dolor espalda ni a© AdobeStock

Salud

Estas son las desviaciones de columna más frecuentes en niños

La escoliosis, la cifosis y la lordosis son las tres desviaciones de espalda más comunes en niños. Un diagnótico precoz y un tratamiento eficaz es fundamental para que el problema no se agrave. Descubre cómo son estas tres patologías.


14 de marzo de 2022 - 17:42 CET

Los problemas de columna vertebral son muy frecuentes entre los niños, pero en muchas ocasiones pasan desapercibidos. La falta de síntomas hace más difícil un diagnóstico precoz y cuando el problema ya es más evidente debido a una deformidad visible, normalmente, resulta ser indicativo de una evolución avanzada.

Para ti que te gusta

Este contenido es exclusivo para la comunidad de lectores de ¡HOLA!

Para disfrutar de 8 contenidos gratis cada mes debes navegar registrado.

Este contenido es solo para suscriptores.

Suscríbete ahora para seguir leyendo.

TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE CADA MES POR ESTAR REGISTRADO.

Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.

Una de las formas de detectar estas posibles patologías son las revisiones periódicas del ‘niño sano’, para poder realizar un diagnóstico y tratamiento lo antes posible, y que no se agrave la situación. Para conocer cuáles son los principales  problemas de espalda  en los menores hablamos con Xisco Sagristá, Fisioterapeuta y Osteópata (www.osteopatiapalma.com).

¿Cuáles son las desviaciones de columna más comunes en los niños?

“Las desviaciones más frecuentes en los niños son la escoliosis, la cifosis y lordosis exagerada. La escoliosis es una deformidad de la columna en la cual la columna se desvía hacia los lados. Es una deformidad en forma de ‘S’. Se produce una inclinación de la columna hacia un lado y la consecuente rotación de la columna hacia el lado contrario. La cifosis, es la deformidad que se da por un exceso de flexión de la zona dorsal. Deformidad que provoca una giba (o “joroba”). Y, por último, la lordosis, es un exceso de extensión de la columna y se da en la columna cervical y lumbar”, nos explica el experto.

Las deformidades de la columna tienen diversos orígenes. Pueden ser congénitas, es decir, que se produzcan desde el nacimiento, provocadas por alguna infección o adquiridas, ya sea por haber ido adoptando malas posturas. Por una pierna más larga que la otra, por un desequilibrio a nivel muscular, por falta de activación, debilidad muscular, por un mal apoyo podal… entre otras causas.

La escoliosis

En el caso de la escoliosis, el experto nos comenta que: “Es frecuente que se deba a que el paciente tiene una pierna más larga que la otra o a un desequilibrio muscular entre un lado y otro del cuerpo, creando una deformidad en forma de ‘S’. A nivel de los cuerpos vertebrales se produce una inclinación hacia un lado y rotación del lado contrario”. La escoliosis infantil ocurre en menores de 3 años, normalmente por malformaciones de vértebras, otros síndromes o causas desconocidas.Mientras que la escoliosis juvenil, sucede en niños de 3 a 10 años, pero es menos común su aparición.

La cifosis

En el caso de la cifosis, Xisco nos revela que: “Cabe decir que es más frecuente entre las niñas que en los niños. Habitualmente, suele deberse a que los niños adoptan mala postura, provocando un desequilibrio entre la musculatura anterior del tronco y la posterior. Mencionaba que es frecuente que afecte más a las niñasdebido al crecimiento del pecho y, por vergüenza, tiendan a enrollar los hombros hacia dentro creando una joroba a nivel dorsal. También es frecuente que se de la cifosis en niños introvertidos. Tienden a encogerse, a esconderse en sí mismos”.

La lordosis

“Y la lordosis, en los niños, puede deberse a una compensación debido a una exagerada cifosis dorsal o a una debilidad de la pared anterior abdominal”, nos explica el fisioterapeuta.

niño jugando al fútbol© AdobeStock

Procurar evitar una vida sedentaria

Los videojuegos, la televisión, la tablet… hoy en día los niños viven en un mundo digital en el que se les da todo hecho y como se suele decir, coloquialmente, solo tienen que mover un dedo para conseguir aquello que quieren. Las horas que pasan sentados realizando estas actividades son un gran factor causal de los problemas de espalda y de columna en menores.

Según nos cuenta el experto: “La mejor manera de prevenir dichas alteraciones de la columna vertebral  es que los niños se muevan.  Tienen una vida muy sedentaria y se pasan muchas horas ‘enganchados’ a las nuevas tecnologías. Están muchas horas sentados, ya sea en el colegio o en casa. Los niños deben moverse. Estamos hechos para movernos. Si una musculatura no se utiliza se atrofia, se encoge y se debilita”, asegura.

Cómo se corrigen estas desviaciones

Para corregir cualquiera de las desviaciones de la columna vertebral en niños de las que hemos visto, es fundamental en un primer estadio reconocerlas y en un segundo, hacer un buen diagnóstico de la causa o causas que están provocando dicha alteración en la columna. “A nivel de fisioterapia y osteopatía, se realizará una valoración de todo el cuerpo. No podemos centrarnos en tratar sólo la parte afectada porque en muchos casos, dicha falta de activación muscular, debilidad, cambio de estructura… es consecuencia de otras partes del cuerpo”, nos explica el experto y nos pone como ejemplo: “Si pisamos con un pie hacia dentro, habitualmente, tendremos valgo de rodilla (piernas en forma de X) y una rotación interna de cadera. Dicha alteración nos repercutirá en la columna, aumentando la lordosis lumbar y cervical y tendremos una cifosis dorsal”.

Y, entonces, nos hacemos la siguiente pregunta: ¿Debemos hacer un tratamiento íntegro o no? “En este caso, a lo mejor bastará con sólo reajustar la pelvis y cadera, pie, dar algunos ejercicios de activación de la musculatura debilitada y estirar la musculatura que esté más acortada. Cada paciente es diferente. Único. No se puede protocolizar un tratamiento porque cada paciente necesita un tratamiento específico”, advierte el experto.

La importancia de una buena higiene postural

Llevar una vida activa, realizar deporte, una dieta saludable… son factores claves para el correcto desarrollo infantil, así como tener muy presente una buena higiene postural. Debido al elevado número de horas que los niños pasan sentados en clase es imprescindible sentarse bien. Las dos piernas apoyadas en el suelo, espalda erguida apoyada firmemente en el respaldo, mantener el asiento cerca del escritorio y cuando terminen las clases, ¡moverse! 

Tal y como recomienda el experto: “Esta es la típica frase que va pasando de generación en generación, pero que en la última es todavía más importante porque los niños de ahora son más sedentarios. ¡Debemos movernos!”, insiste el experto.

© ¡HOLA! Prohibida la reproducción total o parcial de este reportaje y sus fotografías, aun citando su procedencia.