Se colocan casi siempre en la espalda, pero hay novias que los llevan sobre los hombros, adornando la cintura o el escote. Los lazos se han convertido en una de las tendencias que ha puesto de acuerdo, una vez más, a novias y diseñadores de vestidos de novia. Los que más gustan en estos momentos nos hacen pensar en aquellos que popularizó Carolina Herrera, con cuerpo, algo rígidos, y de gran tamaño. Pero también hay opciones más discretas. Ah, y llenas de color. ¿Pero de dónde viene el idilio entre este elemento y la moda nupcial? ¿Y cómo los llevan las prometidas reales?
Un poco de historia sobre los lazos en la moda nupcial
La relación entre los vestidos de novia y los lazos viene de lejos, cuando la nobleza marcaba las tendencias. Durante el siglo XVIII las novias de la aristocracia llenaban sus trajes de flores, cintas y lazos que colocaban en las faldas, los corsés y las mangas. En el XIX, la reina Victoria marcó un punto de inflexión con su look nupcial. Aunque aquel vestido que hizo historia no llevaba lazos, sí se convirtió en referente de una moda más relajada, imponiendo el blanco como el tono predilecto y la elegancia contenida como eje. Después de aquello, los lazos se redujeron, adornando de forma sutil las cinturas o colocados, a modo de cierre, en la espalda.
Con el cambio de siglo y el nacimiento de corrientes estéticas como el art nouveau, los lazos se estilizaron y se convirtieron en adornos bastante etéreos que se diseminaban por las cinturas de las prendas. En los años 20, con el art déco en boga, los vestidos de novia se simplificaron, pero este elemento no desapareció, se añadía en pequeñas formas geométricas o como detalles en los velos.
Pero hablar de lazos y moda nupcial, como adelantábamos al principio, es hacerlo de Carolina Herrera. La diseñadora introdujo de forma natural estos elementos decorativos en sus colecciones, logrando propuestas llenas de romanticismo y haciendo de ellos su seña de identidad. La creativa no solo los utilizaba como un elemento estructural y decorativo, también para lograr un buen equilibrio entre lo clásico y lo actual. Por ejemplo, un vestido tradicional puede incluir un lazo sobredimensionado en la espalda, aportando dramatismo. También se atrevió a incluirlos en tonos diferentes al blanco. Una estética que Wes Gordon ha querido conservar en algunas de sus propuestas.
Pero no solo ella ha explorado la versatilidad de los lazos: Oscar de la Renta, Vera Wang, Marchesa o Elie Saab son solo algunos de los grandes nombres del mundo nupcial que juegan una y otra vez con ellos en sus colecciones, logrando propuestas renovadas.
Cómo los utilizan los diseñadores de vestidos de novia
En la espalda
Basta hacer un repaso por las colecciones de algunos creativos para confirmar que los lazos siguen teniendo protagonismo en las espaldas. Diseñadoras como Amsale Aberra, María Baraza o Isabel Sanchís los incluyen en la zona trasera de los vestidos y, cuando lo hacen, casi siempre apuestan por opciones más bien estructuradas y de gran tamaño. Aunque en la colección para 2025 de la española también los hemos visto fluidos y no meramente decorativos, como los que cierran capas.
En los hombros
Entre los diseños de Rosa Clará y en las propuestas de Vera Wang x Pronovias los lazos se colocan sobre los hombros. La primera los elige de tamaño medio, y los reinterpreta para no utilizar su imagen más clásica; la segunda los elige en clave XL y juega con ellos para crear siluetas estructuradas y asimetrías. Por su parte, Galia Lahav deja que "resbalen" ligeramente y el lugar de colocarlos en los hombros los baja hasta las mangas caídas que protagonizan muchos de sus diseños.
En la cintura
Cuando se colocan en esta zona del cuerpo son pequeños, sirven para potenciar la figura y funcionan, a efectos prácticos (y visuales) como una especie de cinturón. Los hemos visto minimalistas entre las propuestas de Amsale y llenos de color en las de Monique Lhuillier.
Cómo llevan los lazos las novias
En un primer momento, Sara, una de nuestras novias virales, se quería casar con un diseño con cuello de cisne, similar al que llevaron Grace Kelly o la influencer Lucía Bárcena en sus bodas. También le gustaba la idea de llevar guantes. Pero al saber que se casaba el 9 de septiembre en Alicante, las diseñadoras de Aleste Atelier le aconsejaron descartar ambas opciones: pasaría demasiado calor. "Cuando estas opciones fueron descartadas, empecé a pensar en la idea de la foto, que había guardado en la adolescencia, donde aparecía Sarah Jessica Parker con un lazo espectacular en la espalda de color rosa".
Alejandra se casó en Denia con un maravilloso vestido con escote halter y falda panelada de Rosa Clará. Era una prenda con un cuerpo muy ceñido que dejaba toda la espalda al aire y contrastaba con una gran falda confeccionada en una tela muy poco común para prendas nupciales, "quería que aportara un toque innovador y fresco al diseño, con algo de volumen que me hiciera sentir que el vestido era único para el día más importante de mi vida". En la cintura incluyeron un bonito lazo.
Lorenzo Carpile creó para María un vestido de novia sencillo y minimalista confeccionado en crepé de seda. Para dar un toque diferente al diseño, el modista introdujo un maxilazo de organza de seda en la zona alta de la espalda, creando un acabado de alto impacto.