Por qué deberías practicar el ‘método hipopresivos’ en tu recuperación posparto

El ‘método hipopresivos’ está indicado en el posparto gracias a todos los beneficios que aporta en la recuperación de la faja abdominal y el suelo pélvico. Aquí podrás encontrar todos los motivos por los que deberías plantearte practicarlo.

16 de marzo de 2022 - 12:20 CET16 mar 2022 - 12:20 CET

Seguro que lo has escuchado en muchas ocasiones y el término se te hace muy familiar. El ‘método hipopresivos’ ha ido ganando cada vez más adeptas gracias a todos los beneficios que aporta a la mujer, así como su importancia cuando se realiza durante la etapa del posparto. Su origen surge históricamente en la práctica del yoga, con un ejercicio llamado uddiyana bhandha, cuyo objetivo es el de aumentar la activación del músculo transversal del abdomen y disminuir la presión del colón.

Mucho más tarde, entre los años 70 y 80, surgió este método gracias al médico francés, Marcel Caufriez, como una forma de recuperación posparto del suelo pélvico que después, a partir de 2006, fue desarrollado como una práctica fitness.

El ‘método hipopresivos’ aúna una serie de técnicas posturales y respiratorias centradas en la musculatura del abdomen y en el suelo pélvico, esto es lo que hace tan interesante que las mujeres realicen esta práctica después del parto. Si profundizamos un poco más, Natalia Moya Mangas (@lady_hipopresivos), instructora de hipopresivos formada en la escuela Low Pressure Fitness (LPF), nos cuenta exactamente en qué consiste: “La etimología de hipopresivos es: ‘Hypo’, que viene del griego y significa baja, poco, menor… y ‘Pressive’, que viene del francés y significa presión. Es una forma de entrenamiento a través de posturas y ejercicios realizados en apnea para fortalecer la zona abdominal. Es muy versátil porque puedes aprender a hacerlos desde casa, para que puedas experimentar todos sus beneficios, y por supuesto, también se pueden realizar sesiones presenciales y online”.

Aunque hay que destacar que este método no solo está dirigido a mujeres en la etapa de posparto, sino que, en general, está indicado para aquellas personas que sufren diferentes problemas de espalda.

Cómo es la técnica de los hipopresivos

Una sesión de ejercicios hipopresivos está compuesta por la realización de posturas muy concretas en apnea de respiración, lo que genera una contracción refleja en los músculos abdominales y suelo pélvico, además de activar el metabolismo quemando calorías. “Es un ejercicio que al realizarlo provoca disminución de la presión en tu vientre y en apnea, aprovechamos a fortalecer la zona abdominal. En cada sesión realizamos distintos ejercicios y coreografías, en diferentes posiciones, para que la clase se haga práctica y divertida. Realizando dos sesiones de hipopresivos a la semana en poco más de un mes podemos comprobar resultados a nivel físico, mental y emocional. Y es que, los hipopresivos van más allá de un ejercicio físico. Se trata de una filosofía que empodera a la mujer, la hace conocerse mejor, conectar con tu cuerpo, con su feminidad, con su libertad, elevar su autoestima, dedicarse tiempo para ella”, explica la instructora experta en LPF.

El paso a paso de un hipopresivo

Para realizar bien un hipopresivo: “Tienes que aprender con un instructor, ya que te tiene que explicar como llegar a la apnea y cómo elevar y contraer tu suelo pélvico, tus rectos abdominales y tu diafragma”, recomienda la especialista, y nos pone un ejemplo de cómo sería el paso a paso de uno de estos ejercicios:

Inspiras-espiras 3 veces
En la tercera espiración soltamos todo el aire, en ese momento de apnea realizamos el hipopresivo.
Es entonces cuando se contrae el suelo pélvico y toda la cadena de músculos abdominales y diafragmáticos.

Y, ¿está indicado también para aquellas mujeres que han tenido un parto por cesárea? “Después de una cesárea tienes que contactar con un instructor y él te indicara cuándo y cómo realizarlos. Normalmente, después de la cuarentena se pueden realizar, pero dependiendo del tipo de cesáreas en alguna ocasión hay que esperar unas semanas más”, indica. Igualmente, estos ejercicios no pueden ser realizados por todo el mundo ya que están contraindicados en casos de hipertensión arterial, hernia de hiato o problemas intestinales, y por supuesto, durante el embarazo .

Qué beneficios tienen para el posparto

“En el posparto, a veces, no somos felices, te sientes agotada, cansada, invisible, vacía, fea y con otro cuerpo distinto al que tenías. Con los hipopresivos vas a tomar consciencia de tu abdomen, de tu útero, ese que albergado nueve meses a tu bebé y ahora ha cambiado. Vamos a trabajarlo, vamos a ayudarle a que se recupere de esa tensión y dolor que ha sufrido. Voy a enseñarte a cuidar y reparar la musculatura. Con las apneas vas a sentirlo y lo vas a mimar, ya que aquí no habrá estrés muscular debido a que es una técnica de elongación y distensión sin presión muscular”, detalla la instructora.

Y una de las mejores formas de cuidarse es realizando estos ejercicios especialmente indicados para recuperación del abdomen y ejercitación del suelo pélvico tras el parto. Pero los hipopresivos son ejercicios tan completos que, además aportan muchos otros beneficios para para la salud (y no solo para mujeres en el posparto):

Disminuyen el dolor de espalda
Reducen la cintura
Previenen las hernias discales y abdominales
Mejoran la función sexual
Ayudan al tratamiento y prevención del prolapso de órganos pélvicos
Aumentan la capacidad respiratoria
Mejoran de la postura y el equilibrio
Mejoran del rendimiento deportivo

Igual de importante es realizar estos ejercicios correctamente y bajo las directrices de un experto, como fundamental es crear un buen ambiente, calmado y tranquilo donde poder sentir el momento presente y conectarse con uno mismo. “Con las respiraciones te vas a sentir viva y aliviada, vas a sentir como el aire que tomas te relaja y hace sentir tu cuerpo. Son sesiones para cuidarnos, conocernos por dentro, mimar nuestro interior. Aquí no hay prisas ni agobios y recuerda que las puedes hacer en casa con tu bebé al lado”, concluye la instructora.

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