Que los peques se pongan malitos ya es una lata porque se encuentran mal, sobre todo, si tienen fiebre, para algunos de ellos, lo es todavía más tener que tomar la medicación. Y es que ¡seamos sinceros!, los jarabes no es que tengan el mejor gusto del mundo, y en el caso de los peques, puede que haya quien no los tolere.
María González, matrona y enfermera pediátrica, quién además divulga a través de su perfil de redes sociales @mariagonzalezmatrona, nos va a dar unos trucos para conseguir que los peques se tomen la medicación sin dramas, además de decirnos cuáles son los medicamentos ‘menos malos’ (en cuanto a sabor), del mercado.
“Los medicamentos no son chuches”
Ante todo, debemos explicar a los niños que, tomar el medicamento es necesario para ponerse buenos, y que deben hacerlo independientemente del sabor.
“En general todos los medicamentos saben mal a causa de sus principios activos, pero, en el caso de los medicamentos pediátricos, la mayoría suelen tener aditivos para mejorarlos”, nos aclara.
Entonces, claro, estos aditivos tienen como objetivo facilitar la toma de los medicamentos a los más pequeños para así retirar el mal sabor de algunos de ellos. “Pero, hemos de tener en cuenta, que es fundamental que las niñas y niños entiendan que, aunque algunos sepan bien, no son chuches, son medicamentos y, por tanto, solo hay que tomarlos cuando se está enferma/o”, advierte.
¿Cuáles son los medicamentos que peor saben?
La experta nos cuenta que el sabor de los medicamentos suele ser bastante amargo en general, y nos da una lista que, bajo su opinión, están “en orden de peor sabor”:
- Estilsona (corticoide indicado en procesos inflamatorios y autoinmunes como: bronquitis, laringitis, alergias…): es extremadamente amargo. La ventaja es que las dosis suelen ser de poca cantidad.
- Antibióticos: destacando la claritromicina y la clindamicina.
- Antipiréticos e ibuprofeno: son los más usados y cuyos principios activos más aditivos soporta, de ahí que sus sabores sean los más agradables.
Trucos para que los peques tomen el medicamento
“Una cosa muy importante a tener en cuenta, es que debemos siempre explicar de manera acorde a su edad, la situación. Han de comprender que tomar la medicación es necesario para que se curen, que les hará sentirse mejor y nunca engañarlos”, advierte la enfermera y matrona.
Y nos da los siguientes trucos para ayudarnos a que los peques tomen la medicación de la mejor forma posible:
- Un recurso muy interesante en este sentido, es leer algún libro que les ayude a comprender la situación y aceptar mejor la toma del medicamento pese a tener un sabor poco agradable. Mis favoritos son: El sueño mágico de Shamán (Ed. WeebleBooks) o Las bolas rojas . También hay algún recurso en Youtube, como Momo no quiere tomarse la medicina.
- Otro recurso interesante es dar el fármaco poco a poco, en pequeñas cantidades para que no se agobien, ofreciéndoles aquella bebida que más les apetezca durante el proceso. -Si son mayores, hacerles participes del proceso y darles a elegir como quieren hacerlo, de golpe o poco a poco.
- Podemos mejorar su toma, si antes de darlos ofrecemos algún alimento muy frio, como un polo o helado, incluso hacer cubitos de hielo con leche de madre o fórmula, en el caso que sean lactantes. A continuación, dar el medicamento, el cual podemos enfriar en la propia jeringuilla en la nevera un rato antes, y seguidamente volver a ofrecer el polo o el helado.
- También podemos enmascarar el medicamento añadiéndolo a algún alimento de sabor ácido, como zumo de naranja o piña, yogur de limón.
- Otra manera de que los acepten mejor, es negociar con ellos la toma posterior de algún alimento que le guste mucho, como un poco de chocolate o dulce casero. En los casos más difíciles, podemos negociar el fin del tratamiento con algún premio que les haga ilusión, como ir a un parque especial o al cine.
¿Qué hacer cuando se trata de sobres o pastillas?
Por norma general los medicamentos de los niños más pequeños suelen ser en formato jarabe para que su ingesta sea más fácil. “Generalmente, hasta los 5 años no serán capaces de tragar pastillas y recordar que la mayoría se podrán partir en trozos más pequeños. Los sobres pueden disolverse en cualquier bebida o yogur, para endulzar , asegurándonos que han de tomar absolutamente todo“, recomienda.
¿Qué momento del día es mejor?
También debemos tener en cuenta cuándo es la mejor hora o momento del día para ofrecer al niño tomar el medicamento. Por supuesto, siempre dependerá de su estado y de si es antibiótico y, por tanto, está supeditado a un horario. Pero, en general, la experta aconseja: “El mejor momento del día para tomar el fármaco es antes de comer, para que, en caso de vómito , no pierdan la comida”.
¿Cómo hacerlo de forma respetuosa?
Los trucos que nos ha comentado en el punto anterior deben llevarse a cabo de la forma más respetuosa posible.
A veces, las prisas del día a día, el estrés y presión que puede causar al niño el momento pueden llevarnos a perder la paciencia y los nervios. “Debemos hacerlo de forma muy empática y sincera, haciéndoles partícipes del proceso. Si son más mayores, pueden ir incluso a la farmacia, ver como disuelves el medicamento, dejarles una jeringuilla para que ellas y ellos también jueguen. Podéis incluso simular que tú tomas también el fármaco y que, pese a que no te agrada mucho el sabor, lo tomas. El juego es parte fundamental de su aprendizaje, ¿quién no ha jugado a ser médica/ o enfermera/?”, nos dice la experta.
¿En qué casos dar paracetamol y en qué casos ibuprofeno?
Esta es una de las preguntas del millón y es que son los medicamentos más comunes que se dan a los peques cuando estos están enfermos.
Pero, ¿cuándo se recomienda tomar uno y otro? La experta nos responde que “ambos fármacos son analgésicos y antipiréticos (bajan la fiebre), pero solo el Ibuprofeno es antiinflamatorio. Así pues, lo reservaremos para aquellos casos en los que hay más inflamación, como en otitis o anginas; o bien cuando haya que combinarlos con el paracetamol para fiebre altas que no bajan”.
¿Cuáles son los fármacos que mejor sabor tienen?
A la hora de facilitar la ingesta del medicamento a aquellos niños que son más complicados para tomarlos, la experta nos da una lista de las marcas comerciales que tienen “mejor sabor”, según su opinión:
Ibuprofeno:
- APIROFENO 40 mg/ml Sabor fresa
- ALGIDRIN 20 O 40 MG/ML Sabor frutos del bosque.
- IBUDOL PEDIÁTRICO a partir de los 7 años, en sobre, no necesita agua y muy buen sabor.
Parecetamol: “en general, todos son bastante mal tolerados por su sabor”, detalla.
Y sugiere:
- • DOLOSTOP PED 100 mg/sol, sabor a fresa.
- • APIRETAL
Los supositorios, otra alternativa
Para aquellos niños más reticentes a la toma de medicamentos, que literalmente, es imposible que logren tomarla de forma pausada y tranquila, la experta nos dice que “siempre podemos recurrir a los supositorios que, en este caso, serían Febrectal de 150 mg para lactantes o de 300 mg para niños más mayores”, recomienda.