas de ocio más populares, miles de apps de juegos disponibles e infinitas posibilidades de visualización, por eso se hace muy sencillo perder la noción del tiempo y engancharse en su uso. Los menores sin límites en el uso del móvil pueden desarrollar conductas de dependencia y además irritabilidad extrema cuando intentas alejarlos de ellas.
Pérdida de la socialización: los niños cada día interactúan menos entre sí, mucho menos con su familia y entorno desde que las nuevas tecnologías están tan arraigadas en la primera infancia, nosotros lo cuidadores principales debemos asegurarnos de que los niños pasen la mayor parte de su tiempo socializando cara a cara con otras personas y sin pantallas de por medio. El móvil no puede ser el sustituto de los tiempos de lectura o juego de los niños.
Aumentos del riesgo de abuso: los niños más expuestos a las tecnologías también son los más explotables, tienen una mayor probabilidad de sufrir de abusos digitales.
Alteración del desarrollo: los niños que están constantemente expuestos a las pantallas de forma excesiva pueden sufrir de problemas de desarrollo que alteran su evolución normal, déficit de atención, problemas de memoria, disminución de su rendimiento académico, problemas de sueño y también una reducción de sus capacidades.
Obesidad infantil: el uso de las nuevas tecnologías ha fomentado el sedentarismo y con el incremento del peso y las enfermedades derivadas de la obesidad como la diabetes, problemas cardíacos y cardiovasculares
Aunque nos parezca inofensivo poner un ratito la televisión, Youtube o los últimos dibujos de Netflix a nuestros peques para entretenerles durante un rato, debemos saber que el tiempo de exposición es muy importante.
Y no lo decimos nosotros, sino que tal y como nos cuenta la experta: “La OMS recomienda que no se expongan en ningún momento del día a las pantallas a los niños menores de 2 años y, además, que entre los 2 y los 5 años los niños usen estos dispositivos como máximo una hora al día y siempre con la supervisión de un adulto por lo que todo tiempo que exceda esta recomendación se considera excesivo de acuerdo a su edad”.
Pero, además del tiempo de exposición, elegir el programa o dibujos animados correctos, según la edad del peque, es igual de importante. Por ello, la educadora nos da algunos ejemplos de programas que los peques están recomendados según su edad:
Para niños de +2 años:
Cocomelon
Para niños +3 años :
Daniel el Tigre
Gallina Pintadita
Little Baby Bum
George el Curioso
Super Simple Song
Para niños +5 años:
The Big Fun Crafty
Brainchild
“Sin embargo, lo más importante del contenido que consumen nuestros hijos en pantallas es que estos sean acordes con los valores y principios que como familia quieres sembrar en ellos”, añade.
Aunque parece difícil criar sin pantallas en un mundo digital la verdad es que “es necesario hacerlo”, asegura la educadora. No somos conscientes de la capacidad de aprendizaje que tienen los niños, “su mente es asombrosa, como una esponja ávida de conocimientos que se adquieren prácticamente sin esfuerzo”, nos cuenta.
De hecho, “la neurociencia ha demostrado que la mejor forma de aprender es a través de la experiencia porque entran en juego los sentidos, el movimiento del cuerpo y las emociones. El aprendizaje requiere de la participación activa del niño, el problema es que frente a las pantallas los niños pasan a ser pasivos que absorben realidades dinámicas, llena de colores inestables, cambios de sonido, de plano y de enfoque y todo esto lo sobre estimula y es la razón por la que se aburren con la realidad estática”, advierte.
Por tanto, ¿qué podemos hacer para mantenerles activos a la hora de hacer actividades ya sean de ocio o de aprendizaje? Pues según la experta, una opción válida puede ser apostar por la filosofía Montessori. “La recomendación, sin duda alguna, en la primera infancia, es adentrarse en el método Montessori, ya que los niños aprenden mejor con actividades que consideran útiles en la vida cotidiana, la experiencia de aprendizaje con la estimulación adecuada y el mínimo uso de la tecnología”.
Y, ¿cómo aplicar este método? Con este listado de actividades y juegos que nos da la experta en educación, te será mucho más fácil comenzar a aplicar este tipo de educación a tus peques:
“El establecimiento de límites en este y otros aspectos de la crianza siempre tendrá como respuesta un poco de resistencia ya que interviene en ellos un cambio en una rutina con la que el niño se sentía cómodo”. Esta resistencia son los terribles berrinches que pueden pillar si les quitamos la tablet o el móvil cuando están viendo sus dibujos favoritos. ¿Cómo gestionar estos momentos? “La recomendación es hacer la disminución del tiempo de pantallas de manera progresiva en caso de existir un exceso de exposición a estas”, recomienda.
Además de disminuir gradualmente su exposición, “podemos anticipar la norma y establecer el tiempolímite con herramientas que le ayuden a comprender fácilmente que no es tiempo de ver pantallas”.
Y, ¿cómo hacerlo? En la primera infancia el tiempo es abstracto así que frases como estas pueden ayudar, según aconseja la experta:“‘En cuanto se termine el capitulo apagamos la televisión’, ‘cuando suene esta alarma es tiempo de apagar la tablet’”. Pero, pueden no funcionar siempre así que “si a pesar de esto la rabieta aparece,tendremos que contener y abrazar la emoción, sin ceder en el límite. En esos casos pueden ayudar frases como esta: ‘Sé que te gusta mucho este programa, pero el tiempo terminó ya y debemos apagarlo’”, concluye la experta.
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