Además del lugar de celebración, la elección de los fotógrafos o la tarta con la que endulzar a los invitados, la luna de miel es uno de los puntos de organización de la boda con los que más disfrutan los novios. No solo se trata de elegir un gran destino, sino aquel que se recordará durante el resto de la vida. Para ponértelo más fácil, te revelamos algunos de los mejores destinos a los que viajar según el mes en el que celebres tu enlace.
Enero: Argentina
Situada en el hemisferio sur, cuando en Europa es invierno, en Argentina es verano. Por tanto, si eliges el mes de enero para visitarla disfrutaras de unas temperaturas más agradables que las españolas. Además de disfrutar de su gran cultura gastronómica, si viajáis a este país lo mejor es que dividáis vuestro viaje entre la parte más urbana (en al que entraría una visita a Buenos Aires) y otra en la que perderos en la naturaleza (con visita al glaciar Perito Moreno o las Cataratas de Iguazú incluidas).
Febrero: India
Es uno de los países más grandes del sur de Asia y, probablemente, uno de los que tiene más historia. Desde el norte hasta el sur ofrece un sinfín de opciones para los turistas más intrépidos. ¿Esos imprescindibles que no hay que dejar de ver? Además del Taj Mahal, situado en la ciudad e Agra, Jaipur, conocida como la Ciudad Rosa de la India, una de las más psicodélicas del país; Varanasi, por la que pasa el río Ganges; o Udaipur, conocida como la Venecia del norte.
Marzo: Belice
Quizá es menos conocido que otros países de América Central, pero Belice bien podría convertirse en el destino de vuestra luna de miel. Delimitado por el mar Caribe al este y una densa selva al oeste, esta zona esconde algunas de las ruinas mayas más espectaculares. Además de explorar todos estos rincones, descubrir su exuberante vegetación y animales salvajes, el país esconde la Isla Bonita a la que Madonna le dedicó una canción, Cayo Ambergis, que es posible visitar en barco. Si además os gusta el snorkel habéis encontrado vuestro paraíso.
Abril: Japón
Cada vez es más frecuente que el país asiático forme parte de la lista de destinos de las parejas de recién casados. Esta nación insular del océano Pacífico, con ciudades densamente pobladas y costumbres que difieren bastante de las nuestras, ofrece un amplio abanico de opciones para la luna de miel. Además de una visita obligada a Tokio, donde la tradición y la modernidad se dan la mano, los palacios imperiales, parques nacionales montañosos y miles de santuarios repartidos por todo el territorio merecen más de un alto en el camino. Y aunque cualquier época es buena, merece ir en primavera, cuando los cerezos están en flor.
Mayo: Cuba
Las casas de color pastel de la Habana se han convertido en un reclamo para los turistas que las fotografían sin cesar en sus viajes. Pero este país insular, con playas de arena blanca y fina, tiene mucho más. Trinidad es una de las ciudades más bonitas de la zona de la que merece la pena recorrer su casco histórico y descubrir la playa Ancón. Tampoco os podéis perder Santiago de Cuba, la segunda ciudad más grande del país. Y si buscáis una escapada más rural, Viñales, perdida entre montañas, os sorprenderá.
Junio: Riviera Maya
Si buscáis grandes extensiones de playas de arena blanca, aguas de color turquesa y, básicamente, relax, Riviera Maya está pensada para vosotros. Ubicada en la península de Yucatán, al noreste de México, esta zona es conocida por sus resorts paradisiacos. Además de descansar y disfrutar de la gastronomía de la zona podrás hacer más de una excursión para conocer las ruinas mayas. Y aunque tu lista de actividades puede aumentar si te gusta practicar buceo, visitar un cenote y bañarte en él no debería faltar en ella.
Julio: California
Si algo tiene de especial este estado es que en él es posible encontrar todo tipo de paisajes y opciones, por lo que encontrar un plan que se adapte a vuestros gustos será de lo más sencillo. Si buscáis naturaleza, el parque nacional de Yosemite es una buena opción para hacer senderismo o recorrer sus caminos en coche; el lado más urbano os lo regalarán San Francisco y Los Ángeles, dos ciudades llenas de contraste y anécdotas; pero también hay playas, viñedos... Un viaje lleno de contrastes para los más animados.
Agosto: Islandia
Las bajas temperaturas de este país, rodeado por el mar de Groenlandia, el mar de Noruega y el Atlántico Norte, hacen que los meses de verano sean los mejores para visitarlo. Eso sí, si os decidís no olvidéis llevar antifaz para dormir –piensa que el sol sale a las 4:33h y se pone a las 22:33h–. Si os gustan la música, la naturaleza y los viajes por carretera, Islandia es perfecta para vuestra luna de miel. Además, en los meses de verano podrás incluso acampar en sus idílicos paisajes.
Septiembre: Tanzania
Si habéis visto la película Memorias de África es posible que os sintáis atraídos por esos paisajes de color rojizo que se extienden hasta el infinito, por la llamativa naturaleza del continente y que tengas la esperanza de recrear en vuestra luna de miel la romántica escena en la que Robert Redford le lava el pelo a Meryl Streep. Si quieres que tu viaje se parezca, en cierto modo, a este clásico, podéis viajar a Tanzania. Este país de África Oriental es famoso por sus extensas zonas de fauna salvaje, entre las que destacan las llanuras del parque nacional Serengueti.
Octubre: Nueva York
Poco se puede añadir, que uno no sepa, sobre la ciudad de lo rascacielos, los sueños y las grandes distancias. Si os decantáis por esta ciudad, además de realizar todas esas visitas obligadas para los turistas –en las que se incluyen el Empire State Building, la estatua de la Libertad, Times Square, Central Park, la Quinta Avenida, la Catedral de San Patrick o Rockefeller Center, por no hablar de los museos– podéis buscar opciones menos exploradas. ¿Algunas ideas? Conocer el Museo The Cloisters, un museo medieval que pertenece al MET o viajar en ferry a Staten Island de noche.
Noviembre: Australia
Las más de 21 horas que se tarda en llegar a este país, ubicado en las antípodas, se pueden asumir en muy pocas ocasiones y la luna de miel es una de ellas. Rodeado por los océanos Pacífico e Índico, este país lleno de encanto, tiene mucho que descubrir: desde la Casa de la Ópera de Sídney a la Gran Barrera de Coral. Pero las opciones son tantas que te recomendamos que preparéis una pequeña guía en la que incluyáis las opciones que más encajan con vosotros, ya sean parques naturales como Daintree, Blue Mountains o Uluru-Kata Tjuta o islas con tanto encanto como Tasmania.
Diciembre: Laponia
Si esta región entra en vuestros cálculos seguro que sabéis que esta tierra ha sido tradicionalmente identificada como el hogar de Papá Noel, por lo que visitarla cerca de Navidad puede ser toda una maravilla. Ubicada en el área más septentrional de Finlandia, esta zona es conocida también por sus maravillosas auroras boreales, sus paisajes de cuento y sus magníficos centros de esquí. Un lugar ideal para los amantes de las estaciones más frías del año.