Acné y granitos en la cara del bebé, ¿debería asustarme?

La piel del recién nacido es muy sensible, pero, además, está en constante cambio durante sus primeros meses de vida. Es frecuente que los papás se preocupen cuando ven que a su bebé le aparecen granitos de color rojo, e incluso, de color blanco (llamados pústulas), en la cara, concretamente en, mejillas, nariz y frente. Esto se conoce como acné neonatal, que según explica la Asociación Española de Pediatría (AEP): “Son lesiones cutáneas benignas que aparecen frecuentemente en los recién nacidos”.

Aproximadamente se dan en un 20% de los pequeños, pero, cuál es la causa de su aparición: “Pese a haber muchos mitos en torno al tema (como, por ejemplo, la típica frase de: ‘Será de tu leche’), se cree que la causa es hormonal. En concreto, por el paso de andrógenos a través de la placenta. Esto provoca que las glándulas sebáceas del recién nacido se estimulen y produzcan más sebo”, nos cuenta la Dra. Laura Álvarez, pediatra, conocida en redes sociales por su labor divulgativa en su cuenta de Instagram, @lapediatralaura.

Cómo tratar el acné neonatal: ¡es importante no manipular los granitos!

Es normal que durante las primeras semanas de vida del bebé aparezcan en su piel diversas manchitas o granitos, pero nada de qué preocuparse ya que todo ello no suele tener mayor trascendencia. Concretamente el acné neonatal, es típico que aparezca sobre las dos primeras semanas de vida y, una curiosidad que nos cuenta la pediatra es que “es más frecuente en los varones, con una relación de sexo masculino-femenino de 4 de cada 5”.

Son granitos que no molestan al bebé y no suelen tener otros síntomas a parte de estas lesiones cutáneas. Además, según nos indica la experta: “No suele ser necesario realizar ningún tratamiento puesto que la evolución natural es que desaparezca sin hacer nada”. Y advierte: “Tocar los granitos con las manos y poner cremas por nuestra propia cuenta puede empeorar la situación, por lo que se desaconseja. Con una higiene adecuada en el momento del baño, con agua y jabón syndet para bebés suele ser suficiente. En la mayoría de casos suele ser leve, por lo que podemos aprovechar las revisiones de salud que son frecuentes en los dos primeros meses de vida para comentarlo con el pediatra”.

Tal y como nos cuenta la Dra. Álvarez, el acné neonatal se suele resolver solo, y no deja ningún tipo de secuela, pero los expertos siempre aconsejan una buena higiene y cuidado de la piel, aunque, “en determinados casos se puede indicar un tratamiento con una crema suave con corticoide”, dicen desde la AEP.

La pediatra añade, además, que “debido a su causa es algo que no se puede prevenir”. E insiste: “Se trata de una entidad benigna, con resolución espontánea por lo que no suele acarrear problemas importantes ni cicatrices. Si lo tocamos con las manos sucias podemos generar infecciones (aparecerían costras amarillentas), por ello, se desaconseja hacerlo”.

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Acné neonatal vs Acné infantil vs Acné juvenil

Seguramente te estés preguntando si el acné neonatal puede ser la antesala del conocido acné juvenil, o aquel que aparece en otras etapas de la vida, y la respuesta según la AEP es rotundamente negativa. “No existe relación alguna entre el acné neonatal y el que aparece más tarde en la vida. Aunque el aspecto es similar, hay algunas diferencias: el mecanismo de producción es diferente, la expresión clínica también. En el acné neonatal no hay comedones (espinillas) ni quistes (granos grandes dolorosos con pus) y su evolución es totalmente benigna”, aseguran. “La historia familiar de acné no se relaciona con el acné neonatal”, añaden.

Y, quizás no lo hayas escuchado tanto pero el acné infantil también existe: “Es menos común y se inicia más tarde”, afirman desde la AEP. Una mayor producción de las glándulas sebáceas, los cambios provocados por el crecimiento, un desarrollo precoz, lo cambios de temperatura… son algunas de las causas de su aparición. Suele comenzar hacia los 8 años de edad y, al igual que con el acné neonatal, se recomienda una buena higiene de la piel con agua y jabón y, sobre todo, no manipularlos.

Y, por último, preguntamos a la experta, ¿cuándo desaparece el acné neonatal? “El escenario habitual es que el acné neonatal desaparezca antes de los 3 meses  sin hacer nada. En el caso de que persistiera, habría que consultar con el pediatra y pensar en otras causas”, indica la Dra. Álvarez.