Ha sido el 'vestido del verano' casi con mayúsculas, un estilo que ya llevaba Kate Moss en los 90 y que ahora se alarga desde el tamaño 'mini' hasta los tobillos en diseños de satén, o su versión más invernal, en velvet. El vestido slip, o charmeuse por la textura sedosa del tejido, cae desde los hombros pegado a las curvas casi como un camisón, a veces con algún detalle lencero y casi siempre con tirantes. Si adoras el slip dress y no estás dispuesta a renunciar a él en invierno, toma nota: la gran mayoría pueden estilizarse en 'modo fiesta' con sólo añadir complementos o prendas de abrigo, o eligiendo alguna textura consistente de invierno.
El slip dress de partida: este en satén de color melocotón, con tirantes y largo a los tobillos, que lleva Amber Heard y que vale como diseño de fiesta acompañado de un clutch metalizado en color plata y una estola de piel en crema.