Skip to main contentSkip to footer
boda ana 1t© Ana Vigar. Foto: Ana Encabo Photography

La historia de Ana, la novia malagueña del vestido sencillo y la eterna sonrisa

Triunfó en las redes sociales gracias a su vestido minimalista y a la alegría que emana


Actualizado 29 de abril de 2020 - 15:37 CEST

A la hora de elegir el vestido de novia, son muchas las chicas que se sienten algo perdidas o inseguras. No tienen muy claro el tipo de diseño que quieren y, por mucho que buscan inspiración, no terminan de encontrar su prenda soñada. "Buscar su vestido de novia va a ser un proceso muy íntimo, muy especial y tremendamente emocionante, así como un reto, no todos los días se casa una, no es fácil", nos explicaba en una entrevista concedida a HOLA.com la diseñadora Teresa Helbig. Por eso recomendaba no dejarse guiar por los gustos de los demás y atender a lo que la novia prefiere "solo así, pasarán 50 años y la novia se seguirá viendo a ella, igual de real, igual de auténtica, igual de poderosa e igual de libre". Cuando Ana Vigar empezó a buscar su vestido no tenía del todo claro lo que quería. "La verdad que nunca me había imaginado vestida de novia, cuando empecé a mirar opciones no encontraba nada que tuviese claro que me gustase. Mi gran miedo era sentirme disfrazada ese día, creo que fue por lo que me decidí a diseñarlo desde cero", nos explica. ¿La diseñadora en la que confió? Alejandra Svarc.

boda ana vigar© Ana Vigar. Foto: Ana Encabo Photography

VER: Descubre, foto a foto, el romántico 'sí, quiero' de Ana y Edu en Málaga

"Conocí los vestidos de Alejandra por redes sociales y me encantó el estilo que tenía: sencillos, pero con un acabado y unos detalles muy especiales. A partir de ahí, empezamos a diseñar mi vestido y no puedo estar más contenta con el resultado", indica Ana. Si todavía no tienes muy claro quién es la diseñadora, es posible que recuerdes aquella falda pensada para novias que no tardó en hacerse viral. Se trataba de una prenda de cintura alta, de color crudo y forrada por un maravilloso encaje. Aunque quizá uno de los detalles más especiales era la fila de botones que cerraba el diseño en uno de los laterales, aportando verticalidad a la silueta. Alejandra fue la creadora de esta original propuesta que pronto consiguió cientos de likes y alabanzas. Por eso no sorprende que el vestido de Ana haya conquistado a todo aquel que lo ha visto.

boda ana vigar© Ana Vigar. Foto: Ana Encabo Photography

Definir este vestido de novia es hablar de dos cosas: por un lado, de la sencillez que buscaba Ana; por otro, de la magia de los detalles, capaces de hacer únicos y especiales las opciones más minimalistas. La malagueña nos explica que sí tenía clara la forma y el corte del diseño que quería, pero tenía muchas dudas con el escote o las mangas. "Fui a ver a Alejandra por primera vez en mayo, le conté un poco la idea que tenía, acordamos en dos sesiones un diseño y me emplazó a septiembre, para la cita de toma de medidas. En esa cita fue cuando modificamos el diseño de la parte de arriba y Alejandra me hizo prometerle que no iba a volver a cambiar de idea (solo quedaban 4 meses para la boda…). Lo demás lo fuimos decidiendo sobre la marcha… Con mi padre decidimos el acabado del puño de las mangas y con mi madre diseñamos la capita. A ella le hacía mucha ilusión que llevase velo, pero yo no me veía, así que acordamos una solución intermedia para llevar un tul, y que a la vez se siguiese viendo la espalda del vestido".

