La pedida es la antesala de la boda y, como tal, la novia comienza a pulir su estilo nupcial de cara al gran día. Mientras probamos diferentes looks y estilos para esta celebración tan especial, conversamos con nuestra protagonista, la influencer y directora creativa Melissa Villarreal sobre su petición de mano, los preparativos de su boda y su look perfecto para la pedida de sus sueños.
-Enhorabuena por tu compromiso. ¿Cómo te lo pidió?
-¡Muchísimas gracias! Desde que empezamos a salir, Edu y yo hablábamos con naturalidad del futuro y de una vida juntos. Ambos queríamos casarnos y sabíamos que pronto, pero, aún así, ¡me pilló por sorpresa! Me lo pidió en un viaje a Maldivas, una mañana antes de entrar a hacer snorkel, algo que nos encanta hacer juntos. Fue supernatural y bonito, y muy nuestro. Nunca voy a olvidar su cara de ilusión y su sonrisa al arrodillarse y sacar el anillo. En ese momento, me enamoré todavía más de él y quería que se parara el tiempo.
La pedida es la ocasión perfecta para definir tu estilo como novia. Elige diseños ricos en detalles, como volantes, drapeados y mangas abullonadas
-En este reportaje, posas con looks de pedida. ¿Cómo te imaginas la tuya?
-Para mí la pedida es un momento especial para juntar a las familias y que nos den su bendición. Me imagino la mía así, tal cual, una tarde-noche sencilla, con nuestros padres, hermanos y abuelos viéndoles reír y hablar juntos.
-¿Cuál es tu look perfecto?
-Siempre me sorprende no ver de blanco a nadie en su pedida; para mí, es un color maravilloso y creo que es la ocasión perfecta para llevarlo.
Los estampados florales, el color y los diseños llenos de movimiento triunfan entre las prometidas más románticas
-¿Habéis pensado en cómo será vuestra boda?
-Nuestra boda será en mayo en Asturias. Estamos entusiasmados. Edu tiene familia asturiana y, además, ha veraneado allí toda su vida, lo que hace de Asturias un sitio aún más especial.
-¿Te ha dado algún consejo tu hermana Grace?
-Que disfrute del proceso y que lo haga a mi gusto totalmente, sin hacer lo que “se espera” de una boda.