Solo queda un día para el 'sí, quiero' más esperado del año en nuestro país, el de Tamara Falcó e Iñigo Onieva, una boda que se celebrará mañana en el palacio de El Rincón y que podrás vivir como un invitado más gracias a ¡HOLA!, que adelantará su edición poniendo a la venta el próximo lunes un número muy especial. En estas horas previas se ultiman detalles y algunos invitados llegan a la capital para disfrutar del gran día. Hace solo unas horas aterrizaba en Madrid Wes Gordon, director creativo de Carolina Herrera y encargado de crear los dos vestidos que llevará la marquesa de . Y es que, tal como ha confirmado el diseñador en el aeropuerto, la novia llevará dos looks y el segundo de ellos no será de color blanco.
"El vestido de boda es blanco, el vestido para después de la boda no es de ese color", aseguraba Gordon en un vídeo compartido por ¡HOLA! cuando el periodista le preguntaba si podía dar una pista del diseño. Aunque el creativo no ha querido revelar más infomación —además de explicar que el look principal está a medio camino entre lo moderno y lo tradicional—, lo cierto es que este detalle nos lleva a imaginar un vestido que bien podría ser blanco y negro, una combinación siempre elegante que es seña de identidad de la firma de moda, o de un tono pastel, una elección que daría un aire romántico a la prenda.
Por qué un vestido blanco
Históricamente, las novias de occidente se han vestido de blanco desde 1840, cuando la Reina Victoria de Reino Unido rompió con lo establecido en su boda con el Príncipe Alberto. Hasta entonces esta tonalidad estaba reservada para las damas que se presentaban en la corte, mientras que en los enlaces imperaban diseños con otra gama cromática, especialmente la de los rojos. Pero han sido muchas las celebridades que han roto con este protocolo: Marilyn Monroe en tonos marrones, Audrey Hepburn en rosa o Elizabeth Taylor en verde botella, por solo citar algunas.
TEST ¡HOLA!: ¿Cuál sería tu vestido de novia si hubieras elegido la firma de Tamara Falcó?
El color
Aunque la mayoría de las novias sigue prefiriendo el blanco para su gran día, hay quienes eligen diseños en otros tonos para su segundo look. En esos casos, lo normal suele ser recurrir a vestidos en colores pastel, casi siempre en la gama de los rosas.
El color
Otra alternativa interesante para un segundo vestido de novia puede ser la combinación del blanco y el negro. Un dúo ganador que conquista a las mujeres más estilosas cuando se trata de elegir looks de fiesta (y de diario) y que, por qué no, podría convertirse en una buena alternativa nupcial.
El color
Si ni la gama de los rosados ni la combinación de blanco y negro parecen una buena alternativa, otra opción es recurrir a colores más alegres, como el amarillo. Y aunque todo está permitido porque el protocolo lo marca siempre la novia, es mejor alejarse de las estridencias y apostar por tonalidades que no sean demasiado brillantes.
Un escote especial
Una de las ventajas de los segundos looks nupciales es que las novias pueden recurrir a diseños que nunca llevarían durante la ceremonia (sobre todo si se trata de una boda religiosa). Los escotes especiales suelen ser los grandes protagonistas de estos diseños, por lo que no nos sorprendería ver a la marquesa de Griñón presumir de hombros.
Un escote especial
El palabra de honor es una de las opciones preferidas de las novias, pero hay más alternativas para presumir de esta zona del cuerpo. Un ejemplo claro lo encontramos entre las propuestas de la colección Prefall 2023 de Carolina Herrera, en la que Wes Gordon imaginó un maravilloso escote corazón que, además, afina ópticamente la cintura.
Un escote especial
Otra alternativa a los acabados off the shoulder es recurrir a escotes asimétricos que, como el modelo de la imagen, dejan a la vista solo uno de los hombros, creando un juego de equilibrios muy especial. Si además se juega con elementos como lazos o volantes el resultado puede ser de lo más favorecedor.
Un largo diferente
Las novias recurren, casi siempre, a vestidos largos. Diseños que se extienden hasta el suelo y, en muchas ocasiones, tienen cola. Este elemento suele desaparecer en el segundo look nupcial, lo mismo que sucede con algunos centímetros de la falda, que a veces se recorta para mayor comodidad de la novia.
Un largo diferente
Aseguran los expertos que hay un largo con el que siempre se acierta, favorece a todas las mujeres y es muy cómodo: el midi. Un acabado que suele elegir la marquesa de Griñón para sus planes y por el que podría decantarse en su segundo vestido.
Un largo diferente
Hay novias que eligen un vestido midi para su segundo look nupcial y otras que, por el contrario, prefieren prendas con las que presumir de piernas. Aunque Tamara Falcó no suele recurrir a diseños demasiado cortos en su día a día y tampoco en ocasiones especiales, es una opción que no se debe descartar del todo.
Un largo diferente
Otra buena alternativa, igual que sucede en el caso de los escotes, es la de recurrir a diseños con asimetrías, que se alarguen en la parte trasera, estilizando la figura, pero se recorten en la delantera, dejando las piernas al descubierto y aportando comodidad a la novia.