Vestidos de novia para bodas de 2025: tendencias clave para la próxima temporada

Cuando se trata de dar con el vestido de novia perfecto, ser previsora resulta esencial. Los expertos recomiendan comenzar a buscarlo de nueve a seis meses antes de la boda, por eso estas fechas pueden ser perfectas para imaginar ya el que puede convertirse en el look de tus sueños. Y es que esta semana ha tenido lugar en Madrid una de las citas más esperadas en el calendario de la moda nupcial: Atelier Couture ha celebrado su 11ª edición en el Palacio de Santoña, con dos días de desfiles en los que ha vuelto a quedar claro el saber hacer del made in Spain en este sector. Las firmas españolas han presentado sus colecciones para el 2025, entre las que destacan tendencias clave como estas.

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Capas largas

Desde hace unas cuantas temporadas, este complemento se ha convertido en uno de los mejor valorados tanto por invitadas como por las novias. Las capas ya no se limitan solo a looks de invierno, sino que se mantienen entre las propuestas nupciales de manera atemporal. Modelos fluidos, bordados o lisos con marcadas hombreras, como este de ASN Madrid, no faltarán el año que viene.

El triunfo del pantalón

Una alternativa que cada año se aleja más de lo poco convencional, para consolidarse como una apuesta recurrente, especialmente en bodas civiles o como segundo look nupcial. En la pasarela, firmas como Susana Hidalgo o Lucía Cano defienden el pantalón en su versión de tiro alto e incluso con transparencias.

Mangas con volumen

Son capaces de transformar por completo hasta el vestido más sencillo: muchas novias prefieren centrar su atención en solo un elemento del look, haciendo de las mangas las auténticas protagonistas. Algo que firmas como María Diezma logra con siluetas abullonadas o de farol.

Guantes largos

Casas como Ogadenia Couture recuperan este elemento propio de los estilismos de la realeza, algo que cobra sentido en su colección, bautizada como Reina de Reinas e inspirada en el armario de mujeres históricas, como Josefina Bonaparte e Isabel de Baviera. 

Flecos

Las prometidas más bohemias están de enhorabuena: este adorno tan asociado a la estética boho chic, aterriza en un considerable número de looks vistos sobre la pasarela. Sara Omatos incluye los flecos en su nueva colección, Esencia, a través de las capas.

Escote en la espalda

Ovalados, pronunciados, en forma de V... Si hay un elemento que ha puesto en común a los diseñadores de cara al 2025, son los escotes que dejan al descubierto la espalda, especialmente en vestidos abotonados que ensalzan la figura, como los de Inmaculada Rodrigues.

Americanas

Ya sea para acompañar conjuntos con faldas largas, junto a vestidos sin mangas, o como propone Susa Hidalgo en su colección Yakamoz, protagonizando este 'vestido-blazer' corto y con volantes en las mangas, dos características que se repiten a menudo sobre esta pasarela.

Novias con color

Una microtendencia con la que no se atreven muchas novias, pero que ha quedado reflejada en la pasarela de la mano de diseñadores como Ogadenia Couture, Diazar o Jordi Dalmau. Este último apuesta por el vibrante rojo en capas de novias, pero también en vestidos maximalistas con volúemens, y se anima incluso con tonos como el lila o el morado.

Conjuntos de dos piezas

Las nuevas novias huyen cada vez más de las líneas más clásicas, y aunque los vestidos continúan siendo la opción favorita para dar el 'sí, quiero', los conjuntos de dos piezas ganan terreno. Consiguen el mismo efecto deslumbrante, pero con un toque original que los hacen menos previsibles. Falda larga y cropped top junto a una capa-chaleco, es la propuesta de Sara Omatos.

Tocados

Accesorios para el cabello como los sombreros, las maxipamelas o, en el caso de Ogadenia Couture, opciones más discretas como las diademas, también han estado muy presentes. Tiaras de pederería que completan looks románticos pero con un toque arriesgado dado por las transparencias, que el próximo año veremos mucho.

Vestidos transformables

Las novias que apuestan por un único vestido tanto para la ceremonia, como para el banquete y la fiesta, han hecho de estos diseños con detalles desmontables unos auténticos aliados. Y es que permiten ir desprendiéndose de elementos según avanza la velada, como la capa o el cinturón. En la imagen, una de las novias de Lucía Cano.