La historia de Henar, la novia que se casó en Madrid con un vestido desmontable de mangas abullonadas

"Sabía lo que no quería, pero no lo tenía muy claro, hasta que me fui probando distintos estilos, sé que quería algo elegante y clásico, con algún toque moderno y romántico. Quería ser una princesa moderna" nos explica Henar acerca del punto de partida del diseño del look para su gran día. Lo importante para ella era sentirse ella misma, fiel a su estilo, favorecida y cómoda.

Al final, se decantó por Valenzuela, una de las firmas nupciales más prestigiosas de nuestro país. "Siempre me han gustado sus vestidos, su estilo y creatividad La confección, los tejidos que utilizan, se nota la calidad en todos sus diseños. Lo cuidan todo al detalle, incluso el taller es precioso. Sus diseños quedan como un guante, hasta el último día, lo estuvieron ajustando, se notaban los nervios en mi cuerpo. Estoy muy agradecida a Cristina y a todo su equipo" nos cuenta, emocionada.

Henar explica que, para ella, la experiencia de crear tu propio vestido a medida y personalizado desde cero, que vivió junto a su madre y sus primas, fue preciosa, y lo recomienda a las futuras novias. "Elegir el diseño, los distintos tejidos, los pequeños detalles. Cada prueba eran nervios e ilusión a la vez". Al final, el resultado fue un vestido convertible, con una sobrefalda marcando la cintura, que acababa en una larga cola y con escote abierto para acentuar las clavículas. Las protagonistas eran las mangas abullonadas de organza, terminadas con detalles de encaje, el mismo que llevaba en la espalda descubierta.

Un vestido desmontable

En lugar de optar por dos (o más) diseños diferentes para su gran día, Henar prefirió optar por un modelo convertible, un vestido con sobrefalda de cola larga. "A la hora del baile, quería estar cómoda, y al quitar la sobrefalda, se veía el vestido en crepe de seda, ajustado al cuerpo, como si fuera otro, donde se podían ver bien los zapatos". 

Los zapatos fueron un regalo de su amiga Cristina, hechos a medida por Franjul, un par en color menta con detalles dorados con los que Henar confiesa haber aguantado toda la noche.

Para completar su estilismo, llevó un velo de tul clásico que protagonizó una de las anécdotas de la jornada: "Cuando entré, se me enganchó el tul del velo con la alfombra, pero no me importó, me dio por reír. Se ajustó el velo bien al pelo y solucionado. Recomendación a futuras novias, cuidado con las alfombras y velos largos" nos cuenta.

Las joyas más especiales

Como ocurre con muchas novias, las joyas escondían un significado especial. Los pendientes, de esmeraldas y brillantes, fueron un regalo de su padre. Completó con un anillo de su abuela, un recuerdo muy bonito para tenerla presente, y una pulsera que se trataba de un regalo de su madre.

Además, lució el anillo de pedida que le regaló Carlos para hacerle la gran pregunta, una pieza de Suarez. Las alianzas eran de Rabat, un regalo de su amiga Alba.

El ramo, nos cuenta, fue un regalo muy especial de su prima Anabel, que diseñaron con Marienta del equipo de By The Flower Power, que fueron los mismos encargados de decorar la finca. "Quería llevar peonías y no era la época, así que nos aconsejaron con otra alternativa con rosas eskimo, fresias, lishiantus y eucalipto. Quedó precioso. Llevaba una cinta verde menta -a juego con el resto de detalles de la boda-, con una estrella en recuerdo al padre de Carlos y una medalla de la virgen de Maria Auxiliadora".

Detalles del beauty look

Henar tenía muy claro qué quería en cuanto a su look de belleza y, siguiendo una de las tendencias nupciales en auge, buscaba: "un maquillaje natural, con la piel luminosa, que me aguantara todo el día". En cuanto al peinado, relata que dudó en llevarlo entre semirrecogido o suelto. Al final, decidió llevar un recogido desmontable, una coleta que luego se convertía en semirrecogido, obra de Ika Sánchez.

Carlos y Henar se conocieron por amigos en común del colegio, y les unió un festival, una de sus pasiones en común puesto que a ambos les encanta la música. "Luego llegó la pandemia y la superamos, hasta ahora. Si hemos superado una pandemia juntos, ya podemos superar todo" nos explica. Después de un año y medio juntos, se fueron en Navidades a Nueva York, y él sorprendió a Henar arrodillándose en lo alto del edificio Summit, con unas vistes increíbles de toda la ciudad, un momento mágico en el que la gente comenzó a aplaudir, emocionada.

