Libros y juegos para conocer el mundo animal desde casa

Perro apestoso se define como un antihéroe inolvidable. Y ya colecciona diez libros para demostrarlo, además de una serie de televisión en Canal Panda con el que seguir disfrutando de este personaje que vive en un cubo de basura y huele a sardinas. A pesar de que todos quieren mantenerse alejados de él, sobre todo, por su aspecto, él tiene un corazón enorme, es puro optimismo y alegría. Junto a su gran amigo, Gatochato, viven innumerables aventuras que nos invitan a reflexionar sobre cuestiones como los animales sin hogar y la importancia de la adopción, la solidaridad y el cuidado de todos ellos.

En Francia ha superado ya los dos millones de ejemplares vendidos (es todo un fenómeno) y sus historias se han traducido ya a 20 idiomas diferentes. En la última entrega, Perro apestoso tiene que vigilar un montón de dinero, dando a conocer la avaricia y la codicia, pero ¿cómo reaccionarán los dos amigos ante ello?

Este juego, a partir de 3 años, es perfecto para aprender, desde el respeto y de una manera natural, todo lo referente al mundo de los animales. Es muy sencillo e intuitivo. Con 80 fichas de animales (todas ellas ilustradas), 6 láminas de los diferentes habitats -el océano, la sabana o la selva tropical- y los 7 continentes, los más pequeños podrán ir observando el mundo que nos rodea. Sí, todo el mundo.

Podrán reconocer los diferentes animales, aprenderán sus características y cómo clasificarlos por familias, ubicándolos en sus lugares de origen. Es como asistir a una clase de Geografía y Ciencias Naturales a la vez, pero completamente adaptada a los más pequeños de la casa que, además, suelen prestar gran interés.

Dentro de la colección de libros Visita nuestro museo creada por Impedimenta, en torno a temas de interés científico y social, se encuentra Animalium. Aunque su público fundamental son los niños, los adultos podemos disfrutar tanto o más que ellos entre sus páginas. En este caso, nos acercamos al reino animal a través de una asombrosa colección de casi 200 animales que se muestran como si entrásemos en las salas de un auténtico museo. Es como llegar a las enormes salas Natural History Museum de Londres, ¡pero sin salir de casa!

Entrarás en el laboratorio de disección, verás la evolución de las especies y la gran variedad de seres vivos que habitan en nuestro planeta. Las ilustraciones son realmente fantásticas. Serás, junto a tu hijo, un auténtico explorador.

Aprender el vocabulario con animales de todo el mundo puede ser muy divertido. Y eso es lo que harás acompañando a tu hijo con este juego en el que se promueve, sobre todo, el lenguaje de los más pequeños. Son 50 tarjetas ilustradas, con palabras sencillas e imágenes de animales que se dividen por categorías, para que también aprendan a ubicarlos en el mundo.

Está especialmente recomendado para niños de 1 a 3 años, es decir, para empezar a hablar con ellos. Además, si eres de los que quiere que empiecen el contacto con otra lengua, es perfecto, pues encontrarás palabras en cinco idiomas: español, inglés, alemán, italiano y francés. El juego se ha creado en colaboración con educadores Montessori.

Gerald Durrell es pura pasión por el reino animal. Consagró toda su vida a la investigación y cuidado de la naturaleza, además de a la protección de especies animales en peligro de extinción. Toda su experiencia está volcada en libros como éste que, además, está dirigido a los niños. En él relata las experiencias vividas durante su época como naturalista en el zoológico campestre de Whipsnade (Reino Unido).

Días divertidos, contados con humor, en los que los protagonistas eran leones, tigres, cebras, ñus y otros animales diferentes que te ayuda a conocer de cerca. Es una lectura amena que conciencia mucho sobre el reino animal y perfecta para los que ya leen por sí mismos y se enfrascan en la lectura sin problema.

Un juego de mesa para los más pequeños o para toda la familia. Se trata de una de las clásicas torres de fichas en las que no se puede caer ni una, pero caracterizada con animales. Hay que utilizar las cartas para adivinar qué animal te toca sacar de la torre e intentar no derribarla.

De esta forma, se fomentan las capacidades cognitivas de los más pequeños, como el reconocimiento del color, la coordinación ojo-mano (tan importante para trabajar la grafomotricidad), y las habilidades para resolver problemas. Además, es un juego que se comparte, recomendado para niños entre 4 y 8 años.

Otro juego de mesa para niños a partir de 6 años con el que nos vamos de safari en familia. Tiene dos niveles de dificultad y es un juego clásico de cartas, pero con el mundo animal como protagonista. El objetivo es ser el primero en encontrar el animal que falta en cada una de las cartas, decirlo en voz alta y tirar rápidamente otra carta encima, buscando quedarte sin ninguna en tu mazo particular. Lo bueno es que, antes de ponerte a jugar con los pequeños, ¡tendrás que aprender cada uno de los animales! Ten cuidado, te pedirán que el próximo verano los lleves a África.

Una auténtica enciclopedia pensada para niños a partir de 5 o 6 años que busca responder todas sus preguntas. Y muchos padres nos darán la razón, no dejan de preguntar. No temas, esta colección de libros (Superpreguntones) ya tiene 6 títulos para hacer frente a ese continuo aluvión de preguntas y, uno de ellos, se centra en el reino animal.

¿Qué animal es el más dormilón? ¿Para qué utilizan su larga trompa los elefantes? O ¿por qué hay que tener cuidado con las medudas, por qué pican? Consta de muchas fichas individuales para saciar la curiosidad de los más pequeños y que se les acaben todas las dudas.

Por último, otro juego de mesa sencillo en el que el objetivo es emparejar. Para ello, tienes por un lado a los animales y, por otro, sus huellas. Tus hijos deben demostrar su habilidad a la hora de reconocerlos porque, aunque nunca se hayan topado con un elefante, ¿a qué sí que saben qué surco deja su pie en el suelo? Les encantará y se sentirán auténticos exploradores. Además, está ilustrado de una manera muy dulce, como si fuesen acuarelas y enfocada a los más pequeños de la casa. En definitiva, un juego clásico de memoria editado en castellano, catalán e inglés, para acercarnos al oso panda, pero también al coyote o el pavo real.