Quizá tu amiga te haya comunicado que se va a casar o quizá seas tú la que se casa. En cualquiera de los dos casos, es habitual que te preguntes qué papel tiene la mejor amiga de la novia en una boda. Lo cierto es que pueden ser muchas las labores que realice esta figura (en algunos casos tendrá más implicación y en otros estará más liberada), porque no es una invitada más. Todo va a depender de lo que los novios necesiten durante los preparativos de su enlace y en el propio gran día. La mejor amiga de la novia, solo por serlo, tiene un papel destacado antes y durante el 'sí, quiero', especialmente cuando se trata de una celebración con un gran aforo, para la que la pareja necesitará grandes aliados. En las siguientes líneas, analizamos todas esas cuestiones de peso y propósitos imprescindibles para este personaje de importancia en un evento de este tipo.
Desde el primer momento: celebrar la alegría y ponerse a disposición de los novios
Cuando una pareja anuncia su compromiso, espera por parte de sus mejores amigos la mejor de las reacciones. Desde ese primer momento, en el que comienza la cuenta atrás, toca ser un apoyo para ellos. La mejor amiga de la novia, por naturaleza, debería estar ilusionada y mostrar su interés en colaborar, en aquello que se necesite, ante una circunstancia como esta. Ponerse a su disposición es un gesto que tranquilizará a los novios y que estos agradecerán de corazón.
No olvidar la fecha
Aunque es un simple detalle, olvidar la fecha de la boda puede ser percibido por los novios como un gesto de desinterés. No cuesta mucho apuntarse en el calendario el día en el que tiene lugar el enlace para evitar preguntar sobre esa boda sin conocimiento de causa. No obstante, cada vez más novios recurren a enviar un save the date a sus invitados más destacados a través de las apps sociales. Después, con la llegada de la invitación todo quedará más claro.
Nada de agobiar a la novia
Cada novia, como cada mujer, es un mundo y ante la organización de una boda, pueden actuar de forma muy diferente. Quizá la mejor amiga de la novia piense que las cosas han de hacerse de otra forma, que los plazos invitan a ir más deprisa, que hay ciertos proveedores a los que será imposible acceder, que el presupuesto planteado es bajo, que el menú debería llevar más comida, que el grupo contratado no es lo suficientemente bueno, que aún faltan muchos servicios por definir... Pero, salvo que le pidan opinión y a excepción de que sea una cuestión que comprometa verdaderamente a los novios, no debe comunicarlo. El objetivo no es agobiar a la pareja, sino facilitarle las cosas.
Aconseja desde el cariño
Al igual que las madres, las hermanas o las abuelas, las mejores amigas de la novia pueden tener un peso relevante en la toma de decisiones de la protagonista del día. Ya sea a la hora de escoger una gama cromática para la decoración nupcial, elegir qué invitados deben estar y cuáles no o qué corte del esperado vestido favorece más a su amiga; en todos los casos su opinión puede contar (y mucho). Por ello, te aconsejamos que huyas del sincericidio (si ves que algo le hace verdadera ilusión y a ti no) y mires por ella, para que su experiencia sea memorable, en positivo, y fiel a lo que a ella le gustaría.
Una fiel compañera en momentos clave
Como grandes compañeras de vida, las mejores amigas de la novia también gozan de un estatus diferente que les permite asistir y experimentar momentos clave la boda. Desde los preparativos de la novia (son las primeras en verlas antes de que recorra el pasillo nupcial) hasta la entrega de los ramos en el convite (de los que suelen ser receptoras), pasando por sujetar la cola o ser merecedoras de una canción. Un privilegio que no todas las invitadas tienen.
