Con la llegada del verano -que ya está a la vuelta de la esquina-, llegarán también algunas de las bodas más espectaculares y originales de la temporada. Novios e invitados esperan ansiosos disfrutar de una celebración sin paraguas, con ropa más ligera y, sobre todo, ¡al aire libre! Toma nota de estas ideas y últimas tendencias nupciales.
Los vestidos
Lo vimos en la pasada edición de Barcelona Bridal Week y ya es un hecho: las novias estivales lucen espaldas con bonitos vestidos de tirantes finos, vestidos ligeros y colas cortas muy vaporosas.
Maquillaje y peinado
El look beauty, cuanto más natural y sencillo, mejor. Quizás un recogido messy, una trenza de espiga o una melena suelta con ondas. En cuanto al maquillaje, superdiscreto con efecto piel desnuda.
Accesorios para el cabello
Es la época del año para lucir flores en el pelo, liofilizadas -a ser posible- como las de Llorens & Durán, para que resistan las altas temperaturas durante de toda la celebración.
Los zapatos
Las sandalias son las reinas del verano y las novias deciden no dejar de lado esta costumbre. Todas las formas y tonos están permitidos, aunque las últimas tendencias dictan sandalias de tacón fino, tiras estrechas y color blanco. Si estás indecisa, estos son nuestros consejos para escoger tus zapatos de novia.
El ramo
El verano pide a gritos un ramo de novia colorido y alegre, de aspecto silvestre y con gran variedad de flores y verdes, y nada comprimido. ¿El puño? Un sencillo lazo de rafia.
El look de las damitas
Los más pequeños no pueden faltar en un día tan especial, sobre todo, si se trata de una boda de mañana. Un cortejo adorable, vestido con tejidos Vichy, alpargatas con lazos y coronas de flores.
Sí a las pamelas
La novia tiene un séquito de amigas, y todas ellas forman un escuadrón de pamelas. Puede que, incluso la novia, se atreva a ser una de ellas. Eso sí, solo son aptas para las más estilosas.
Accesorios para los invitados
Y, para ellos, sombreros panamá. Una opción elegante y divertida para que también se protejan del sol.
El coche
Una boda de verano no es una boda de verano si, a la salida de la ceremonia, no hay un descapotable esperando a los recién casados. Clásico o moderno, ¡el modelo es lo de menos!
Un catering original
Durante el aperitivo, sin dudarlo, showcooking. Desde Medems Catering nos dan algunas pistas: “Es clave la presentación, la puesta en escena en el estand y que el invitado participe en la elaboración, escogiendo ingredientes a su gusto. Nuestro showcooking de foie es todo un éxito, con algodón de azúcar, con manzana caramelizada en el momento o con flor de hibisco. Y para el final de la fiesta, sin duda, no hay nada más especial ni oportuno que uno de hasta seis tipos de hamburguesas y toda clase de toppings”.
Rincones con encanto
Si algo tienen en común las bodas de verano es un protocolo un poco más relajado. El buen tiempo invita a escoger una decoración más desenfada y a crear rincones chill-out donde relajarse.
El mejor ambiente
Por supuesto, una cena al aire libre y a la luz de las velas. Mesas imperiales con millones de velas y, quizás, con faroles de verbena. El éxito está más que asegurado.