Las trompas de Falopio tienen una misión fundamental en la reproducción. Así, son dos estructuras en forma de tubo que conectan los ovarios con el útero. Cuando el óvulo se desprende del ovario, viaja a través de las trompas y es en ese recorrido cuando puede ser fecundado por un espermatozoide si el embarazo es natural. Una vez unidos los dos gametos femenino y masculino llegarán hasta el útero donde se implantará para que haya un embarazo.
Para ti que te gusta
Este contenido es exclusivo para la comunidad de lectores de ¡HOLA!
Para disfrutar de 8 contenidos gratis cada mes debes navegar registrado.
Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.
Cuando la mujer no quiere tener más hijos puede recurrir a métodos de barrera o de tipo hormonal, como el DIU, el preservativo o la píldora, o bien buscar un método de esterilización definitivo. Hace un tiempo en esta segunda opción se solía recurrir a la ligadura de trompas, pero desde hace unos años, la tendencia es otra y se recomienda más la extirpación de las trompas. Esta cirugía puede llevarse a cabo durante la cesárea o más adelante si el parto es vaginal.
La Dra. Ana Rosa Lucena Torres, ginecóloga y obstetra experta en diagnóstico preantal en el Hospital Costal del Sol de Marbella y en la Clínica Lacibis, nos cuenta todo lo que hay que saber sobre este tema.
¿Por qué quitar las trompas?
Cuando la mujer ya ha visto cumplidos todos sus deseos de maternidad y se plantea un método no reservible de esterilización, la opción es la extirpación de las trompas, lo que se conoce como salpingectomía bilateral. “Es una tendencia que estamos llevando a cabo en los últimos años los ginecólogos porque, según parece, el carcinoma papilar seroso de alto grado de ovarios se puede iniciar en la trompa. Quitando las trompas se reduce este riesgo en el futuro”, explica la experta.
Aunque aún está por determinar el porcentaje de reducción real de este tipo de cáncer gracias a la extirpación de las trompas cuando la mujer ya no quiere tener más hijos, “es una intervención sencilla con beneficios potenciales muy altos”, destaca la divulgadora (@ginecologa.anarosa, en Instagram).
Dos intervenciones en el mismo momento
La salpingectomía bilateral se puede llevar a cabo durante la cesárea. “Si se va a realizar una cesárea programada por cualquier motivo y la mujer tiene sus deseos genésicos cumplidos (es decir, que no quiere más hijos), se lo planteamos cuando estamos programándola y ella lo decide conjuntamente con su pareja”, destaca la obstetra.
Según explica, se trata de una cirugía sencilla que se realiza con termosellado y sección, “sin aumento del sangrado o tasa de infecciones, aunque sí conlleva un aumento del tiempo operatorio, pero son unos 10 minutos más, de media”, detalla.
En esta cirugía únicamente se exirpan las trompas, no se tocan otros órganos, aunque sí se suelen revisar ambos ovarios, como en todas las cesáreas, para comprobar que son normales.
Si la extirpación de trompas se realiza en este momento, no hay que seguir ningún cuidado extra, salvo los postquirúrgicos en general, según indica la Dra. Ana Rosa Lucena. Estos son, especialmente en las dos primeras semanas, pero mejor durante un mes:
- Evitar esfuerzos.
- No coger peso.
- Descansar.
- No realizar ejercicio intenso.
- No realizar caminatas ni movimientos bruscos.
¿Y si el parto ha sido vaginal?
Cuando la mujer ha dado a luz mediante un parto vaginal, pero quiere llevar a cabo una extirpación de las trompas, hay que esperar un tiempo a que esté recuperada para llevar a cabo esta intervención.
Lo ideal es que pasen, al menos, tres meses. “Suele postergarse tanto por la gran carga de trabajo que sopone un hijo como porque la mujer debe tener su tiempo de recuperación. Una intervención quirúrgica que no es urgente y que, además, requiere reposo cuidando a un bebé se suele dejar para más adelante”, comenta.
En este caso, la forma de llevar a cabo la intervención sería mediante laparoscopia cuando la mujer ya se sienta preparada.
¿Es posible el embarazo tras extirpar las trompas?
Cuando la mujer ya no desea tener más descendencia, la extirpación de las trompas de Falopio es “la técnica más efectiva para prevenir los embarazos con un 99% de efectividad”, comenta la Dra. Lucena (www.ginecologaanarosa.com).
Como el óvulo y el espermatozoide se unen en la trompa, si esta no está, el embrión no se puede formar. No obstante, con técnicas de reproducción asistida sí se podría conseguir un nuevo embarazo. También, en casos muy excepcionales, cuando los gametos masculino y femenino se unen en algún otro espacio, entre el ovario y el útero.
“La mayoría de las pacientes a las que se les explica el procedimiento, el extraer las trompas en lugar de cortarlas para reducir un potencial cáncer, con solo 10 minutos más de intervención, sin aumento de sangrado, de infección con igual recuperación, suelen aceptar realizarla sin dudarlo”, concluye la especialista.