boda ana vigar© Ana Vigar. Foto: Ana Encabo Photography

Aunque cada vez es más frecuente que las novias elijan un segundo vestido para el baile o que apuesten por una prenda que evolucione a lo largo de la ceremonia, Ana nos explica que ella no se lo planteó en ningún momento. "Estaba encantada con el resultado y comodísima. Lo único desmontable era la capita, que me la quité al llegar al cóctel, y los tacones que me cambié por unas Converse para poder bailar toda la noche". Y es que la comodidad se ha convertido en un requisito indispensable para las novias de una generación que no está dispuesta a renunciar a pasarlo en grande, porque saben que estar guapas y lo cómodo no tienen que estar reñidos. Pero quizá lo que más buscan en su vestido es ser ellas mismas. "Es un día muy especial que vas a recordar toda la vida y tienes que ser, más que nunca, tú misma. El vestido tiene que ser espectacular (todos lo son), pero la protagonista tiene que seguir siendo la novia y su manera de ser. Lo importante es que al volver a ver las fotos de ese día, te veas reflejada como quien eres cualquier otro día (aunque un poco más guapa)", añade Ana.

boda ana vigar© Ana Vigar. Foto: Ana Encabo Photography

Ana es todo sonrisas. Y eso no es algo que diga ella –aunque se define como una persona espontánea y que está el 90% del tiempo riéndose–, sino Ana Encabo, la fotógrafa que se encargó de capturar con su objetivo todo los detalles del gran día. Fotos llenas de luz y de emociones en las que la felicidad de aquel día puede sentirse. Y en las que se ven el resto de detalles del look nupcial de la malagueña, como la bonita corona de tonos burdeos y rojos que diseñó con ayuda de Conchita, de Bambary sombrerería; o los zapatos, también burdeos, que le regalaron sus amigas; o la trenza que dejaba a la vista su espalda; o el ramo que le confió a Luisa, de las Flores de Reding, diciéndole solo las tonalidades que quería que predominaran.

boda ana vigar© Ana Vigar. Foto: Ana Encabo Photography

Una boda de invierno en Málaga

"Nos casamos en Málaga, mi ciudad favorita del mundo y ya casi también la de Edu. Desde pequeña he vivido aquí, hasta que me fui a la universidad y no concebía que fuese en otro sitio. La verdad que creo que ni lo hablamos, lo di por hecho. Además, nos facilitó la decisión de la fecha, ¡no en todos los sitios puedes casarte con buen tiempo un 21 de diciembre!", bromea Ana. Ella y Edu se conocieron en una cena de amigos comunes porque, aunque trabajaban en la misma empresa, al estar en distintos departamentos no habían coincidido. Llevaban juntos cuatro años y poco cuando decidieron comprometerse y empezar todos los preparativos de su gran día.

boda ana vigar© Ana Vigar. Foto: Ana Encabo Photography

Ana nos explica que desde el primer momento supo que no se iba a agobiar con la organización de la boda. Pero las dudas, la poca experiencia y la distancia –ellos no viven en Málaga– hicieron que, finalmente, contara con los servicios de las wedding planner de La boda de Nicoletta. Una boda bastante especial cuyas celebraciones, por la fecha del año, se alargaron más de lo previsto. "Disfrutamos muchísimo juntos, Edu y yo, y con toda nuestra gente, que es lo importante. Fue un día precioso, muy emocionante para todos. Y no solo ese día sino todos los anteriores y los de después. Muchos amigos se vinieron a Málaga desde el jueves, organizamos el viernes un torneo de pádel, tuvimos preboda por la tarde, boda y, al día siguiente, fuimos todos a comer a la playa a disfrutar del día que hacía. Al ser Navidad y la mayoría de la gente estar de vacaciones, muchos de nuestros amigos y familia se quedaron más tiempo y pudimos seguir la fiesta unos días más. El 24 celebramos nochebuena en Madrid y el 25 por la mañana pusimos rumbo a Australia, para pasar el mejor mes de nuestra vida".

boda ana vigar© Ana Vigar. Foto: Ana Encabo Photography

© ¡HOLA! Prohibida la reproducción total o parcial de este reportaje y sus fotografías, aun citando su procedencia.

Tu boda HOLA