La decoración ha ganado cada vez más peso en las bodas. Muchas parejas invierten una buena partida del presupuesto en engalanar la iglesia o el lugar donde se celebre el enlace, en diseñar seating plans que sorprendan a sus invitados o en crear rincones especiales. Pero son las mesas de boda las que acaparan más atención. Por eso no sorprende que novios, wedding planners y floristas se esfuercen por conseguir composiciones que, como poco, sorprendan.
Mesas minimalistas y flores variadas
Una de las tendencias que más gusta cuando hablamos de mesas corridas en lugar de redondas, es adornarlas con pequeños centros que, aunque guarden relación entre sí, no sean iguales. Un ejemplo lo encontramos en esta boda organizada con Peonías Eventos, en Finca El Campillo, en la que Aquilea se encargó de la decoración floral. Los pequeños jarrones y violeteros que hay distribuidos a lo largo de la mesa están llenos de flores blancas y azules. Una elección minimalista que funciona especialmente bien cuando, además, hay verde a diferentes alturas.
Flores, pero en pequeñas dosis
Cuando pensamos en decoración de mesas casi siempre imaginamos bastante uso de la flor. Sin embargo, en esta propuesta de Las Bodas de Araventum vemos que no tiene por qué ser así. Las wedding planner, que trabajaron con las floristas de El taller de Clo en esta boda celebrada en el Huerto de San Vicente, muestran esta mesa en la que el protagonista es el mantel, de color anaranjado. Tanto el menaje como las flores y las velas, en distintos colores, ayudan a que el resultado sea redondo.
Decoración en blanco y verde
Toda boda tiene una gama cromática predominante y aunque las opciones son muchas y bastante más variadas de lo que podríamos pensar, el blanco y el verde siempre son una opción segura. Sobre todo cuando hablamos de montajes tan bonitos como este. Desde Vintage bodas organizaron esta boda y la decoraron con flores de Leymar Floristas. Juntas crearon pequeños centros de mesa y un ligero camino de vegetación que daba sensación de ligereza. Las servilletas y los manteles toile son de Options.
Mesas sin mantel
La mayoría de parejas y proveedores de bodas prefieren vestir las mesas con elegantes manteles, pero también hay quien apuesta por dejarlas al descubierto. Ese es el caso de este montaje de Fit for weddings en la Masía Fuente la Reina. Las wedding planner optaron por dejar a la vista los tableros de madera y aportar por una decoración a medio camino entre lo rústico y lo chic con centros de rosas blancas.
Flores con color y velas
Si las flores son un imprescindible en la decoración de mesas, las velas también tienen un papel importante. En esta boda organizada por Los sueños de Julieta en el Monasterio de Lupiana vemos como la mesa presidencial, diseñada por Elena Suárez & Co., estaba adornada por una mezcla de flores pequeñas y variadas en tonos rosas, albaricoques y velas dispuestas en candelabros envejecidos.
Velas y más velas
Si en la imagen anterior veíamos que las velas gustan mucho, en esta propuesta de Weddings with love ratificamos que funcionan especialmente bien cuando se trata de crear un aire mágico y romántico. En este caso, un número muy amplio de velas aromatizadas de The wedding Scent se fusionan perfectamente con el estilismo floral de Virginia González. Un resultado muy especial, sobre todo por la noche.
Decoración a diferentes alturas
Hace tiempo que la decoración de mesas no se limita a todo lo que se puede colocar tocando el tablero, también a todo lo que se pone sobre la misma. Lo comprobamos en este diseño de El Jardín & Co. para una boda celebrada en Mas del Pi, de Grupo Peñalen. Un mantel en tono crudo ayuda a armonizar una decoración sencilla en la que predominaban unas composiciones florales en blanco y verde. Suspendidos sobre la misma, dos centros de mayor tamaño, pero con la misma gama, consiguen el ansiado efecto wow.
Decoración sobre las mesas
En esa misma línea, aunque con un montaje más llamativo, encontramos esta propuesta de la wedding planner Priscila Llorens para un enlace celebrado en Castell de Perelada. Si en la imagen anterior sobre la mesa había dos grandes centros, en este caso se trata de una estructura de flores y plantas, con velas colgantes, que crea sensación incluso de techo sobre la mesa. Una opción que no dejará a ningún invitado indiferente y que, casi siempre, se elige para la mesa presidencial.
Clásico y atemporal
Para aquellas parejas que no quieran seguir las tendencias o que no se sientan demasiado cómodos con ellas, existen también opciones más atemporales. Un ejemplo lo encontramos en este trabajo de A-Típica con flores de Aquilea con el que demuestran que un centro de mesa clásico y en tonos neutros es una opción elegante y siempre un acierto.
Centros de mesa con flores y frutas
Cada vez estamos más acostumbrados a ver cómo las flores y las frutas (incluso las verduras) se unen para crear centros de mesa llenos de originalidad. En este caso, las wedding planner de La Petite Mafalda trabajaron con Marengo Flores para dar con esta sencilla composición con uvas que da un toque de alegría a una mesa en tonos ámbar para una boda celebrada en la Finca la Gaviota.