Al final, la fecha elegida fue el 30 de septiembre de 2023, y la pareja organizó todo sin wedding planner pero con ayuda de sus familias. "Los dos somos muy detallistas, y nos implicamos mucho en todos los procesos. Lo hicimos todo en 8 meses, y siendo post pandemia, que los proveedores estaban con mucha demanda, nos costó, pero, aun  así conseguimos organizar como queríamos que fuera nuestra boda, tal como la habíamos imaginado" explica.

"Nos casamos en la Iglesia de San Jerónimo el Real en Madrid, tenemos una relación muy estrecha con la iglesia, el sacerdote hizo que la ceremonia fuera muy emotiva y cercana para nosotros" nos cuenta. "Cuando llegué, estaban nuestros pajes esperándonos para entrar, iban ideales de Aiana Larocca, lo hicieron fenomenal. Allí estaba Carlos sonriendo, con su madre en el altar, entró con la canción de los Beatles, All you need is Love. Mi entrada fue con el Canon de Pachelbel, acompañaba del brazo de mi padre, fue muy bonito. La boda fue interpretada por el Coro del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid, acompañada de solista, órgano y violín. Fue un lujo tenerles en nuestra boda, cantaron extraordinariamente y pusieron mucho cariño. Tenemos muy buena relación con los componentes, ya que mi madre pertenece a él".

Cuando terminó la ceremonia, se fueron hacia el Palacio de Aldovea en un coche clásico Hurtan Albaycin conducido por Carlos, el mismo que llegó la novia a la iglesia con mi padre y mi prima Rocío. "Ver a nuestros familiares y amigos con música de fondo, con la luz del atardecer…ahí ya se nos quitaron los nervios, estábamos felices. Los invitados disfrutaron del atardecer en el jardín, donde se hizo el cóctel. Como la familia de Carlos es valenciana, no pudo faltar una pequeña traca, cuando hicimos la entrada al cóctel".

Como Henar y su madre son farmacéuticas, los novios quisieron hacer un guiño a esta profesión. "La papelería del día de la boda mantuvo el formato de las invitaciones, fueron en tonos verdes, con dibujos de plantas medicinales, con los mismos dibujos en el seating plan y en los meseros.Todo fue obra de mi madre, pintadas y dibujadas por ella, lo que hicieron que fueran más especiales, únicas y originales".

A pesar de que se trata de un día especial de principio a fin, Henar destaca varios momentos clave que nunca olvidará: "Cuando entré en la iglesia ver la sonrisa de Carlos en el altar, la unión y complicidad que tuvimos, y seguimos teniendo es algo que es único y especial". Además, añade que fue único "ver a toda la gente que quieres y que te quiere celebrando contigo es sencillamente precioso, siempre teniendo muy presente, a las personas que faltaban ese día tan importante para nosotros".

Después de la cena, ya con la sobrefalda desmontada, abrieron el baile con la canción Stand by me. "Creo que nos salió bastante bien, (y eso que casi ni ensayamos), y ahí ya empezó la fiesta animada por Hey Mickey. La música es muy importante para una buena fiesta. Fue todo un acierto contar con ellos. Queríamos que la gente se lo pasara bien, y que estuvieran a gusto. Lo dieron todo".

Cuando le preguntamos si considera importante seguir las tendencias, nos dice que considera que "hay que darle un toque distinto y moderno, pero mantener lo clásico, para luego después de los años al ver fotos, ver que tu vestido es atemporal y no ha pasado de moda". Y, en cuanto a las tradiciones, considera que hay varias que sí considera importante, aunque, eso sí, "sin caer en una boda antigua recomendaría tener detalles clásicos, y adaptarlos a tu gusto".

Al pedirle por sus consejos de cara a parejas que están preparando su gran día, lo tiene claro y coincide con la mayoría de recién casados: "Que disfruten de los preparativos, y sobre todo el día de la boda, olvidarte de todo y si pasa algún imprevisto, no pasa nada. Serán solo anécdotas para recordar de un día inolvidable".

Henar quiere agradecer especialmente su trabajo a los proveedores que estuvieron junto a ellos el día de la boda:

• Vestido: Valenzuela
• Chaqué: Lander Urquijo 
• Maquillaje y peluquería: Ika Sánchez Fr 
• Fotografía y vídeo: Instantánea y Tomaprimera
• Ramo y decoración: By The Flower Power 
• Finca: Palacio de Aldovea 
• Catering: Aldovea 
• Zapatos: Calzados Franjul 
•  DJ: Hey Mickey Events 
• Música: Coro del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid
• Invitaciones: Invitarte