Ekaterina Malysehva, la flamante esposa del príncipe Ernst August de Hannover realizó una entrada radiante en la iglesia del Mercado de la ciudad alemana. La joven lució un elaborado diseño hecho a mano de encaje chantilly y pedrería inspirado en su Rusia natal.
El traje, de manga larga, falda de gan volumen, escote redondo, mangas semitransparentes abullonadas y una larga cola, se acompañó de un velo a juego con el mismo encaje y pedrería que el resto del diseño, toda una obra de arte realizaba a mano y en excluisva para ella; y que ha supuesto tres meses y medio de trabajo. El majestuoso traje de Ekaterina se completó con una espectacular tiara familiar y un bello ramo realizado únicamante con flores blancas. Sin emabrgo, la novia prescindió de pendientes, seguramente para no restar ni un ápice de protagonismo ni a la diadema ni a su vestido. Su característica melena rubia la recogió en un moño bajo con raya y optó por un maquillaje luminoso y bastante discreto.