Hay novias que decoran su peinado con tocados, diseños entre los que es fácil encontrar opciones para todas. Pero lo tradicional es llevar velo. Este elemento, símbolo de pureza, ha estado presente en los enlaces desde la antigua Roma, donde se utilizaba para protegerse de los malos espíritus. Aunque muchas novias han decidido prescindir de él, lo cierto es que los diseñadores proponen recuperarlo en los próximos meses. Eso sí, con diseños y formas de llevarlo renovadas.
Los velos de color se han popularizado en los últimos años, pero no en cualquier tono. Los modistos apuestan por la gama de los pasteles ya sea en rosa, salmón, verde e incluso azul. Aunque la mayoría son largos, firmas como Victoire Vermeulen Mariée proponen llevarlos cortos y con volumen.