Rosa Clará aconsejaba a las novias que, a la hora de escoger su vestido, huyeran de los excesos. Y, aunque muchos coinciden en eso de que, en el gran día, 'menos es más', todos tienen claro que hay que optar por diseños que, además de respetar el estilo de cada mujer, la favorezcan. Es decir, hay que prestar atención al corte, la silueta y sí, también el escote. Si se elige el modelo adecuado es posible equilibrar la figura, conseguir estilizarla e, incluso, potenciar las curvas. Si tienes poco pecho y quieres un poco más de volumen opta por uno de los escotes de tendencia más arriesgados y favorecedores, el infinito. Ese que se alarga hasta el límite y que cada vez más diseñadores incluyen en sus propuestas.
Infinito, pero elegante
Lograr que un escote tan amplio resulte no solo favorecedor, sino también elegante, no es tan sencillo como parece. Es necesario encontrar el equilibrio perfecto con el resto del diseño. Algo que consiguen los modelos de la colección nupcial Zac Posen x White One. La firma del Grupo Pronovias lo logra al combinarlo con una de las tendencias más buscadas de 2020, las flores 3D. Gracias a este adorno logra que la atención no solo se centre en el escote.
Infinito, pero elegante
Una táctica similar utiliza Suzanne Harward. La firma australiana no recurre a flores en 3D, pero sí a los bordados para añadir algunos detalles al vestido. Además, ayuda a compensar la longitud del escote al marcar la cintura unos centímetros por debajo de su lugar habitual. De ese modo no solo consigue alargar un poco el talle, también potenciar el efecto de este tipo de abertura.
Infinito, pero elegante
Cuando Wes Gordon imaginó la colección nupcial Fall 2020 de Carolina Herrera tuvo claro que quería poner el foco en el escote. Uno de ellos se alarga hasta el infinito sin resultar excesivo. ¿El truco? Incluirlo en un vestido minimalista, totalmente blanco, sin apenas adornos o puntos de distracción. La elegancia en sí misma.
El poder de la sencillez
Si algo tiene de especial el wrap dress es que favorece todo tipo de cuerpos y se ha convertido en el preferido de muchas mujeres. Por eso cada vez más diseñadores aprovechan algunas de sus virtudes. Ana Cherubina, directora creativa de la firma que lleva su nombre, juega con el efecto envolvente de estos vestidos para crear un escote cruzado e infinito. Ideal para novias que quieren los beneficios de este escote sin mostrar demasiado.
El poder de la sencillez
En la colección My Universe de Marta Martí es complicado encontrar diseños con escotes demasiado pronunciados. Aunque los hay. La creativa catalana los combina con mangas afaroladas con las que consigue favorecer especialmente la zona superior del cuerpo femenino. Además, gracias a que sus detalles son suaves y delicados, pese a jugar con varias tendencias en una misma prenda, el resultado el sencillo y elegante.
El poder de la sencillez
A medio camino entre el escote en 'V' y el bustier está la propuesta de Karen Willis Holmes, con la que logra un efecto infinito sin tener que alargar el escote hasta la zona de la cintura. La australiana ha creado una opción que potencia las curvas de las novias sin renunciar a la comodidad. Lo incluye en un vestido con falda de tul que aporta ligereza y movimiento al resultado final.
Los más atrevidos
Dentro de los escotes infinitos existen opciones más o menos arriesgadas, aptas para todo tipo de mujeres. Unas de las más sensuales son las de la colección nupcial de Berta Bridal. La firma apuesta por incluirlo en naked dress, vestidos que insinúan la silueta femenina y la desnudez del cuerpo. Eso sí, saben cómo lograr el equilibrio para que la mezcla no resulte excesiva.
Los más atrevidos
En esa misma línea se encuentra Steven Khalil. La firma estadounidense propone alargar el escote hasta la zona de la cintura. Un truco con el que se equilibra visualmente la parte delantera. Para mayor comodidad de las novias añaden un pequeño detalle de malla transparente con el que lograr que siente mejor y evitar que se desboque.
Los más atrevidos
One Day Bridal, que casi siempre cuenta con vestidos llamativos entre sus propuestas, decide unir este escote a un vestido salpicado de brillos. De este modo la firma imagina un modelo que es perfecto como segundo look de novia o que podría funcionar fenomenal en esas bodas que, ante todo, son una fiesta.
Los más atrevidos
Pero es la diseñadora María Salas una de las más atrevidas a la hora de enfrentarse con este escote que, realmente, lleva hasta el extremo. Eso sí, logra compensarlo al incluir en un vestido de líneas algo más clásicas y corte princesa. Una elección que lo convierte en un diseño apto también para novias que no se sienten cómodas insinuando demasiado.