Cuando un vestido de novia se convierte en el mejor look de invitada, y viceversa

Gracias a pasarelas como Barcelona Bridal Week, España se ha convertido en un referente en la moda nupcial que descubre nuevos talentos temporada tras temporada. Uno de los nombres más sonados de los últimos meses ha sido Sophie et voilà!, una firma de nombre francés y origen nacional que se ha posicionado a la vanguardia de los vestidos de novia. Sus creaciones se alejan tanto de los cánones clásicos que tan solo les separa una delgada línea de la moda a pie de calle. Tanto es así que influencers como María Fernández-Rubíes o modelos como Helen Svedin han recurrido a su colección bridal para asistir a distintos eventos.

Instagram: @mariafrubies

Uno de los iconos más llamativos de la casa es el modelo Coralinne, un diseño tan sencillo como moderno que presume de una silueta donde las mangas globo se hacen con todo el protagonismo. Tiene el cuello redondo y una abertura en forma de 'v' en el escote. La pasarela barcelona dio las primeras pistas sobre la esencia de este vestido, combinándolo de forma inusual para una novia y haciendo de este diseño un look apto para cualquier street-style.

Lo mismo ocurrió en el caso de Helen Svedin. La modelo sueca encontró en esta colección el look perfecto para pisar la alfombra roja del Salón de Alta Relojería de Ginebra. De esencia más festiva (o más nupcial, según se mire) que el que llevó María Fernández-Rubíes, este diseño también se inspira en la arquitectura y está confeccionado para aquellas mujeres que buscan algo diferente, bien sea en el terreno bridal o en cualquier evento del día a día.

Se trata del modelo Capucine, de silueta simple y estética minimalista. Está coronado por una lazada que nace de un escote palabra de honor, fusionando en un mismo concepto las curvas y las líneas rectas. Este diseño no necesita mucho más para resultar perfecto si se combina, de nuevo, con accesorios en negro.