Cómo crear un huerto urbano en casa con tus hijos paso a paso

Tu huerto dependerá en gran medida del espacio con el que cuentes para tenerlo. No es lo mismo tener un piso sin balcón, una terraza o un jardín. Sea cual sea el lugar donde lo vayas a hacer lo importante es que el adaptes una zona solo para ese uso. “Que sepan donde está ‘lo suyo’ y así puedan identificar mejor si algo germina, cómo crece e incluso cosecharlo. Esto es relativamente fácil en casa porque podemos dejarles una maceta grande para ellos e, incluso, regalarles una pequeña mesa de cultivo. Si tenemos una zona de jardín o huerto para ellos, que sea de máximo 1m2 (30x30x30cm suele ser lo más normal) para que no ‘se pierdan’ y puedan trabajarla casi incluso sin ayuda”, recomienda el experto.

Por lo que piensa que querrán ver que su trabajo da sus frutos, nunca mejor dicho, es decir, “van a necesitar ver cambios y que la dificultad sea baja”, dice el experto. Para ello, recomienda apostar por “los cultivos de hoja, porque con buenas condiciones de luz y riegos van a crecer rápido. Si lo vas a hacer partícipe de tu propia huerta o ‘macetohuerto’, deja que aprenda a identificar sus tomates favoritos, la próxima fresa que se podrá comer o cómo florece y crece un guisante. Así luego sentirá curiosidad por seguir la evolución hasta el momento de la cosecha”, asegura.

“La buena tierra tiene buen abono orgánico (tus mejores aliados serán el compost o el humus de lombriz). Limpios, ecológicos y que ellos podrán añadir a puñados a la tierra tanto en el momento de poner el plantel como durante su crecimiento. Si tienes para ti un poco de fertilizante líquido ecológico (cualquiera para huerto y frutales), ponle un taponcito en una regadera y enséñale a regar los cultivos con ‘vitaminas’ para las plantas”, aconseja.

Un huerto también enseñará a nuestro peque a ver la realidad de la naturaleza y saber que nuestras plantas pueden enfermar a causa de plagas. Esto es algo normal y “son cosas que a poco que investiguemos podemos solucionarlas con productos o remedios ecológicos”, asegura el experto. Y aconseja: “Quizá tener su propia pulverizadora o ‘flis-flis’ mini le enseñe a cuidar su huerta. Si ve que un caracol, un pulgón o algún ‘bicho’ se come su planta, aprenderá a esforzarse y valorar más su cosecha”.

El experto nos recomienda apostar por los siguientes tipos de cultivos para plantar en nuestro huerto urbano en casa con niños:

• Desde plantel, cultivos de hoja sencillos: lechuga, escarola, acelgas (especialmente las de colores variados), espinaca. Estos los pueden cosechar por hojitas para hacerse “su” ensalada
• Desde plantel, cultivos reconocibles: tomate (especialmente el cherry), pimientos y sobre todo las fresas. Un cultivo ecológico en casa te permitirá que tu peque agarre una fresa madura y se la coma directamente de la planta. Igual con los cherris.
• Semillas de leguminosas directamente a tierra de ciclo largo: habas, judías, guisantes. Poner una noche en agua, enterrar semilla al día siguiente, ver el momento en que germina y va creciendo.
• Semillas de de cultivos de ciclo corto: rabanitos .
• Bandejas de microbrotes (microgreens). En una semana y media máximo tendrá su propio cultivo para cosechar.
• Semillas de frutales: el aguacate de toda la vida tanto en agua como enterrando la semilla en una maceta, sembrar semillas de manzana, pera, limón, naranja, mandarino... y dejar que crezcan.

Apuesta por un cultivo sin químicos y por productos siempre ecológicos , ya que, por un lado, será mucho más seguro para el peque y, por otro, les enseñarás que es posible mantener unas plantas saludables de forma natural.

Crear y cultivar un huerto urbano en casa puede ensuciar tanto a los niños como el lugar donde lo hagas así que te recomendamos que el peque tenga su propio delantal o ropa que no importe que se ensucie. También es ideal que para que el niño pueda hacer sus tareas tenga herramientas que sean de su tamaño que sean manejables para él. Existen muchas opciones de kits de jardinería para peques que son perfectos para ello.

Enseñar a los niños la oportunidad de estar en contacto con las plantas hace que aprendan a cuidarlas y mantenerlas, que conozcan qué animalitos viven alrededor, qué relación tienen unos cultivos con otros, cómo es el desarrollo y crecimiento de cada una de las frutas, de las verduras…

También estaremos enseñándoles a ser responsables con sus tareas y con el medio ambiente, ya que mantener las plantas sanas no es una tarea fácil, a favorecer su paciencia en un mundo en el que prima la inmediatez y el tener todo al instante puesto que cuando plantas una semilla hay que esperar a que esta germine, les inculcaremos el amor por la naturaleza porque cogerán cariño a sus cultivos, autonomía en el desempeño de las tareas como regar, remover la tierra, plantar… entre otros muchos beneficios.

Los cuentos serán un apoyo extra e información valiosa para aprender todo sobre los huertos, los cultivos, saber qué conlleva cuidar una planta, qué es la fotosíntesis, cuáles son las partes de una flor… Te recomendamos algunos títulos, pero tienes infinitas opciones, ¡eso sí! Asegúrate de que sean lecturas siempre adaptadas y recomendadas para la edad de tu peque: El huerto (Creciendo con Montessori. Pequeñas manitas) de Klara Moncho (Ed.Beascoa), ¿Qué planta crece aquí? De Constanza Droop (Ed. Blume) o Las plantas de Sagrario Pinto y Mª Isabel Fuentes (Ed. Anaya Infantil y Juvenil).