El perímetro craneal es una de las medidas rutinarias que se realizan al bebé desde su nacimiento, incluso intraútero que ofrece mucha y muy valiosa información sobre el desarrollo de los componentes del cráneo (parénquima encefálico, líquido cefalorraquídeo y contenido óseo y conectivo). Estas medidas se realizan con un metro de sastre en la consulta del pediatra y se comparan mediante el uso de gráficos de crecimiento estandarizados con los percentiles de otros niños de la misma edad y sexo.
¿Qué ocurre cuando se determina una macrocefalia? “Macrocefalia significa ‘cabeza grande’ y se produce cuando hay una alteración en la circunferencia de la cabeza, y que esta es más grande comparándola con otros niños y niñas de la edad a la que corresponda esa medición. Esto puede ocurrir desde el nacimiento e incluso desde dentro del vientre materno, de ahí que en las revisiones ecográficas se mida la circunferencia del feto ”, nos explica el Dr. Jorge Muñoz pediatra y autor del libro ‘Doctor, ¿y ahora qué?’ (@jorgemunozpedaitra).
Cuáles son las causas de la macrocefalia
Es una medida variable, es decir, no existe una medición universal que la defina sino que es el pediatra quién lo diagnosticará junto con otros factores del desarrollo del niño o, si se sabe, la causa que lo haya provocado.
“Son varias las causas que producen macrocefalia. Puede ser por una malformación del desarrollo del cerebro dentro del útero, donde el líquido cefaloraquídeo no drena bien, lo que se llama hidrocefalia y el líquido está en tensión. Asimismo, puede estar relacionado con situaciones como el enanismo, neurofibromatosis… y otros síndromes. También existe la macrocefalia familiar benigna, donde el niño tiene la cabeza grande pero también el papá o la mamá lo tienen, y no pasa absolutamente nada”, nos cuenta el doctor.
Diagnóstico y pronóstico de la macrocefalia
“El diagnóstico se puede realizar desde dentro del útero midiendo la circunferencia del cráneo del futuro bebé o una vez que nacen, en las visitas rutinarias al pediatra y también por lo que se llama la clínica. El pediatra por experiencia ya ve que el niño tiene la cabeza grande y aún así, se mide y se comparan los percentiles para hacer el diagnóstico”.
Por ello, las revisiones deben ser muy completas y preguntar todo tipo de información a los padres sobre los antecedentes tanto prenatales como perinatales como son: posibles infecciones intraútero, exposiciones a radiaciones, fármacos, edad gestacional, complicaciones durante el parto… Así como su desarrollo psicomotor tanto a nivel motor, social y cognitivo.
Para un buen pronóstico, “es importante conocer la causa, saber si está relacionada con algún síndrome y, por supuesto, trabajar el retraso intelectual que algunos pueden tener. Y es que, cerca de la mitad de pacientes con macrocefalia tienen algún retraso intelectual neurológico que hay que trabajar. Físicamente, a medida que el niño va creciendo, se va compensando y la diferencia de tamaño es menos evidente”, asegura el pediatra.
Cuál es el tratamiento de la macrocefalia
Dado que la macrocefalia puede deberse a múltiples causas tanto la exploración física como saber detectar determinados signos de alarma en el desarrollo psicomotor del pequeño, pueden ayudar a diagnosticar de forma precoz causas más graves como puede ser la hidrocefalia, que antes comentaba el doctor. Cuanto antes se detecte alguna de estas alteraciones antes se podrá poner el tratamiento más acorde, indicado siempre por el pediatra o por el especialista en cuestión.
Igualmente, “el tratamiento depende de la causa. Si es una hidrocefalea, en ocasiones, hay que poner drenajes ‘shunt’ para liberar esa presión intracraneal al pequeño que puede traer consecuencias. Y, por supuesto, si está relacionado con algún síndrome se trabajará dicho síndrome. El tema de la estética, si el niño es neurolgicamente normal, no hay que hacer nada. Por su parte, si hay un retraso cognitivo neurológico habrá que trabajarlo con lo que se llama estimulación temprana , psicopedagogos, por el retraso, no por el tema estético”, indica el doctor para concluir.