La boda de Marta en Sevilla: cuatro meses para organizarla y un vestido con sobrefalda brocada

Un vestido de novia inspirado en los bosques

El suyo es un bonito caso que nos enseña la importancia de adaptarse a las circunstancias, y de imaginar que se iba a casar en verano, terminó dando el 'sí quiero' una mañana previa a la Navidad. "La verdad es que siempre quise casarme en verano y tenía muchas ideas para un vestido veraniego, pero como al final me casé en invierno, tuve que improvisar.  Me centré en las formas y detalles que sé que me sientan bien", explica. "Mara Álvarez lo recompuso todo perfectamente, aportando muy buenas ideas. Sí que tenía claro que mi vestido tenía que tener notas relacionadas con la naturaleza: el bosque, las flores…", describe. 

Entre todas las marcas en las que podría haber confiado para su gran día, ello nos explica por qué se decantó por Pol Nuñez. "Son un referente en el mundo nupcial, tienen una larga y exitosa trayectoria. Considero que se trata de una firma muy versátil, que se adapta a todos los estilos, utilizando tejidos y materiales súper especiales y, sobre todo, de calidad. Además, tengo amigas que eligieron la misma firma y quedaron muy contentas".

Le preguntamos, según su experiencia, qué es lo más importante a la hora de elegir el traje nupcial que te acompañará de camino al altar para prometerte amor eterno con el hombre de tus sueños, a lo que nos responde. "Sentirse una misma, verse favorecida y elegante, sin sentirse disfrazada", un pensamiento que la conecta con la mayoría de nuestras novias virales. 

"Tenía claras algunas cosas que me gustaban para el vestido", nos cuenta sobre la elección de diseño más importante que cuelga ya de su armario. "La cintura marcada, corte evasé, escote en la espalda, algún detalle tipo hombreras y usar terciopelo para adornar... Buscaba que tuviera un toque invernal y original al mismo tiempo. Con todas estas notas, Mara me hizo un boceto y dio en el clavo totalmente".

La sobrefalda brocada de flores

Uno de los detalles más importantes fue la sobrefalda. "Llevé una sobrefalda con cola confeccionada con una tela brocada en flores espectacular. El primer día que fui a ver a Mara Álvarez, mientras me probaba varios vestidos, de repente vi un rollo de tela que me llamó la atención. Me lo enseñó, mi madre dijo que siempre me había imaginado con una falda con volumen ajustada a la cintura, así que me la probó haciendo el efecto de falda para ver cómo quedaba y entonces, ¡magia!", recuerda. 

Junto a Mara y el equipo del taller, lograron dar forma a esta gran pieza con cola que Marta lució durante la ceremonia, el aperitivo y la comida. "Mara me enseñó un cinturón de terciopelo troquelado en hilo plateado en forma de hojas que quedaba perfecto sobre el corte de la cintura del diseño. Así que para la fiesta, cambié la sobrefalda por este complemento, dándole el toque festivo que necesitaba, y así también pude bailar mucho más cómoda", dice.

Las joyas también cobraron un papel fundamental en el look de Marta. "Llevaba el anillo que mi marido me regaló al pedirme que me casara con él; es de oro blanco y brillantes, y en medio tiene un brillante central en forma de rombo redondeado, de Joyería Suarez".

¡Cambio de pendientes!

Y nos sigue contando... "Los pendientes eran de mi abuela, rosetones en forma de flor, de brillantes y oro amarillo". Y como algunas novias están haciendo esta temporada, ella también se cambió de complementos en el banquete. "Para la fiesta, me puse los pendientes que mi suegra me regaló por mi pedida y que encargó hacer en la Joyería Pilar Román: largos, de brillantes y terminados con unas esmeraldas increíbles que ella trajo de un viaje a Colombia. En cuanto a los zapatos, los elegí de Pol Núñez Novias. Son ideales, de terciopelo color rosa empolvado con detalles en dorado, ¡además comodísimos! Tanto que durante el baile no quise cambiarlos por los de repuesto". 

