El beso representa el amor y la conexión emocional entre los novios. Es una expresión física y universal de cariño y uno de los momentos más esperados en una boda. Aunque hace años que los miembros de la realeza intercambian este gesto en sus enlaces ante multitud de miradas, lo cierto es que Diana de Gales y el entonces príncipe Carlos fueron los primeros en besarse públicamente y ante una multitud. Ellos rompieron el férreo protocolo que, hasta entonces, regía los enlaces reales. Este gesto marcó un antes y un después, haciendo que este intercambio de cariño se cuele también en las bodas de las royals y nos regale imágenes tan bonitas y románticas como estas.
Diana de Gales
Cuándo: el 29 de julio de 1981.
Dónde: en la Catedral de San Pablo, de Londres.
Con quién: con el entonces príncipe Carlos.
La boda: el beso en el balcón no estaba planeado ni formaba parte del protocolo. Fue el entonces príncipe Carlos quien decidió besar a Diana frente a la multitud congregada fuera del palacio que gritaba, con alegría, pidiendo a los recién casados que intercambiaran un beso. Este gesto rompió con las formalidades de la realeza británica, y marcó el inicio de una tradición que otras parejas reales han seguido en sus bodas.
Sarah Ferguson
Cuándo: el 23 de julio de 1986.
Dónde: en la Abadía de Westminster.
Con quién: con el príncipe Andrés.
La boda: ellos fueron los primeros royals británicos en emular el beso de Lady Di y el entonces príncipe Carlos. Eso sí, los diques de York no se conformaron con un solo beso. Después del primero, la multitud comenzó a aclamar aún más fuerte, y ellos repitieron el gesto. Esto fue visto como un guiño a la conexión especial que tenían con el público.
Mette-Marit de Noruega
Cuándo: el 25 de agosto de 2001.
Dónde: en la catedral de Nuestro Salvador de Oslo.
Con quién: con Haakon de Noruega.
La boda: Mette-Marit no provenía de la nobleza y tenía un pasado considerado poco convencional para una futura reina consorte. Por eso, su unión con Haakon de Noruega fue algo controvertida. Su enlace fue, además, mucho más moderno que los de otros miembros de la realeza noruega y el beso fue un momento sencillo pero emotivo, que simbolizó la cercanía y calidez de la pareja. Esto ayudó a consolidar su imagen como una pareja real contemporánea y accesible.
Máxima de los Países Bajos
Cuándo: el 2 de febrero de 2002.
Dónde: en la Iglesia Nueva de Ámsterdam.
Con quién: con Guillermo de los Países Bajos.
La boda: la pareja regaló no uno, sino dos besos en el balcón del Palacio Real en Ámsterdam. El primero fue breve y tímido, pero ante los vítores del público, se dieron un segundo beso más largo y apasionado. Esta muestra de cariño desató aún más aplausos y reafirmó su popularidad. Máxima, siempre espontánea, mostró una gran sonrisa antes y después del beso.
Mary de Dinamarca
Cuándo: el 14 de mayo de 2004
Dónde: en la iglesia de Nuestra Señora, en la catedral de Copenhague.
Con quién: con Federico de Dinamarca.
La boda: igual que hicieron algunos miembros de la realeza de otros países, Mary y Federico de Dinamarca inauguraron una tradición al besarse en público, compartiendo con el pueblo un momento íntimo. El entonces príncipe Federico, conocido por ser reservado en público, dejó ver su lado más romántico durante el beso. Además, en varias ocasiones durante ese día, se le vio visiblemente emocionado, incluyendo un momento en la ceremonia cuando se le escaparon lágrimas al ver entrar a su esposa al templo.
Reina Letizia
Cuándo: el 22 de mayo de 2004.
Dónde: en la catedral de la Almudena de Madrid.
Con quién: con el entonces príncipe Felipe.
La boda: tímido, algo solemne, pero muy cariñoso. Así fue el beso que intercambiaron nuestros monarcas durante su boda. Aunque el día estuvo marcado por la lluvia, eso no impidió que una multitud se agolpara en la Plaza de Oriente para ver a los recién casados. Tampoco que aplaudieran efusivamente cuando intercambiaron este gesto en el balcón que estaba cubierto para proteger a la pareja de la lluvia.
Victoria de Suecia
Cuándo: el 19 de junio de 2010.
Dónde: en la Catedral de San Nicolás de Estocolmo.
Con quién: con Daniel Westling.
La boda: Victoria de Suecia, conocida por su cercanía y calidez, mostró una sonrisa genuina y una gran emoción durante el beso. El momento reflejaba no solo su amor por Daniel, sino también su felicidad por compartir este instante con el pueblo sueco, con el que siempre ha tenido una relación muy cercana.