Plantear un regalo repleto de simbolismo
Con la llegada de la invitación del gran día o en su defecto con el envío del enlace a la web de la pareja (en el caso de los novios amantes del digital), es posible que los protagonistas adjunten una lista de bodas o un número de cuenta en el que recibir los regalos de sus invitados. Aunque esta opción es correcta, la mejor amiga de la novia puede recurrir a plantear un detalle con más simbolismo, que pueda ser especial para la novia y que esta recuerde con facilidad con el paso del tiempo. Una escultura, una experiencia, una pieza para su hogar o un complemento para su look nupcial son grandes propuestas.
Siempre disponible para echar una mano (con una sonrisa)
El mismo día de la boda, y especialmente los días previos al 'sí, quiero', es muy posible que la pareja necesite apoyo (moral o físico) porque la falta de tiempo, los nervios y las decisiones de última hora les requieran de apoyo. Como en otros momentos clave de la vida, la mejor amiga de la novia debe ofrecer su colaboración y, en la medida de lo posible, su disponibilidad para echar una mano, siempre con una sonrisa. Desde llevar cajas al espacio de celebración hasta recoger los misales en la imprenta, pasando por acompañar a la novia a hacerse la manicura o tomarse un café cuando esta se sienta muy estresada.
Testigo de su amor
Muchas de estas mejores amigas de la novia también son ese día, testigos de una boda religiosa o civil. Este papel está cargado de importancia, porque se reserva a personas que han marcado de lleno la vida de la pareja. Amigos que han vivido el amor de ambos y que han visto crecer la llama hasta llegar a la esperada boda. Esto supone que tendrás que firmar en el libro de testigos y que, al mismo tiempo, puede ser que debas leer (una lectura en un enlace por la Iglesia o un discurso en una celebración civil). Lo correcto es prepararse para una ocasión como esta con la mejor de las actitudes y habiendo practicado para la labor que se te ha encomendado.
Ninguna queja por la mesa
Encajar todas las piezas del puzzle que es una boda es un reto no apto para indecisos y en materia de organización nupcial, el diseño de las mesas de boda y sus comensales genera numerosos quebraderos de cabeza a los novios. Por eso, la mejor amiga de la novia debe ser comprensiva y de ella no se espera que emita queja alguna sobre la mesa que le ha correspondido. Es importante recordar que muchas invitadas reconocen haber descubierto personas muy interesantes durante el banquete que de otra forma no habrían tenido la oportunidad de conocer.
Siempre con la máxima energía
Un consejo muy repetido para los futuros recién casados de nuestras novias virales, esas que han dado la vuelta a la red por sus impresionantes looks y un planteamiento muy personal de su enlace, es que disfruten al máximo del gran día. Es cierto que es una jornada que pasa "volando" y por eso conviene volcarse en la experiencia. Los novios deben darlo todo de principio a fin, pero siempre se sentirán más arropados si sus invitados se entregan del mismo modo. Por ello, aconsejamos a la mejor amiga de la novia que acuda al 'sí, quiero' con toda su energía y que salte y baile hasta que la fiesta termine.
Prohibido ir de blanco (o similar)
No es necesario recordarlo, pero la regla más conocida de la etiqueta para bodas a veces parece no sonar a algunas invitadas. Y es que, a pesar de saber que en los enlaces solo la novia va de blanco (y de colores similares), los fotógrafos y las wedding planners nos confirman que siempre hay alguna convidada con un look total white o un vestido de un tono beis claro. Existen muchas otras oportunidades para lucir este color sin entrar a escogerlo en fechas como esta, por lo que esta gama cromática es totalmente prescindible.
Evitar aquello que los novios no quieren ver
Es habitual que, como aliada de los novios, la mejor amiga de la novia (al igual que los hermanos de la pareja) sea un pequeño radar que, a la par que disfruta, detecte cuestiones que sabe que no están planteadas tal y como los protagonistas desearían y haga por corregirlas (o por comentarlo a la wedding planner), para evitar males mayores. Desde un error estético hasta camuflar una crisis (como una discusión entre invitados, un desmayo o la rotura de algún elemento). ¡Todo sea por las buenas amigas!