"Elegí un maquillaje natural, pero con los labios en color burgundy suave, porque siempre me pinto los labios cuando me arreglo", razona sobre su elección que se desembarca de las ideas clásicas de las novias. Y su peinado ha sido uno de los toques más personales del atuendo, un moño alto para realzar su cuello. "A diario me hago muchos moños altos para estar cómoda y me encanta. Lo terminé con unas hojas pequeñitas de hiedra natural que me recuerdan al bosque y a las hadas, desde siempre había pensado llevarlas el día de mi boda. Mientras me maquillaban y me peinaban, llevaba un pijama blanco con blusa tipo blazer y puños con volantitos, de Sêrene Collection. Me encantó ese rato de preparación en casa, con mi madre y mis hermanas. ¡Fue muy divertido!". 

Su historia de amor

"¡Nos conocimos en la boda de mi hermana!", explica emocionada, a lo que nos sigue relatando su encuentro. "La realidad es que ya nos conocíamos por amigos en común, pero nunca habíamos reparado uno en el otro. Ese día, vino a presentarse y me sorprendí porque ya nos habían presentado varias veces y él no se acordaba. Se lo recordé y, al final, se pasó todo el baile haciéndome bromas; cada vez que se acercaba me llamaba de una forma diferente para chincharme: María, Mercedes, Elena… Nos reímos tanto que estuvimos toda la boda bailando… ¡Y hasta hoy!".

"Los dos somos de Sevilla y vivimos varios años en Madrid, trabajando y estudiando. Es gracioso porque el tiempo que coincidimos viviendo allí, nunca nos vimos aunque vivíamos en la misma zona. Además, los dos volvimos a Sevilla más o menos a la vez y al poco nos conocimos… ¡Parecía que estaba planeado!", relata. Y la gran pregunta surgió tras un año viviendo juntos, aproximadamente. "Él acababa de terminar un máster que requirió mucho tiempo y dedicación, y los dos sabíamos que queríamos casarnos y formar una familia juntos. En cuanto lo terminó, se sintió liberado y cogimos las vacaciones de verano… ¡Se lanzó al ruedo!". 

Y menos de medio año después de aquel gran 'sí', lograron crear la boda con la que siempre habían soñado, aquel 16 de diciembre de 2023 en la mencionada Iglesia de San Esteban, en Sevilla y se trasladaron al Cortijo Torre de la Reina para celebrarlo por todo lo alto. "Coincidía con el cumpleaños de mi padre y él no podía estar más contento con la fecha". 

"Hicimos el aperitivo en uno de los jardines con la música del grupo Café para Dos de fondo, fue un acierto porque nos hizo un día fantástico. El almuerzo fue en el salón, que decoramos con ilex rojo, pino, eucalipto y velas blancas. Ahí sí que quisimos darle el toque navideño. El seating fue un árbol de Navidad, con los tarjetones de las mesas atados con lazos de cuadros rojos escoceses. En cuanto a la fiesta, contamos con un grupo de flamenquito de amigos nuestros Cantares de Huelva y con la empresa StaffSound, también de toda la vida. Lo organizamos todo nosotros mismos, aunque tengo que decir que el catering, Alda y Terry, nos ayudó muchísimo. Fue un reto, porque lo conseguimos todo en cuatro meses. ¡No queríamos esperar un año!". 

Una anécdota para el recuerdo

Entre todas las anécdotas que han vivido desde el inicio de su relación, nos cuenta cómo comenzó todo, ¡antes incluso de conocerse oficialmente! "De camino a la iglesia para la boda de mi hermana, Francisco compartió taxi con un primo suyo al que conozco desde hace mucho años y tengo mucho cariño. Por lo visto, le preguntó a su primo por las amigas de la novia, que no sabía quiénes eran. Entonces le dijo: olvídate de ellas y céntrate en su hermana, es una pelirroja encantadora. Al empezar la fiesta vino a presentarse, me hizo todas las bromas del mundo, bailamos toda la boda y ya empezamos a quedar". 

Marta quiere agradecer especialmente su trabajo a los proveedores que estuvieron junto a ellos el día de la boda. 

• Vestido de novia: Pol Núñez
• Bata de novia: Sêrene Collection
• Flores: D-tallo 
• Fotografía: Mónica Ortega Domínguez 
• Catering: Alda y Terry Catering
• Finca: Cortijo Torre de la Reina
• Música: Café para Dos y Staffsound
• El Equipo de Luis Ramos