YolanCris, un viaje a la era dorada del 'boho-chic'
La firma ha apostado fuerte por las tendencias venidas de los años 70, convirtiendo toda la pasarela en una gigantesca 'disco' con bola de espejos incluida
Si hay algo que ha definido a YolanCris desde sus inicios es el amor por todo lo boho-chic: un rasgo que en los vestidos de novia que la firma ha creado para 2017 llevan al extremo en una coleccion 100% seventies; con una inmensa bola de discoteca de fondo, flanqueada por prismas de espejo en color plata y oro, las modelos de YolanCris han desfilado a toda velocidad por la pasarela de la Barcelona Bridal Fashion Week, con largas melenas al viento, miradas con destellos golden y labios de fresa.
Algunos rasgos que han brillado por encima de los demás: los flecos hiper largos de aire cowboy en color marfil, mezclados con patchwork artesanal hecho mano, los abrigos boho de plumas con efecto faux fur, y los diseños geométricos estilo damero.
NAVEGA POR LA GALERÍA DE IMÁGENES PARA VER LA COLECCIÓN 2017 DE YOLANCRIS
Las líneas: dos, una con prêt-à-couture de novia de etilo casual, con encajes y bordados en blanco puro sobre tul de seda transparente; y otra que se sumerge de lleno en el new chic de la novia, una tendencia que también hemos visto en el desfile de Cristina Tamborero, y donde se recuperan lo encajes de chantilly y guipures de seda con apliques de pedrería con reflejos plateados y dibujos de flores bordados a mano.
Destacan: los corsés lenceros por fuera del vetido y los diseños súper vaporosos con arandelas y nudos, muy à la Versace en los años 90.
Estos apliques en ocasiones se convierten en auténticas 'armaduras' de novia, con complejos entramados de joyas bordadas sobre todo en el escote, o estructuradas a modo de collar desde el cuello a la cintura.
Los encajes pasan a un segundo plano en forma de bodys y medias, complementando vestidos de tirantes o de falda más corta.
Un diseño similar a este lo encontramos en la colección del año pasado de YolanCris, en aquel caso con flores de colores bordadas.
Los vestidos cortos más estructurados se asemejan a los corsés de varillas que salen de dentro afuera, con el rasgo añadido de las flores de tela para hacer el diseño más dulce.
El vestido de novia con color ha vuelto a estar presente en este desfile, con diseños en dos tonos, con motivos de flores de seda blanca sobre tules en color maquillaje, y el total look nude de aire lencero.
El vestido encargado de cerrar el desfile, en maquillaje en degradé con velo de pedrería e hilo de plata, y para el que YolanCris han elegido el icónico Purple Rain de Prince, quizás como homenaje al fallecido artista.
El beauty look: melenas sueltas con raya partida y ligeramente marcadas a partir de los pómulos, destellos golden en lo ojos y labios de fresa.