Kate Middleton
Cuándo: el 29 de abril de 2011.
Dónde: en la abadía de Westminster.
Con quién: con el príncipe Guillermo.
La boda: siguiendo la tradición iniciada por el príncipe Carlos y Diana de Gales, Kate Middleton y el príncipe Guillermo se besaron en el balcón del Palacio de Buckingham. Pero la pareja fue más generosa y no se dio uno, sino dos besos. El primero fue corto y tímido, mientras que el segundo, animado por la multitud (se congregaron más de 500.000 personas), fue más relajado y cariñoso.
Charlene de Mónaco
Cuándo: los días 1 y 2 de julio de 2011.
Dónde: en el Palacio Grimaldi de Mónaco.
Con quién: con Alberto de Mónaco.
La boda: el suyo fue breve y muy discreto, un claro reflejo del protocolo monegasco y del carácter algo reservado de los recién casados. Aunque en aquel momento su beso se comparó con el de otros royals más efusivos, hay que tener en cuenta que cada pareja es un mundo y tiene una personalidad diferente.
Magdalena de Suecia
Cuándo: el 8 de junio de 2013.
Dónde: en la capilla del Palacio Real de Estocolmo.
Con quién: con Christopher O'Neill.
La boda: Magdalena de Suecia y Christopher O'Neill se besaron en las escaleras de la capilla del Palacio Real, tras la ceremonia religiosa. Fue un beso lleno de ternura y naturalidad, en línea con la personalidad relajada y romántica de la pareja. Este gesto permitió a la pareja conectar directamente con la multitud que los esperaba, creando un ambiente más íntimo y cálido.
Sofía de Suecia
Cuándo: el 13 de junio de 2015.
Dónde: en la capilla del Palacio Real de Estocolmo.
Con quién: con Carlos Felipe de Suecia.
La boda: su historia de amor fue poco convencional y su beso, comparado con el de otros miembros de la realeza, también. Este gesto ocurrió a las puertas de la capilla del Palacio Real de Estocolmo, justo después de la ceremonia religiosa. Fue muy natural, cargado de emoción y un claro reflejo de la complicidad de la pareja. Pero quizá, lo más llamativo (y romántico), es que Carlos Felipe de Suecia tomo con ternura la cara de su ya mujer.
Meghan Markle
Cuándo: el 19 de mayo de 2018.
Dónde: en la capilla de San Jorge del Castillo de Windsor.
Con quién: con el príncipe Harry.
La boda: ellos tampoco esperaron a llegar al balcón para besarse; Meghan Markle y el príncipe Harry lo hicieron en las escaleras de la capilla de San Jorge del Castillo de Windsor. Fue un gesto natural, dulce y lleno de amor que los dejó a ambos sonriendo ampliamente. Muchos vieron en ese beso algo más que un gesto de cariño y han hablado de un símbolo de cambio en la monarquía británica.
Eugenia de York
Cuándo: el 12 de octubre de 2018.
Dónde: en la capilla de San Jorge del castillo de Windsor.
Con quién: con Jack Brooksbank.
La boda: cientos de personas se congregaron en las calles de Windsor para celebrar la boda. Aunque el evento no tuvo la magnitud mediática de otras bodas reales, el público aclamó con mucho entusiasmo a los recién casados, haciendo que el beso fuera un momento especial tanto para la pareja como para los asistentes. Ellos, como ya hicieron el príncipe Harry y Meghan Markle, también eligieron las escaleras de la capilla de San Jorge del castillo de Windsor para este momento tan romántico.
Lady Gabriella Windsor
Cuándo: el 18 de mayo de 2019.
Dónde: en el Castillo de Windsor.
Con quién: con Thomas Kingston.
La boda: fue un gesto breve pero romántico, acorde con el carácter reservado y elegante de Lady Gabriella y Thomas Kingston. Su vestido, un diseño con encaje y detalles florales, lleno de romanticismo y sofisticación, fue obra de Luisa Beccaria y terminó de dar ese toque de cuento al momento.
Nina Flohr
Cuándo: el 26 de junio de 2021.
Dónde: en la Catedral de Atenas.
Con quién: con el príncipe Philippos de Grecia.
La boda: al salir de la catedral, los novios fueron recibidos con una lluvia de pétalos blancos lanzados por los invitados. Fue justo ese momento el que eligieron para su beso, un gesto capturado por los fotógrafos que simbolizó la unión de la pareja y fue recibido con aplausos por los asistentes.