Estas son las imágenes más divertidas con las que tus hijos acabarán por pedirte una mascota

La foto ganadora corresponde a esta en la que aparecen dos gatos sin cabeza. Sin embargo, la realidad es otra, están más bien enroscados con sus cuellos. Ambos gatos, cuenta el autor de la imagen, “saltaron sobre la pared de repente y, como si de un dibujo animado se tratase, enroscaron sus cabezas”. Un momento muy divertido para Kenichi Morinaga, que le ha valido el primer premio del certamen, y que es el resultado de una serie de cientos de imágenes tomadas con su cámara desde que vino a Europa de viaje, cuando quedó fascinado de los gatos que encontraba por la calle. Desde entonces, no ha parado de fotografiarlos.

El premio para la mejor fotografía con un perro de protagonista se lo ha llevado el español José Bayón, que capturó esta instantánea de un perro saltando en un jardín. Un perro que, según cuenta su autor, “es un cachorro de apenas diez meses que ha sido adoptado, tras ser atropellado por un coche”. No se sabe cómo, pero fue rescatado y salvado, siendo esta vez su primer contacto con el agua. De ahí su actitud, que muestra una gran pasión por ella. Como su autor dice, “amor a primera vista”.

En la categoría dedicada a los caballos, destaca esta imagen tomada por Radim Filipek, en la que se nos muestra la tierna imagen de una madre feliz y su hija de tres años de edad, Monty. Y no, no son personas humanas, sino dos burritas preciosas que, en muchas ocasiones, se convierten en mascotas y grandes amigas. De hecho, la madre parece reírse ante la cámara.

Esta divertida alpaca es la protagonista de esta imagen que, aunque no es propiamente una mascota, ha sido premiada en la categoría que engloba al resto de animales. La fotografía es muy graciosa, nos dice su autor, “porque parece que el animal está fumando un cigarro”. Una especie que, en realidad, es originaria de Norteamérica, pero que migró hacia Sudamérica y que ahora todos asociamos al país de Perú.

En la categoría junior, ha sido premiada esta imagen tomada en el pueblo de Loughborough, en Reino Unido, cuyo título sería: Jack el Gato atrapado en el seto. Su joven autora se declara amante de los animales y asegura tener un vínculo especial con Jack, que dice “se ha convertido ya en un personaje muy real que nos hace reír mucho”. Se convirtió en su mascota desde el día que salieron a dar una vuelta por la mañana y, al llegar a casa, se lo encontraron encaramado al seto.

“Este es mi amigo, David, y su perro Dudley”, dice la autora de esta imagen quien, además, confesó cuándo y cómo la capturó: “Durante los primeros días de la COVID, David y yo aprovechamos el encierro un día que, además, fue precioso, y salimos a tomar un sinfín de fotografías. Dudley estaba tan contento cuando nos vió volver que lanzó sus patas alrededor de los hombros de David, ahí es cuando yo disparé la cámara”. Ambos, que se declaran amantes de los animales en general y de los perros en particular, hacen mención también al corte de pelo de él, que no es más que otra consecuencia de los días de pandemia. Esta es la fotografía que ha ganado en la categoría que premia las imágenes de mascotas con sus dueños.

El premio que ha concedido la gente y no el jurado recae en esta imagen de Marko Jovanovic y la historia no puede ser más bonita: el perro protagonista se llama Carter y estaba en una de las listas de mascotas en riesgo de eutanasia que existen en Estados Unidos, concretamente, en California. Su autor dice que “viajaron desde Chicago para rescatar a este perro y que, al volver, esta fue su primera experiencia con la nieve, ¡no sabía lo que se había estado perdiendo todos estos años!”.

Esta divertida imagen se ha llevado el premio a la mejor fotografía según la propia organización que organiza el certamen. Su autor asegura que salió tal cual, “es lo que ví un día cuando paré debajo de un semáforo con mi coche; al principio, ¡pensé que era el propio perro quien iba conduciendo!”.

Con esta imagen, comienzan las fotografías que, sin ser premiadas en el certamen, sí que han recibido una mención especial. En este caso, Rosie es una gata muy dispuesta que estaba ayudando a su dueña en el invernadero y, nos dice, “decidió intentar, de la manera más atractiva y con la ayuda de la carretilla que tenemos, ponerse de pie y persuadirme para que le diese un puñado de sus golosinas favoritas”.

De nuevo, la mascota protagonista de esta imagen con mención especial es un gato llamado Heddon que, por su cara, ha gustado mucho a los miembros del jurado, una cara de sorpresa que suele poner en muchas ocasiones.

En esta ocasión, tenemos a una simpática gatita que fue rescatada, cuenta su dueño, del centro de cuidados para los gatos que tiene en la localidad en la que vive. Su gatita, en este momento, estaba en una de las últimas puertas de su pasillo y, como en otras ocasiones, se levantó de un salto para sostener la puerta. Quizás, asegura el autor, “porque estaba ya desesperada por salir de ahí”.

Estos dos perritos viven en Plymouth, Reino Unido. Uno de ellos es Benji que, con toda su determinación, quería hacerse con el delicioso premio que había dejado su dueño para ellos, incluso si eso significaba quitárselo a su hermano mayor, que vemos también en la imagen y que se llama Doug.

Para esta imagen, de nuevo, tenemos una gata que, a diferencia de los demás, está muy concentrada en su tarea. Tanto que no presta ni atención a la fotografía. Sí, está jugando al ajedrez. Se llama Candy y vive en Wymondham, en Reino Unido.

En esta ocasión, su autor (que es el mismo que ha ganado el mayor premio del certamen con la primera fotografía de todas) le dejó su Smartphone, con el que suele subir todas sus fotografías a sus redes sociales, a uno de los tantos gatos que ha inmortalizado.

Por último, otra de las imágenes que ha recibido una mención especial, realizada en Warrington, Reino Unido. La estrella de la fotografía es un perro que salta corriendo a la pista de tenis local, cubierta completamente por la nieve y es sorprendido por una pelota de tenis que la cruza en cuestión de segundos.